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La difusión de helio y el Diluvio
La evidencia del decaimiento acelerado

La difusión de Helio en los cristales radiactivos demuestra que la tierra tiene cerca de 6.000 años de antigüedad, más menos 2.000 años. (Un rango de 4000 a 8000 años)

Definiciones técnicas:

Difusión Helio: esencialmente la fuga de helio a partir de material, en este caso, cristales de circón.

Zircón: un cristal que contiene uranio y torio, es común en el granito. Los zircones son radiactivos y hacen y pierden helio.

Decaimiento acelerado: un aumento de la radiactividad durante la primera parte de la semana de la creación y el Diluvio.

Radioactividad: la emisión de partículas de los núcleos atómicos.

El Helio es un subproducto de la descomposición del uranio. El gas Helio está atrapado dentro del granito e indica una tasa constante de descomposición. Cuando usted mira a una pieza de granito hay motas de mica en el mismo. En esas motas de mica existen cristales llamados zircones, que a menudo son mucho más pequeños que un grano de arena. De hecho, estos cristales de zircón se encuentran en muchos lugares, además de granito, incluyendo la arena de la playa, e incluso en el interior de las rocas lunares. Estos zircones son radiactivos, se forman en las rocas fundidas y se cree que son algunos de los minerales más antiguos de la tierra.138 A medida que la roca fundida se enfría, los zircones forman cristales y se apoderan de los átomos de uranio de la roca fundida alrededor de esta. 139

Estos átomos de Uranio no son completamente estables. De vez en cuando emiten una partícula alfa (dos neutrones y dos protones). Cuando esto sucede, la partícula alfa va a entrar un poco en el cristal y se detiene donde toma dos electrones y se convierte en un átomo de Helio. El Helio es liviano, de alta movilidad, es un átomo químicamente resbaladizo, lo que significa que no le gusta adherirse a ningún otro átomo. Se puede mover y salir del cristal de zircón. Es por ello que se utiliza gas de Helio para detectar fugas, debido a que es un efectivo escapista. Cuanto menor sea el zircón, más rápido fuga, y cuanto más caliente esté el zircón, más rápida será la fuga. La velocidad a la que esto ocurre es muy importante porque nos da una manera de estimar la edad del zircón por la fuga del gas Helio.

Examinando la fuga de Helio de los cristales de zircón que fueron producidos por grandes cantidades de desintegración radiactiva, tenemos evidencia de la época en que tuvo lugar el decaimiento acelerado. Dado que el Helio fuga tan fácilmente y de manera constante de los cristales de zircón, no debería haber habido trazas de helio después de 4,5 mil millones de años (que es la estimación más reciente de los científicos que creen en la evolución). Estos elevados niveles de Helio en el zircón no pueden sostenerse por más de unos pocos miles de años. Debería haberse fugado todo hasta ahora.

Debido a la cantidad de helio que encontramos hoy en los cristales de zircón, y dada la rapidez con que el Helio escapa, parece que cantidades masivas de desintegración radiactiva ocurrieron hace sólo unos 6.000 años, en el tiempo del Diluvio. Esta evidencia muestra que la desintegración nuclear no ocurrió lentamente sobre un supuesto de 4.5 mil millones de años, sino más bien ocurrió en unos 6.000 años.

El hecho de que aún quedan niveles significativos de Helio en los cristales de zircón es evidencia de que Dios aceleró drásticamente las tasas de descomposición los núcleos de vida media larga durante el Diluvio. Tal deterioro acelerado colapsa las “edades” uniformitas a la escala de tiempo de la Escritura de miles de años.140 Por lo tanto, si bien es cierto que las tasas de descomposición fueron alguna vez mucho más rápidas de lo que son hoy en día, es lógico pensar que debe haber otros signos que fundamenten esta evidencia. Vamos a considerar las pistas de fisión y radiohalos, que son otro tipo de evidencia física en rocas.

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