Bg – Pedro va a la casa de Cornelio 10: 23b-48

Pedro va a la casa de Cornelio
Los gentiles son salvos
mediante la predicación de Pedro
10: 23b-48

38-42 dC

Pedro va a la casa de Cornelio ESCUDRIÑAR: Dada la experiencia de Pedro en 10:9-23 y lo que usted ve de Cornelio aquí, ¿qué imagina que sentía cada hombre al saludarse unos a otros? Los judíos consideraban paganos, incluso a personas como Cornelio, a menos que asumieran el yugo de la Torá (15:7-11). Sabiendo eso, ¿qué habría significado el versículo 28 para Pedro? ¿Y para Cornelio? ¿Por qué es tan importante la historia de Cornelio en los versículos 28, 34-35 y 43? ¿Cuál es el punto principal del discurso de Pedro? ¿Cómo se compara eso con sus discursos en 2:36-39 y 3:17-23? De estos sermones, ¿qué considera central en el mensaje del evangelio? A la luz de la reacción de asombro de los judíos en el versículo 45, ¿cuál fue el propósito de que los gentiles hablaran en lenguas? ¿Cómo refuerza esto la visión privada de Pedro en 10:9-23?

REFLEXIONAR: Usando esta historia, cómo respondería a la pregunta: “¿Pueden ser salvas las personas que nunca han escuchado el evangelio? Si su respuesta es “sí”, ¿por qué entonces Dios envió a Pedro a predicar (vea también 11:4)? Si es “no”, ¿cómo explica los versículos 34-35? ¿Hacia qué tipo de personas siente usted prejuicios? ¿Cómo ha evolucionado eso? ¿Qué evidencia hay de que la lección de la visión de Pedro ha llegado a usted con respecto a estas personas? Considere la composición de su iglesia o comunidad mesiánica. ¿Hay algunos tipos de personas que simplemente asumirían que el lugar donde usted adora no es para ellos? ¿Qué podría usted cambiar para eliminar esas barreras?

Al día siguiente, Pedro levantándose, fue con ellos, junto con algunos de los hermanos de Jope (10:23b). Siglos antes de esto, otro judío había llegado a Jope con otro mensaje solemne de Ha’Shem (vea el comentario sobre Jonás, haga clic en el enlace Aj La Palabra de la SEÑOR vino a Jonás: ve a Nínive y predica contra ella). Jonás tomó un barco de Jope; sin embargo, huyó del llamado de Dios, y no compartió el corazón de ADONAI por los perdidos. Pedro, sin embargo, estaba dispuesto a reexaminar sus tradiciones y prejuicios a la luz de la palabra de Dios, y compartió el corazón de ADONAI por los perdidos. ¿Es usted un Jonás o un Pedro? 226

Y al día siguiente, levantándose, fue con ellos, junto con algunos de los hermanos de Jope (10:23b). Y el Espíritu me ordenó ir con ellos sin dudar. Y estos seis hermanos fueron también conmigo, y entramos en la casa del varón (11:12). Esta fue una decisión muy sabia de su parte para que ellos pudieran servir como testigos, lo cual harían en el Capítulo 11 cuando Pedro sería confrontado por los creyentes judíos con respecto a su afirmación de que la salvación había llegado a los gentiles. En obediencia a la orden que recibió en su visión, Pedro regresó a Cesarea con los dos sirvientes y el soldado que Cornelio había enviado. Esta decisión aparentemente insignificante por parte de Pedro se vuelve extremadamente importante más adelante en la historia.

Y al día siguiente entró en Cesarea. Y Cornelio había invitado a sus familiares y amigos íntimos, y los estaba esperando (10:24). Dos mundos estaban a punto de chocar, cuando siete devotos judíos ortodoxos estaban a punto de encontrarse con una casa llena de gentiles piadosos. Se había alcanzado un hito. Mientras tanto, Cornelio los esperaba con fe, y no había estado ocioso. Anticipando ansiosamente lo que Pedro tendría que compartir con él, había convocado a sus familiares gentiles y amigos íntimos. Aunque Cornelio conocía las actitudes de los judíos hacia los gentiles, no tenía dudas de que Pedro llegaría.

Los rabinos enseñaban que al entrar en la casa de un gentil se contaminarían. El mismo polvo de una casa gentil era inmundo y contaminado por el contacto. Se lo consideraba como una tumba, o como la putrefacción de la muerte: impuro, contaminado y contaminante todo lo que tocaba.

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Y cuando Pedro fue a entrar, Cornelio, al encontrarse con él, cayó a sus pies adorándolo (10:25-26). Cuando Pedro entró, mostró que su corazón y su mente habían cambiado, y que había aprendido la lección de su visión (vea BfLa visión de Pedro). Cornelio se postró a sus pies para darle la bienvenida, y también para honrarlo como mensajero de Dios, pero no para adorarlo (como lo han traducido algunas versiones). Como temeroso de Dios, Cornelio lo habría sabido mejor. Sin embargo, la respuesta de Pedro: ¡Levántate, que yo mismo soy hombre! (10:26), muestra que interpretó mal lo que Cornelio hizo como un acto de idolatría que se esperaba de un pagano.227 Observe que Pedro, este llamado primer “Papa”, no permitiría que nadie se arrodillara ante él.

Y conversando con él, entró y halló a muchos que se habían reunido (10:27). Y encontró un grupo de gentiles expectantes y ansiosos por escuchar la interpretación que Cornelio había visto. Esto fue muy importante. No hay ningún registro de que ADONAI hubiera ordenado a Cornelio que reuniera a ese pueblo, sin embargo, su presencia era evidencia de la divina providencia usando la voluntad de Cornelio. Si tan solo Cornelio hubiera sido salvo, la comunidad mesiánica/iglesia en Jerusalén quizás lo hubiera considerado simplemente una anomalía. Pero, dado que un grupo de gentiles fue salvo, los judíos tendrían que aceptar que Dios estaba incluyendo a los gentiles en la comunidad del Mesías.228

Entonces, Pedro necesitaba explicar por qué él, un judío devoto (que también era creyente), entró en la casa de un gentil. Entonces, explicó el mensaje que recibió en la visión, dándose cuenta de que YHVH no estaba hablando sólo de comida. Dirigiéndose a este grupo de gentiles, les dijo: Vosotros sabéis cuán abominable es para un varón judío reunirse o asociarse con un extranjero, pero Dios me ha mostrado que no llame común o inmundo a ningún hombre (10:28). La Ley Oral no permite que un judío visite a un gentil (vea el comentario sobre La vida de Cristo EiLa Ley Oral). Vea Juan 4:9, 18:28; Hechos 11:2-3, 22:21-22; Gálatas 2:12. Ésa era la norma según la cual Pedro había vivido su vida. Sin embargo, Pedro dijo: pero Dios me ha mostrado que no llame común o inmundo a ningún hombre. Pedro había captado la analogía entre la comida impura y el gentil. Ambos habían sido declarados kosher. Entonces, basado en la visión, vine sin vacilación al ser llamado. Así que pregunto: ¿Por qué causa me llamasteis? (10:29). Todavía no estaba seguro de por qué estaba presente en casa de Cornelio.

Y Cornelio dijo: Hace cuatro días estaba orando en mi casa, a esta hora, la novena, y he aquí un varón con vestidura resplandeciente se puso delante de mí, y dijo: Cornelio, tu oración fue oída, y tus limosnas fueron recordadas delante de Dios. Envía, pues, a Jope, e invita a Simón, quien es llamado Pedro; éste posa en casa de Simón, un curtidor, junto al mar. Así que, enseguida envié a ti, y tú hiciste bien en venir. Ahora, pues, todos nosotros estamos aquí delante de Dios para oír todo lo que el Señor te ha ordenado (10:30-33). Orar a la hora novena era llamado minjá. Cornelio agradeció a Pedro por romper la costumbre judía. Ahora bien, a la luz de todo lo ordenado (griego: prostásso, refiriéndose a una orden militar) por parte del Señor, como militar, entendía que, una orden militar exigía obediencia. Estaba listo para recibir sus órdenes del Señor.

Así que Pedro y Cornelio habían sido preparados soberanamente por YHVH y habían respondido obedientemente a Sus instrucciones. Todo estaba listo para la presentación del evangelio por Pedro, que resultaría en la salvación de Cornelio, sus familiares y amigos cercanos.229 Pedro no podía tener una audiencia mejor preparada que ésta, y se apresuró a aprovecharla.

Entonces Pedro tomó la palabra y dijo: En verdad comprendo que Dios no hace acepción de personas (8:34). En algunas versiones dice: abrió la boca. La frase “abrir la boca” se usa cuando va a seguir algo de gran importancia. Luego comenzó a derribar lo que quedaba de la barrera que separaba a judíos y gentiles con su nueva visión. La verdad de las palabras de Yeshua: Tengo otras ovejas, que no son de este redil (Juan 10:16a), se habían hecho realidad para él. En realidad, esto no debería haber sido algo nuevo para ningún judío porque Dios le dijo a Abraham: Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré y engrandeceré tu nombre, y serás bendición. Bendeciré a los que te bendigan, y maldeciré al que te maldiga, y en ti serán benditas todas las familias de la tierra (Génesis 12:2-3).

Abraham necesitaba ser más que un destinatario; ADONAI dijo que Abraham sería una bendición (12:2b). Por lo tanto, con cada bendición superior viene una responsabilidad final. Como él fue bendecido, se convertiría en una bendición para los demás. Esta promesa ha sido considerada, con razón, como una de las primeras promesas del Salvador venidero, que traería salvación a todas las naciones. Dios había dejado claro hacía mucho tiempo que el Salvador nacería en la familia humana como la Simiente de la mujer (3:15), y ahora a Abram le quedó claro que esto se lograría a través de su propia familia.230

Se podría pensar que Pedro se habría dado cuenta de esto antes. Había pronunciado las mismas palabras en la columnata de Salomón después de la curación del cojo en la Puerta Hermosa (3:25): y en ti serán benditas todas las familias de la tierra (Génesis 12:3b). Sin embargo, la realidad de eso no se había asimilado hasta su visión del Señor (vea Bf La visión de Pedro). Abraham iba a convertirse en un canal de bendición para todo el mundo, no sólo para los judíos. Esto se extendería a los gentiles (Romanos 11:11-24). Y la Escritura, previendo que por la fe Dios declara justos a los gentiles, proclamó de antemano las buenas nuevas a Abraham: En ti serán benditas todas las naciones (Gálatas 3:8). Ellos son aquellos para quienes Abraham sería una bendición. Esta es la única promesa que va más allá de Israel y sería reafirmada a todos los patriarcas, luego se reafirma a Abraham en 22:15 y 18, se reafirma a Isaac en 26:3-4, y a Jacob en 28:14. Esta bendición se lograría a través de la simiente de Abraham, el Mesías. Como señalaron los profetas, es a través de Él, que los gentiles recibirán bendiciones espirituales (Isaías 42:1, 6, 49:5-6 y Amós 9:11).

Pero finalmente, Pedro realmente entendió lo que Abraham quería decir, superó sus prejuicios culturales, fue obediente a su visión e inmediatamente fue al meollo del asunto cuando dijo: En verdad comprendo que Dios no hace acepción de personas, sino que de toda nación se agrada del que le teme y hace justicia (10:34-35). Algunos han entendido mal que este versículo enseña universalismo, que YHVH acepta a todos los que son sinceros en base a sus obras. Sin embargo, eso es obviamente inconsistente con la enseñanza bíblica y absurdo. Si Cornelio y los demás ya eran salvos, ¿qué hacía Pedro allí predicando que es sólo a través del nombre de Yeshua que pueden ser salvas las almas (10:43)? Pedro simplemente está expresando la realidad de que el Ruaj HaKodesh está obrando en el corazón del pecador (Juan 16:8-11; Hechos 11:18; Segunda Timoteo 2:25). En otras palabras, Dios había obrado en el corazón de Cornelio para que buscara conocer y obedecer a Dios, y cuando escuchó la verdad salvadora del evangelio, respondió con entusiasmo.231

Luego Pedro pasó al tema principal del evangelio, es decir, que la salvación viene a través del Mesías Yeshua a cualquier persona de cualquier nación, ya sean judíos o gentiles. Él envió palabra a los hijos de Israel, proclamando la paz por medio de Jesús el Mesías, quien es Señor de todos (10:37). El griego logos se traduce como palabra. Cesarea era la sede del gobierno romano en Judea, por lo que Pedro pudo afirmar a Cornelio y a los demás: vosotros sabéis la palabra que se divulgó por toda Judea, comenzando desde Galilea, después del bautismo que proclamó Juan (10:37). Luego Pedro resumió la vida y ministerio de Yeshua el Mesías. Respecto a Jesús de Nazaret: Cómo Dios lo ungió con el Espíritu Santo y poder. Éste anduvo haciendo el bien y sanando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con Él (10:38). Para hacer Su obra (en cumplimiento de Isaías 61:1-3).

Como apóstol, Pedro confirmó que todo lo que habían oído sobre el ministerio de Yeshua era verdad: Y nosotros somos testigos de todas las cosas que hizo, tanto en la región de los judíos como en Jerusalén. A Éste mataron colgándolo en un madero (10:39), (vea el comentario a Gálatas BkMaldito todo el que es colgado en un madero). A Éste levantó Dios al tercer día, y le concedió hacerse visible, no a todo el pueblo, sino a unos testigos designados de antemano por Dios, a nosotros, que comimos y bebimos con Él después que resucitó de entre los muertos (10:40-41). Vea Isaías 65:1. La elección de Dios de revelar a Yeshua resucitado a sólo 500 creyentes (Primera Corintios 15:5-8) no excusa la incredulidad, porque hay suficiente evidencia para convencer a una persona razonable y de mente abierta. Además, nunca hay pruebas suficientes para la incredulidad. Y nos mandó que proclamáramos al pueblo, y declaráramos solemnemente que Éste es el Juez de vivos y muertos designado por Dios. De Éste dan testimonio todos los profetas: Todo el que cree en Él, recibe el perdón de pecados por medio de su nombre (10:42-43).

Yeshua será el Libertador o el Juez de todos.

Estos fueron los puntos del sermón de Pedro a estos gentiles temerosos de Dios: Yeshua es enviado por Dios y todavía está vivo. Él será el juez final de todos los seres humanos. El TaNaJ apunta hacia Él. Aquellos que confían en Su misericordia serán perdonados de sus pecados a través de Su nombre, es decir, por quién es Él y lo que ha hecho. 232

Aún estaba hablando Pedro estas palabras, cuando el Espíritu Santo cayó sobre todos los que oían la palabra (10:44). Cornelio y toda su casa creyeron en Yeshua como el Mesías, y como resultado, su discurso fue dramáticamente interrumpido por el Ruaj Ha- Kodesh. Vea el comentario sobre La vida de Cristo Bw – Lo que Dios hace por nosotros en el momento de la Fe). Y los fieles de la circuncisión que habían ido con Pedro se asombraron de que también sobre los gentiles había sido derramado el don del Espíritu Santo, porque los oían hablando en lenguas y magnificando a Dios (10:45-46). Los seis creyentes que vinieron con Pedro (Hechos 11:12) desde Jope quedaron asombrados porque el regalo del Ruaj HaKodesh había sido derramado incluso sobre los gentiles. El hecho de que las congregaciones de Dios no fueran exclusivamente judías, debe haberles sorprendido por completo. Sin embargo, difícilmente podían negar lo que estaba sucediendo ya que los escuchaban hablar en diferentes idiomas y magnificar a Dios (en ninguna parte la Biblia enseña que el don de lenguas sea otra cosa que idiomas humanos).233 Este pasaje no enseña que normalmente se espera hablar en idiomas con la llegada del Espíritu Santo. El Espíritu de Dios lo concedió en esta ocasión como prueba visible de que Pedro en verdad tenía las llaves del Reino, y ADONAI en verdad moraba en esos gentiles. Cabe señalar que aquí, como en Hechos, hablar en lenguas es un fenómeno grupal, no individual.

Aquí pasó lo mismo que pasó en Samaria. Esta fue una época de transición. Si no hubiera habido evidencia visible del Ruaj HaKodesh, Pedro y los demás no se habrían convencido tan rápidamente de que los gentiles ahora, eran parte del cuerpo del Mesías. Así como fue, los creyentes judíos vieron una demostración irrefutable de que aquellos gentiles estaban en el Mesías (Efesios 1). Pedro inmediatamente concluyó: ¿Puede acaso alguno impedir el agua, para que no sean bautizados éstos que también han recibido el Espíritu Santo como nosotros? (10:47). Obviamente, Pedro equiparaba recibir el Espíritu de Dios con la salvación. Los gentiles habían recibido el mismo Ruaj HaKodesh que había llegado a los judíos. La norma es recibir la salvación y la recepción del Espíritu de Dios al mismo tiempo (vea el comentario a La Vida de Cristo Bw – Lo que Dios hace por nosotros en el momento de la Fe).234

Una mirada más cercana a las llaves del Reino: En Cesarea de Filipo, Pedro declaró que Yeshua era el Mesías, el Hijo del Dios vivo. En respuesta, Jesús dijo: Yo os daré las llaves del reino de los Cielos (vea el comentario a La Vida de Cristo Fx – Sobre esta roca edificaré mi iglesia). Siempre que la palabra llave o llaves se usa simbólicamente en la Biblia, simboliza la autoridad para abrir o cerrar puertas (Jueces 3:25; Primera de Crónicas 9:27; Isaías 22:20-24; Mateo 16:19a; Apocalipsis 1:18, 3:7, 9:1 y 20:1). Pedro será el encargado de abrir las puertas de la Iglesia. Tiene un papel especial en el libro de los Hechos. En la Dispensación de la Torá (Ley), la humanidad fue dividida en dos grupos, judíos y gentiles. Sin embargo, en la Dispensación de la Gracia, por lo que sucedió en el período intertestamentario, hubo tres grupos de personas, judíos, gentiles y samaritanos (Mateo 10:5-6). Pedro sería la persona clave (juego de palabras) para traer a los judíos (Hechos 2), los samaritanos (Hechos 8), y los gentiles (Hechos 10) a la Iglesia al recibir el Espíritu Santo.

Una vez que Pedro abrió la puerta, permaneció abierta.

A medida que avancemos en el libro de Hechos, estaremos comparando la forma en que la salvación llega a los judíos, los samaritanos y los gentiles, mostrando, como fue el caso con la forma en que Yeshua sanaba, no hay un orden establecido. Hechos es un libro de transición y un libro histórico, y no se puede establecer una doctrina basada en la historia. La doctrina se basa en declaraciones teológicas claras. Los hechos históricos pueden ilustrar la doctrina, pero no pueden desarrollarla por sí solos.

El don de idiomas (lenguas) se puede ver cuatro veces en el libro, Hechos 2, Hechos 8, Hechos 10 y Hechos 19. No existe un orden establecido que conduzca a la inmersión en el Espíritu y el subsecuente hablar en lenguas. Aquí en Hechos 2, cuando la salvación llegó a los judíos, el orden fue primero el arrepentimiento, luego la inmersión en agua y luego recibir la inmersión en el Espíritu mediante el Ruach HaKodesh, como se evidencia al hablar en idiomas. En Hechos 8 con la salvación llegando a los samaritanos, el orden fue este, primero creyeron, luego vino la inmersión en agua, luego llegaron los apóstoles, luego impusieron sus manos sobre los samaritanos, y luego recibieron la inmersión en el Espíritu Santo como lo demuestra el hablar en idiomas. Una vez más, no se construye doctrina sobre la historia. Tengan presente este orden y veremos en qué se diferenciaba con los samaritanos, los gentiles y los discípulos de Juan. Aquí en Hechos 10, con la salvación llegando a los gentiles, el orden fue primero creer en Yeshua como el Mesías, la inmersión espiritual por el Ruaj HaKodesh como lo evidencia el hablar en idiomas, y finalmente, la inmersión en agua.

Para comprender las diferencias en las cuatro apariciones de los idiomas en Hechos, haremos seis preguntas a medida que lleguemos a cada pasaje. Sin embargo, el elemento común clave en los cuatro casos, es que los idiomas (es decir, las lenguas) tienen como finalidad la autenticación.

1. ¿Quién lo recibió? Cornelio, su casa y sus amigos (10:24 y 44).

2. ¿Quiénes eran? Eran gentiles (10:1). Había una brecha mucho mayor entre judíos y gentiles que entre judíos y samaritanos. Al menos los samaritanos creían en los cinco libros de Moisés y fueron circuncidados. Todavía los gentiles no eran ninguna de las dos cosas. Por lo tanto, a los judíos les resultó más fácil aceptar que los samaritanos podían ser salvos que creer que los gentiles lo podían ser.

3. ¿Cuáles fueron las circunstancias? Como resultado de una revelación especial, Pedro fue a la casa de un gentil para presentar el evangelio. Y mientras lo hacían, el Espíritu vino a ellos, lo que provocó el estallido de lenguas (10:44 y 46).

4. ¿Cuál fue el medio? Como en Hechos 2, el medio fue directo. No hubo imposición de manos como en Hechos 8 con los samaritanos. La razón era que con los gentiles no había peligro de que establecieran una Iglesia rival como sucedió con los samaritanos. Era necesario que los samaritanos reconocieran la autoridad de los apóstoles para que no establecieran una iglesia rival en oposición a la Comunidad Mesiánica/Iglesia.

5. ¿Cuál fue el propósito en este contexto? La clave es darse cuenta de que el don de lenguas para los gentiles, como los judíos y los samaritanos, fue para autenticación. Para los gentiles, las lenguas autentificaron que el mensaje de Pedro era verdadero; para los judíos, las lenguas autentificaban que los gentiles estaban en igualdad de condiciones espirituales con ellos y podían ser salvos. Y más tarde Pedro usaría esta misma experiencia como evidencia para defender sus acciones primero, ante los judíos creyentes en Sión, y después, Pedro usó esta experiencia para demostrarle a la Comunidad Mesiánica/iglesia que los gentiles eran salvos por la fe sin la circuncisión; vea BhInforme de Pedro a Jerusalén, y vea Bs El Consejo en Jerusalén.

6. ¿Cuáles fueron los resultados? Primero, abrió la puerta de la salvación a los gentiles, preparando el camino para el ministerio de Pablo. Segundo, los gentiles fueron reconocidos como verdaderamente salvos por los apóstoles, otros creyentes judíos y el liderazgo de la comunidad mesiánica/iglesia.

Aquí, como siempre en el Brit Hadashah, la inmersión sigue a la salvación. Si Pedro y compañía no hubieran visto por sí mismos que el Ruaj HaKodesh vino sobre aquellos gentiles exactamente como sobre ellos mismos al hablar en otros idiomas (2:4), no los habrían sumergido. Entonces Pedro declaró: ¿Puede acaso alguno impedir el agua, para que no sean bautizados éstos que también han recibido el Espíritu Santo como nosotros? (10:47). La construcción griega exige una respuesta negativa. Al igual que con Pedro, fue necesario un acto sobrenatural de Dios para desalojar su resistencia a traer a los gentiles al Cuerpo de Cristo. Entonces, mandó que fueran bautizados en el nombre de Jesucristo. Después de esto, le rogaron que se quedara por algunos días (10:48) los que lo habían acompañado. Esos gentiles no fueron salvos al ser bautizados; fueron bautizados porque fueron salvos. Así, Pedro involucró a los judíos de Jope en aquel momento histórico, sabiendo que, cuando ellos regresaran a Jerusalén, él necesitaría todo el apoyo que pudiera reunir. El deseo de tener comunión con los creyentes es la señal de una fe salvadora genuina. Lidia expresó el mismo deseo después de su conversión (16:15).235 Esto implicaba inevitablemente tener comunión en la mesa, lo que ahora no presentaba ningún problema para Pedro. Sin embargo, constituiría una gran dificultad para los creyentes judíos más conservadores en Jerusalén.

La inclusión de los gentiles como iguales en la Comunidad Mesiánica/iglesia fue histórica. La última barrera había caído. Más tarde: después de mucha discusión, se levantó Pedro y les dijo: Varones hermanos, vosotros sabéis que, desde los primeros días, Dios escogió de entre vosotros que los gentiles oyeran por mi boca la palabra del evangelio y creyeran. Y Dios, que conoce los corazones, dio testimonio a favor de ellos, dándoles el Espíritu Santo igual que a nosotros; y nada discriminó entre nosotros y ellos, purificando por la fe sus corazones (15:7-9). Se abrió así la puerta para la difusión del Camino por todo el Imperio Romano gracias al esfuerzo incansable de Pablo (Saulo de Tarso).

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2024-11-01T12:35:26+00:000 Comments

Bf – La visión de Pedro 10: 9-23a

La visión de Pedro
10: 9-23a

38-42 dC

La visión de Pedro ESCUDRIÑAR: ¿Cómo preparó Dios a Pedro para llevar el evangelio a Cornelio? ¿Por qué era esto necesario? Mire Levítico 11:4-7, 13-19 y 29-30. Con estas restricciones, ¿cómo cree que se debió sentir Pedro cuando escuchó la voz que le decía que se comiera esos animales? ¿Por qué se repitió tres veces? ¿Qué significaría para él el nuevo principio dado en el versículo 15? ¿Cómo encaja esto en el contexto de Cornelio? ¿Qué podría estar sintiendo Pedro cuando aparecieron los hombres enviados por Cornelio? ¿Cómo podría el ejemplo de Yeshua en Lucas 7:1-10 animar también a Pedro a escuchar a estos hombres?

REFLEXIONAR: ¿Cuáles son algunos de los principios o creencias a los que usted se ha aferrado y que han bloqueado su capacidad de llegar a personas “diferentes” a usted? ¿Cómo se sentirían los que le rodean si usted supera esos límites? ¿Qué nuevas relaciones le ha dado Dios recientemente? ¿Cómo ha traído Él a estas personas a su vida? ¿Cómo se han influenciado mutuamente? ¿Dios ha abierto su mente sobre alguna forma de prejuicio en su vida? ¿Cómo le ha llevado Él a corregir estas tendencias? ¿Qué podría pasar si usted los cumpliera?

Mientras Pedro estaba en Jope, los acontecimientos avanzaban hacia una nueva etapa en su ministerio mientras Dios preparaba la entrada de los gentiles a la Comunidad Mesiánica/Iglesia (vea el enlace haga clic en Ah Buenas Nuevas Judías para los Gentiles). Dos acontecimientos condujeron al encuentro decisivo. Primero, un centurión romano, un temeroso de Dios, estaba orando cuando un ángel se le apareció y le dijo que enviara hombres a Jope y llamara a Simón, también llamado Pedro (10:3-8), y segundo, Pedro estaba preparado para recibir a estos hombres por medio de una visión, en la que se le mostró que ya no debía distinguir entre alimentos ritualmente limpios e inmundos. Y por lo tanto, por implicación, que podía sentirse libre de comer con los gentiles.

La gran extensión de esta historia (10:1-48) y la forma en que en realidad se cuenta dos veces (vea el resumen en 15:7-9) indican la gran importancia que Lucas le atribuye en el contexto de Hechos en su totalidad. Se trata de la cuestión decisiva en la historia de la primitiva Comunidad Mesiánica/iglesia, es decir, el reconocimiento de que el evangelio es tanto para los gentiles como para los judíos. Y deja claro que esto no fue meramente una decisión humana, sino que fue el resultado de la clara guía de Dios.218

Mientras tanto, de vuelta en Jope, ADONAI estaba preparando a Pedro para su monumental encuentro. La pregunta principal sería cómo trataría Dios con él. ¿Cómo lograría acabar con la intolerancia racial profundamente arraigada de Pedro? El tema principal de este capítulo no es tanto la conversión de Cornelio sino la comprensión de Pedro.219

En casa de Simón el curtidor, al día siguiente, mientras ellos viajaban y se acercaban a la ciudad, Pedro subió a la azotea a orar, cerca de la hora sexta (10:9), vea Be La Visión del Centurión. El grupo de hombres parece haber partido inmediatamente hacia Cesarea para llegar a Jope alrededor del mediodía (10:8). Una guemará (un análisis y comentario rabínico de la Ley Oral) sobre el Shabat distingue dos momentos para la minjá (oración de la tarde): el tiempo mayor, o de primera hora de la tarde, que se recitaba alrededor de las 12:30 pm, y el menor, o último momento de oración, tiempo de oración de la tarde, se recitaba en algún momento entre las 3:30 pm y la puesta del sol (Shab. 9b).220 Según este punto de vista, Pedro estaba orando una minjá temprana. Los tejados de sus casas eran planos, ligeramente inclinados desde el centro. Se utilizaban para diversos fines durante el día, incluida la oración. Cuando le vino mucha hambre y quiso comer; y mientras le preparaban, le vino un éxtasis (visión) (10:10). El mediodía no era la hora habitual para comer. La costumbre era tomar una comida ligera a media mañana y una comida más sustanciosa al final de la tarde. Si Pedro se hubiera saltado el desayuno de media mañana, eso explicaría aún más su somnolencia. Sin embargo, mientras sus anfitriones preparaban la comida de la tarde, hubo un retraso inesperado, tuvo una visión (10:10). Cornelio había enviado mensajeros para llamar a Pedro, y ADONAI también estaba hablando con Pedro.221 Él estaba orando y tenía hambre.

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Observa que el cielo se abre y que desciende un objeto, como un gran lienzo, que es descolgado a la tierra por las cuatro puntas (10:11). Lucas está usando lenguaje figurado aquí. No era una gran sábana, pero era como una gran sábana. El TaNaJ usa frecuentemente la frase las cuatro esquinas para simbolizar el mundo entero (Job 37:3; Isaías 11:12; Apocalipsis 7:1). Aparentemente, debido a que tenía hambre, la visión de Pedro incluía comer. En el lienzo había de todos los cuadrúpedos y reptiles de la tierra y aves del cielo (10:12). La palabra visión proviene del griego: ekstasis, de donde deriva la palabra éxtasis. Levítico 11 especifica que sólo aquellos animales de cuatro patas que rumian y tienen pezuñas partidas son kosher (aptos) para el consumo de los judíos. La visión de Pedro no contradecía ninguna de las mitzvot relativas a la alimentación kosher; corrigió la prohibición rabínica de comer con Gentiles.222

Y vino a él una voz: Levántate, Pedro, mata y come (10:13). Los rabinos enseñaron que cuando Dios habla en el cielo, “la hija de su voz”, el bat-kol, o un eco, se escucha en la tierra. Después del último de los profetas, se consideró que Dios proveyó el bat-kol para continuar brindando orientación a la gente (Tratado Yoma 9b). ¿Cómo nos habla ADONAI? Él puede hablarnos a través de nuestras circunstancias, a través de creyentes maduros, ciertamente a través de Su Palabra. Todavía, Ha’Shem también puede hablar en voz baja y apacible (Primera de Reyes 19:11-13). La prohibición de comer animales impuros constituye una creencia judía central, y los judíos devotos frecuentemente eligieron el martirio en lugar de comer alimentos inmundos o prohibidos. Muchos en Israel estaban completamente decididos y se comprometieron a no comer ninguna cosa inmunda. Entonces, prefirieron morir, para no contaminarse con las comidas, y para no profanar el Pacto santo, y entonces murieron (Primera Macabeos 1:62-63; vea también Ezequiel 4:13-14; Daniel 1:8). Como habría estado cualquier judío piadoso, Pedro estaba horrorizado. Tenía hambre, pero no tanta para comer comida inmunda (no kosher), por lo que se quejó.

Pedro protestó inmediatamente: De ningún modo, Señor; porque ninguna cosa común e inmunda comí jamás (10:14). Había guardado celosamente los mandamientos dietéticos toda su vida, creyendo que YHWH exigía comer kosher. Su estricta observancia reflejaba su devoción por agradar a ADONAI. Todavía, él tenía a Dios como en una caja. ¿Cómo pudo Pedro deshacerse de ese hábito de toda su vida? ¿Qué iba a pensar él? Es importante entender que Yeshua no estaba aboliendo los mandamientos dietéticos de la Torá. Eso no sería consistente con Sus propias palabras: Porque de cierto os digo: Hasta que pase el cielo y la tierra, de ningún modo pasará una iota, ni un trazo de letra de la ley, hasta que todo se haya cumplido (Mateo 5:18; Lucas 16:17). En la Dispensación de la Gracia, tenemos libertad en el Mesías. Hoy en día hay muchos judíos y gentiles mesiánicos que optan por comer kosher. No hay nada bueno o malo en hacerlo. Es simplemente una cuestión de elección personal.

Pedro resistió el mensaje con tanta fuerza que la voz le habló de nuevo a él por segunda vez: De ningún modo llames común lo que Dios limpió (10:15). La voz del cielo o bat kol vino a él por segunda vez. Y ocurrió esto una tercera vez; y seguidamente el objeto fue recogido al cielo (10:16). Dios había hecho a todos los animales kosher en cumplimiento de la declaración de Yeshua que se encuentra en Marcos 7:18-19. Y debido a que el contexto es comer alimentos, muestra que la visión incluía tanto a los alimentos como su aplicación a los gentiles más adelante en el pasaje. ADONAI ha limpiado a los gentiles, pero también en el contexto inmediato, ha hecho no kosher animales kosher.

Ahora, en Mateo 15:15-20, el Mesías predijo que Él iba a limpiar toda carne. Sin embargo, en Mateo cuenta que esto estaba dirigido particularmente a Pedro en ese momento, y ahora Pedro debe aprender la lección una vez más. Todas las carnes ahora están limpias. En otras palabras: Lo que Dios ha hecho limpio (kosher), tú, Pedro, no debes considerarlo inmundo. Las normas dietéticas estaban tan arraigadas en su vida que todavía no podía comprender lo que estaba pasando, esos inmundos animales causarían contaminación. Esto sucedió tres veces para dar énfasis, y de repente el lienzo fue inmediatamente llevado al cielo (10:15-16). En ese momento, Pedro creyó que Dios le estaba hablando sólo de comida. Pero ésta fue sólo la primera parte de una analogía que el Señor aplicaría en breve a los gentiles. ¿Por qué ADONAI estaba haciendo esos cambios en ese momento? Porque los gentiles estaban entrando a la Iglesia, derribando el muro de división simbolizado en el Templo (Efesios 2:14).

Como Pedro estaba saliendo de su visión, no lo tenía todo descubierto. Y mientras Pedro estaba perplejo en sí mismo (qué sería la visión que había visto), he aquí los varones enviados por Cornelio, habiendo averiguado por la casa de Simón, aparecieron en la puerta (10:17). En ese momento, la llegada de los hombres a este punto, es claramente providencial. Y llamando, preguntaban: ¿Posa aquí Simón, al que llaman Pedro? (10:18). Pedro no los escuchó porque todavía estaba en el techo de la casa, pensando en su visión, sin embargo, su desconcierto, duró poco.

Pensando Pedro en la visión, el Espíritu dijo: He aquí, tres varones te buscan, así que levántate, baja, y ve con ellos sin dudar, porque Yo los he enviado (10:19-20). Levántate, pues, en seguida, baja y ve con aquellos hombres sin dudar, porque Yo mismo los he enviado. ¡En ese momento, Dios no le había dicho a Pedro que sus visitantes eran gentiles! Dios usó un ángel, el bat kol, el Ruaj HaKodesh, y dos visiones, una a Cornelio y otra a Pedro para que nada quedara al azar. Aquí estaba la situación, la visión estaba destinada a preparar a Pedro.

Al igual que Cornelio, Pedro obedeció, aunque probablemente todavía no entendía del todo lo que estaba sucediendo. Sin embargo, él bajó de la azotea. ¡Probablemente se sorprendió cuando abrió la puerta y vio a tres gentiles parados allí! Bajando entonces Pedro hacia los varones, dijo: He aquí, yo soy el que buscáis; ¿cuál es la razón por la que estáis aquí? (10:21). Debido a lo que el Espíritu Santo (Ruaj HaKodesh) le había dicho, estaba muy dispuesto a escucharlos. Sin embargo, la respuesta debe haber sorprendido a Pedro: ellos dijeron: Cornelio, centurión, varón justo y temeroso de Dios, y aprobado por toda la nación de los judíos, fue instruido por un santo ángel para hacerte ir a su casa, y oír algunas palabras de tu parte (10:22). Esta era información nueva para el lector, ya que Lucas la había guardado hasta este punto para aumentar el efecto literario y dramático de la historia. Pedro comenzó a ver las ramificaciones de su visión. Él iba a ser testigo de este centurión a quien le había dirigido Ha’Shem.

Note cuán perfectamente YHVH coordinó todo el episodio. Porque mientras Pedro oraba y veía su visión, los hombres de Cornelio se acercaban a Jope (10:9-16); mientras Pedro estaba desconcertado sobre lo que podría significar lo que había visto, llegaron a la casa (10:17-18); mientras Pedro reflexionaba sobre el significado de la visión, el Espíritu le dijo que los hombres lo estaban buscando y que no debía dudar en ir con ellos (10:19-20); y cuando Pedro bajó y se presentó a ellos, le explicaron el propósito de su visita (10:21-23).223

Entonces invitándolos a entrar, los hospedó. Y al día siguiente, levantándose, fue con ellos, junto con algunos de los hermanos de Jope (10:23). Como ya era demasiado tarde para regresar a Cesarea ese día, Pedro los invitó a pasar la noche como huéspedes suyos. En circunstancias normales, un judío verdaderamente escrupuloso nunca invitaría a un gentil a quedarse con él. Jubileo 22:16 dice: “Apártate de las naciones [gentiles] y no comas con ellas. Y no hagáis nada conforme a sus obras. No os asociéis con ellos, porque sus obras son inmundas. Y todos sus caminos son contaminación, abominación e inmundicia. Entonces, el hecho de que Pedro los invitó a pasar la noche como sus invitados, da a entender que estaba comenzando a comprender el mensaje de la visión. Al compartir con esos invitados gentiles, Pedro fue en contra de las costumbres y tradiciones de Israel, pero no en contra de la Palabra de Dios. Posiblemente, en ese mismo momento, el Ruaj HaKodesh inundó el corazón de Pedro con el entendimiento de que, aunque el TaNaJ decía que Su pueblo no debía llegar a ser como sus vecinos paganos, también decía que YHVH quería que Su pueblo fuera una luz para sus vecinos que no lo conocían.224 Por la descendencia de Abraham serían benditas todas las familias de la tierra (Génesis 12:3b). También puede haber alguna ironía intencionada aquí, ya que Pedro había protestado anteriormente por lo meticuloso que era con la comida mientras se hospedaba en la casa de un curtidor que en cambio lo hacía ¡inmundo!

Una mirada más cercana a las visiones y los sueños: Dios usa una variedad de formas de comunicarse con los humanos como, a través de visiones, señales y prodigios, ángeles, sombras bíblicas, patrones bíblicos, y muchos otros. Uno de los medios más comunes utilizados en la Biblia para transmitir Su voluntad es a través de los sueños (Números 12:6). La palabra sueños y su versión singular aparecen con mayor frecuencia en el libro de Génesis (33 apariciones en total), seguida por el libro de Daniel (27 veces). Ambas palabras (visiones y sueños) aparecen sólo ocho veces en todo la Biblia. Curiosamente, sólo José (Génesis 40:12, 13, 18, 19, 41:25-32) y Daniel (Daniel 2:16-23, 28-45, 4:16-24) fueron bendecidos con la capacidad de interpretar correctamente sueños.

Los sueños ocurren cuando una persona duerme, mientras que las visiones generalmente ocurren durante las horas de vigilia. Sin embargo, las Escrituras a veces no son completamente claras si Dios se está comunicando con alguien a través de un sueño o una visión. Por ejemplo, Daniel 2:19 afirma que un secreto le fue revelado al profeta en una ‘visión nocturna‘. Se desconoce si Daniel estaba o no durmiendo cuando ocurrió el evento. Otro ejemplo de sueños se encuentra en Daniel 7:1-2. Daniel ¿vio visiones justo antes de quedarse dormido y luego experimentó sueños, los cuales vinieron de Dios? Por otro lado, mientras soñaba, ¿tuvo él visiones vívidas de cuatro grandes imperios mundiales que luego escribió al despertar? La Biblia parece indicar que las visiones pueden ocurrir tanto durante las horas de vigilia como de sueño.

Los sueños de varias personas en el TaNaJ están registrados en las Escrituras. Incluyen a Ha’Shem diciéndole al rey Abimelec en un sueño que Sara era una mujer casada (Génesis 20:3), Jacob tuvo un sueño en Betel donde vio una escalera con ángeles de Dios subiendo y bajando por ella (Génesis 28:12-15), y veinte años después, ADONAI le habló en sueños, diciendo: Alza ahora tus ojos y verás que todos los machos que montan a las ovejas son listados, moteados y manchados, porque Yo veo todo lo que Labán te está haciendo (Génesis 31:12); Labán tuvo un sueño que le advertía que no hiciera daño a Jacob. (Génesis 31:24), José tuvo sueños en los que sus hermanos se inclinaban ante él y toda su familia hacía lo mismo (Génesis 37:5, 9); y el copero y el panadero tuvieron sueños en la cárcel que José interpretó (40:1-19); Dios le habló a un hombre a través de un sueño que los israelitas derrotarían a los madianitas (Jueces 7:13-15); Job tuvo sueños y visiones de ADONAI (Job 7:14); y el rey Saúl tuvo una visión aterradora del profeta Samuel que le describió la médium de Endor (Primera de Samuel 28:6-19).

Otros, de quienes la Biblia registra que tuvieron sueños especiales fueron el faraón de Egipto que soñó con siete vacas gordas y siete vacas flacas (Génesis 41:1-7, 15-32); el Señor se apareció a Salomón en un sueño para permitirle al rey pedir cualquier cosa que quisiera (Primera de Reyes 3:5); en el año de la muerte del rey Uzías, Isaías tuvo una visión de ADONAI sentado en Su trono (Isaías 6:1-2); Ezequiel tuvo una visión del trono de YHVH (Ezequiel 1:1-28), también tuvo una visión del Templo en Jerusalén (Ezequiel 8:1-18), una visión del Templo Milenial (Ezequiel Capítulos 40-48), y una visión de la gloria Shekinah entrando al templo (Ezequiel 43:3); el rey Nabucodonosor tuvo un sueño con una enorme estatua que representaba los cuatro reinos del fin de los tiempos (Daniel 2:3-4) y Daniel Tuvo un sueño sobre cuatro bestias que representan esos mismos cuatro reinos (Daniel 7:1-8), y una visión de un carnero y un macho cabrío que representa el ascenso del anticristo (Daniel 8:1-12).

En el Brit Hadashah, los sabios que vinieron a adorar a Jesús, soñaron que le decían que no visitara a Herodes el Grande en su camino de regreso a casa (Mateo 2:12). Los detalles de lo que José, el padrastro de Jesús, soñó en tres ocasiones diferentes está registrado en el Nuevo Testamento (Mateo 1:20-23, 2:12-13, 19-21). Y en un cuarto sueño, donde también se le advierte que no viva en Judea (Mateo 2:22). La esposa de Pilato tuvo un sueño perturbador sobre ella, por el juicio de su marido sobre Cristo (Mateo 27:19). El Señor le dijo a Ananías en una visión que fuera a buscar a Saulo de Tarso y le impusiera las manos, lo que resultó en que Saulo recuperara la vista (Hechos 9:10-17), y Pablo vio al Mesías cuatro veces en visiones (Hechos 9: 3-6, 16:10, 18:9-10, 22:17-18). No sólo eso, tanto Pablo (Segunda Corintios 12:4) como Juan (Apocalipsis 4:1-11) hicieron un viaje al cielo en una visión.

Pero algunos sueños o visiones eran falsos (vea Isaías 30:9-12)

Jeremías dijo lo mismo: Así dice YHVH Sebaot: No escuchéis a los profetas que os profetizan: Os llenan de vanas esperanzas, Visión sacada de su propio corazón, No de la boca de YHVH (Jeremías 23:16).

Y Ezequiel también advirtió contra los falsos profetas: ¿No habéis visto visión falsa, y no habláis adivinación mentirosa, pues que decís: ¡dice YHVH! cuando Yo no he dicho nada? Por tanto, así dice Adonay YHVH: Por haber dicho mentiras, y haber visto engaño, por eso aquí estoy contra vosotros, dice Adonay YHVH (Ezequiel 13:6-7)

Hoy, ADONAI nos habla con un suave susurro de Su voz (Primera de Reyes 9:11-12), por las circunstancias de nuestras vidas, el consejo de creyentes maduros y, por supuesto, el canon completo de las Escrituras, la Palabra de Dios.

Padre, tomo Tu Palabra clara como una advertencia cuando dices: Si en verdad cumplís la regia Ley según la Escritura: Amarás a tu prójimo como a ti mismo, hacéis bien; pero si hacéis acepción de personas, cometéis pecado y sois convictos por la ley como transgresores (Santiago 2:8-9). Confieso mi pecado de dejar que los gustos y preferencias controlen mi comportamiento hacia otras personas igualmente creadas a Tu imagen. No puedo solo darme cuenta de mi culpa; también debo realizar un cambio en la actitud.225

Ndt: Definición: voz del cielo, (bat kol) significa sonido, eco, tono y en la literatura talmúdica voz celeste, es decir, un eco de una voz del cielo, o una voz divina, que revela la voluntad, elección o juicio de Dios al hombre.

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2024-11-01T12:12:50+00:000 Comments

Be – La visión del centurión 10: 1-8

La visión del centurión
10: 1-8

38-42 dC
El reinado del emperador romano duró del año 41 al 54 dC

La visión del centurión ESCUDRIÑAR: ¿Qué clase de hombre era Cornelio? Dado que era parte de un ejército de ocupación, ¿qué es inusual en él? ¿y sobre este encuentro con ADONAI? ¿Cuál era el estado de las relaciones entre judíos y gentiles en ese momento? ¿Qué enseñaba la Biblia en el TaNaJ? ¿Qué puede decir usted sobre la división? ¿Qué cree que causó el cisma entre judíos y gentiles? ¿Qué cree que sintió Dios acerca de la diferencia?

REFLEXIONAR: ¿Alguna vez Dios ha hecho algo milagroso por usted? Si es así, ¿qué fue? ¿Por qué esa acción es importante para usted? ¿Qué significa reverenciar a Dios? ¿Eso lo describe a usted? ¿Por qué si o por qué no? Si le evaluaran por cómo trató a los demás esta semana, ¿qué dirían los demás? ¿Qué ofrenda conmemorativa presenta su estilo de vida ante el Señor? ¿Cómo lo desafía la vida de Cornelio?

El capítulo 10 es fundamental en el libro de los Hechos, porque registra la salvación de los gentiles. Vemos a Pedro usando las llaves del Reino por tercera y última vez (vea el comentario sobre La Vida de Cristo, Fx – Sobre Esta Roca Edificaré Mi Iglesia). Pedro había abierto la puerta de la fe para los judíos (vea An Pedro habla a la multitud en Pentecostés) y también para los samaritanos (vea Ba Simón el mago), y ahora sería usado por ADONAI para traer a los gentiles a las iglesias (congregaciones) de Dios (Gálatas 3:27-28; Efesios 2:11-22).

Este evento tuvo lugar unos diez años después de Shavuot. ¿Por qué esperaron tanto los apóstoles antes de ir a los gentiles perdidos? Después de todo, en Su Gran Comisión (Mateo 28:19-20), Yeshua les había dicho que fueran por todo el mundo y, por lo tanto, parecería lógico que fueran con sus vecinos gentiles lo antes posible. Pero YHVH tiene Sus tiempos, así como Sus planes, y la transición de los judíos a los samaritanos y a los gentiles fue gradual.

La lapidación de Esteban y la posterior persecución de los judíos helenísticos, marcaron el clímax del testimonio de los apóstoles a los judíos (vea Ax La lapidación de Esteban). Luego el evangelio pasó a los samaritanos. Cuando Ha’Shem salvó a Saulo de Tarso, ungió a Su enviado especial a los gentiles. Ahora era el momento de abrir la puerta de la fe (Hechos 14:27) a los gentiles y llevarlos a la familia de Dios.205

La narración comienza presentando al primer personaje principal. Su nombre era Cornelio, y habitaba en Cesarea. Muy probablemente recibió su nombre de Publio Cornelio Sila, el famoso general romano que en el año 82 aC liberó a diez mil esclavos, quienes posteriormente se mostraron tan agradecidos que adoptaron su nombre. Nuestro Cornelio bien puede ser descendiente de aquellos libertos.206 Lucas lo presenta como cierto varón. Esta designación frecuentemente marca a esta persona como notable de alguna manera (vea 5:1-11 y 34, 9:36-43, 14:8-10 y 19:13-17). Cesarea era una ciudad importante ubicada en la costa, aproximadamente a 105 kilómetros al noroeste de Jerusalén y 48 kilómetros al norte de Jope. Josefo describe la construcción de Cesarea por parte de Herodes hasta convertirla en una importante ciudad administrativa (Antigüedades 15.9.6). La capital de la provincia romana de Judea era un puerto marítimo, y la residencia del procurador. Tenía un anfiteatro, un hipódromo y un templo dedicado a César. Naturalmente, allí estaba estacionada una gran guarnición romana. Entre ellos estaba en Cesarea, cierto varón de nombre Cornelio, centurión de la cohorte llamada la Italiana (10:1). Una legión romana con todos sus efectivos constaba de 6.000 hombres y estaba dividida en diez cohortes de 600 hombres cada una. Un centurión comandaba a 100 de estos hombres, y cada legión tenía 60 centuriones, que eran considerados la columna vertebral del ejército romano. Ser oficial del ejército romano lo habría hecho aún más odiado por cualquier judío patriota. Como los otros centuriones mencionados en el Brit Hadashah, Cornelio había alcanzado su rango demostrando ser un hombre fuerte, responsable y confiable.

Teófilo (Lucas 1:3) quizás recordaría el encuentro de Yeshua con un centurión en Capernaum que fue descrito como muy respetado por la comunidad judía, muy parecido a Cornelio (vea el comentario sobre La vida de Cristo Ea – La fe del centurión). Los centuriones generalmente son representados de manera favorable a lo largo de los evangelios y Hechos. Esto bien puede ser evidencia del éxito de la evangelización temprana entre el ejército romano.207

Se puede decir que Lucas hace todo lo posible para dejar en claro que, ni Jesús ni sus discípulos eran antagonistas de la presencia romana en Oriente o en otros lugares, y que, de hecho, incluso los soldados romanos encontraron el Camino atractivo y digno de unirse (acerca del Camino vea: 9:2, 19:9 y 23, 22:4, 24:14 y 22).208 Además, el ejército romano funcionó como un agente de la “romanidad” mediante la observancia de un calendario de cultos oficiales, siendo frecuentemente definido por este motivo como un “oasis de libertad religiosa”. Algunos soldados aparentemente continuaron honrando a sus deidades locales además de los cultos oficiales, sin obstáculos ni objeciones; un centurión que vivía en Eretz (la tierra de) Israel aparentemente podría adoptar abiertamente ciertas prácticas judías.

Cornelio era un hombre devoto y adoraba al Dios de Abraham, Isaac y Jacob. Era piadoso y temeroso de Dios con toda su casa, que hacía muchas limosnas al pueblo y oraba a Dios continuamente (10:2a). Para el judaísmo dar a los pobres se denomina tzedaká. Como los temerosos de Dios no podían ir al templo a ofrecer sacrificios, comúnmente expresaban su compromiso con la sinagoga local, sirviendo como adeptos y donantes de la comunidad judía. En su evangelio, Lucas habla de otro centurión muy respetado que construyó una sinagoga para el pueblo de Cafarnaúm (ver arriba), tal vez como su principal donante, y otras personas dedicaron candelabros o lámparas (Arak. 6b).

Y oraba a Dios continuamente (10:2b). Las costumbres de la oración judía en la casa incluían la recitación del Shema (Deuteronomio 6:4). y Tefilá (Amidá) al levantarse y acostarse (Ber. 1:1ss, 4:1), bendiciones sobre la comida y gracias después de las comidas (Ber. 6:1ss), kiddish (la santificación del Shabat) (Ber. 8:1) y havdalá (la ceremonia que marca el final del Shabat y el comienzo de los días profanos de la semana) (Ber. 8:5). Sin embargo, sigue siendo especulativo, por un lado, cuánto conocimiento de estas costumbres poseería un temeroso de Dios, y cuántas practicaría por el otro.

La idea de la oración como “un servicio del corazón” (10:2) está en el centro de la intención detrás de todos los sacrificios (vea el comentario sobre Éxodo Fb – Las Cinco Ofrendas del tabernáculo: Cristo, Nuestra Ofrenda de Sacrificio). Una ofrenda sincera del corazón es aceptada por ADONAI como un aroma grato (Levítico 1:7-9).209 Sin embargo, el hecho de que una persona trajera un sacrificio al Tabernáculo o Templo no significaba que produjera el resultado deseado (eficaz). Si el corazón de la persona no estaba en ello, si él o ella simplemente estaba haciendo gestos de obediencia sin arrepentimiento sincero o agradecimiento, el sacrificio era en vano. La gente acude a los servicios de Shabat o a la iglesia todo el tiempo con corazones impenitentes, desagradecidos, resentidos con Dios, y sus oraciones rebotan en el techo (vea el comentario sobre Jeremías Cc – La religión falsa no tiene valor). El hecho de que usted se siente en el garaje no le convierte en un coche.

En otras palabras, se describe a Cornelio realizando la mayoría de los deberes típicos de un judío (oración, ayuno y limosna) y viviendo a la altura de la luz que tenía. La promesa de ADONAI es que, si las personas viven a la altura de la luz que tienen, entonces Dios se asegura de que reciban más luz, hasta que haya suficiente luz para tomar una decisión de salvación. Como Rut en el TaNaJ, este gentil temeroso de Dios había aceptado los dos elementos esenciales de la adoración verdadera (vea el comentario sobre Rut An – Tu pueblo será mi pueblo y tu Dios mi Dios). Primero, tu pueblo será mi pueblo. Aunque Cornelio no se unió oficialmente al pueblo judío, los cuidó como si fueran suyos. En segundo lugar, y vuestro Dios será mi Dios. Oró al Dios de Abraham, Isaac y Jacob. O mirándolo de otra manera, tenía obras provenientes de la fe (Romanos 1:5 y 16:26; Gálatas 5:6; Efesios 2:10 y Santiago 2:14), que es como el Brit Hadashah define la religión verdadera (Santiago 1:27), al igual que el TaNaJ (Miqueas 6:8; Eclesiastés 12:13).210

Cornelio tenía un corazón buscador; había estado a la altura de la luz que tenía y ADONAI estaba a punto de darle más. Éste es el equilibrio necesario para la elección divina: que Dios responde al corazón que busca y está dispuesto (Isaías 55:6-7: Jeremías 29:13; Juan 7:17). La elección divina y la responsabilidad humana son ambas enseñanzas claras de la Biblia. La salvación es tanto realizada por YHVH, como el creer por los pecadores. Aunque nuestra limitada comprensión no nos permite armonizarlos, no hay conflicto en la mente de Dios.211 Debido a la elección soberana de Cornelio por parte del Señor, y en respuesta a su corazón buscador, ADONAI se movió para prepararlo.

La diferencia entre Cornelio y muchas personas “religiosas” hoy es que, el centurión romano sabía que su devoción religiosa no era suficiente para salvarlo. Muchas personas religiosas hoy están satisfechas de que su carácter y sus buenas obras las llevarán al cielo, y no tienen ningún concepto ni de su propio pecado ni de la gracia de Dios. En sus oraciones, Cornelio le pedía a Dios que le mostrara el camino de la salvación (Hechos 11:13-14).212

Cornelio estaba ocupado en su tiempo diario de oración a las tres de la tarde, también conocida como la hora novena del día, Cornelio estaba orando. La referencia de Lucas a la hora novena parecería sugerir que algunos que vivían lejos de Jerusalén oraban a las mismas horas en que se sacrificaban las ofrendas en el Templo (Jud. 9:1). Este punto de vista está respaldado por la descripción que hace el ángel de las oraciones de Cornelio como ofrenda delante de Dios” (vea 10:4b abajo), que recuerda la descripción de parte de la Ofrenda de Cereal en el TaNaJ como ofrenda conmemorativa (en hebreo: azkara). Asimismo, Lucas afirma que la llegada de Pedro a la casa de Cornelio cuatro días después era exactamente la misma hora del día en que el ángel se le había aparecido a Cornelio mientras oraba (10:30).213 Vea Bg Pedro va a la casa de Cornelio.

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En ese momento, Cornelio tuvo claramente una visión (vea Bf La visión de Pedro: Una mirada más cercana a visiones o sueños). Esto no fue un sueño ni estaba sucediendo en la realidad. Esta visión surgió en el “ojo de la mente” de Cornelio. Al mismo tiempo, era tan vívido que después dice: Hace cuatro días estaba orando en mi casa, a esta hora, la novena, y he aquí un varón con vestidura resplandeciente se puso delante de mí (10:30).214, y me habló.

Como a la hora novena del día, vio claramente en una visión a un ángel de Dios yendo hacia él, que le decía: ¡Cornelio! Y él, mirándolo fijamente, y aterrorizado, dijo: ¿Qué pasa, Señor? Le dijo: Tus oraciones y tus limosnas subieron por memorial delante de Dios (10:3-4). El centurión lo miró con miedo a pesar de que reconoció que el ángel era un mensajero de Dios. Al igual que Pablo en el camino a Damasco, Cornelio se dirigió al ángel celestial con respeto y le dijo: ¿Qué pasa, Señor?

El ángel se apresuró a asegurarle a Cornelio que Dios era consciente de su piedad. diciéndole:como el humo del incienso, Tus oraciones y tus limosnas subieron por memorial delante de Dios (10:4b). El término memorial (que literalmente significa recuerdo) es un lenguaje sacrificial (Levítico 2:2, 9 y 16; Hebreos 13:15ss). Las oraciones y obras de caridad de Cornelio habían subido como el dulce olor de un sacrificio ofrecido sinceramente, muy agradable a YHVH (Filipenses 4:18).215 ADONAI conocía el corazón de Cornelio. Era un hombre devoto y lo adoraba hasta donde sabía. Pero a pesar de la sinceridad y devoción de Cornelio al Dios de Abraham, Isaac y Jacob, no pudo ser salvo sin una comprensión correcta del evangelio de Yeshua el Mesías (Hechos 4:12). Ha’Shem estaba haciendo arreglos para brindarle la salvación. Específicamente: Envía ahora, pues, unos varones a Jope, y haz venir a un tal Simón, llamado Pedro. Éste posa con cierto Simón curtidor, que tiene una casa junto al mar (10:5-6). Se menciona a Simón, también llamado Pedro, para distinguirlo de Simón el Curtidor con quien Pedro se hospedaba.

Cuando el ángel que le hablaba se fue, Cornelio, al estilo verdaderamente militar, respondió de inmediato. Todavía muy a oscuras sobre lo que Dios tenía pensado para él, cuando se fue el ángel que le hablaba, llamando a dos de los criados, y a un soldado devoto de los que lo servían constantemente, luego de explicarles todo, los envió a Jope (10:7-8). La palabra sirviente (griego: oiketes) se refiere a los sirvientes domésticos que se consideraban parte de la familia, a diferencia de los esclavos varones (griego: doulos). El texto griego añade que los tres lo atendían continuamente, que es una expresión clásica para “enfermeros”. Por lo tanto, Cornelio tuvo cuidado de elegir a sus servidores más confiables para ir a Jope y buscar a Pedro.216

Cornelio, luego de explicarles todo, los envió a Jope (10:8). Este fue un viaje largo, probablemente a caballo. Debieron salir inmediatamente porque llegaron al mediodía del día siguiente. En 10.9 dice: Al día siguiente, mientras ellos viajaban y se acercaban a la ciudad, Pedro subió a la azotea a orar, cerca de la hora sexta. Sin embargo, ¿por qué enviar por Pedro que estaba a 48 kilómetros de distancia en Jope, cuando Felipe el evangelista ya estaba en Cesarea? (Hechos 8:40) Fue porque a Pedro, no a Felipe, se le había dado las llaves del reino de los Cielos, y esa puerta no se podía abrir hasta que él la desbloqueara.

Nos resulta difícil comprender el abismo infranqueable que existía en aquellos días entre judíos, por un lado, y gentiles, por el otro. No es que el TaNaJ aprobara tal división. Por el contrario, junto con los oráculos contra las naciones gentiles, afirmó que YHVH tenía un propósito para los gentiles. Al elegir y bendecir a una familia, tenía la intención de bendecir a todas las familias de la tierra: Bendeciré a los que te bendigan, y maldeciré al que te maldiga, y en ti serán benditas todas las familias de la tierra (Génesis 12:3). Entonces, los salmistas y los profetas predijeron el día en que el Mesías heredaría las naciones (Salmo 2:7-8, 22:27-28, Isaías 2:1ff, 42:6, 49:6; Joel 2:28ff), el Siervo de Dios sería Su luz, todas las naciones irían al Santo Templo de Dios, y Ha’Shem derramaría Su Ruaj sobre toda la humanidad. La tragedia fue que Israel torció la doctrina de la elección en una doctrina de favoritismo, se llenó de orgullo racial y odió, despreció a los gentiles como “perros” y desarrolló tradiciones que los mantenían a ellos separados. Ningún judío ortodoxo entraría jamás en la casa de un Gentil, incluso temeroso de Dios, o invitar a tal persona a su casa (10:28). Por el contrario, toda interacción con los gentiles estaba estrictamente prohibida y ningún judío piadoso jamás se sentaría a la mesa con un gentil.217 ¡Sin embargo, estos tres gentiles iban camino a la casa de un judío para sentarse y hablar con él! ¿De qué podrían estar hablando durante su viaje de 50 kilómetros hasta Jope?

PÁGINA SIGUIENTE: La visión de Pedro Bf

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2024-11-01T11:50:01+00:000 Comments

Bd – Señales y milagros siguen a Pedro 9: 32-43

Señales y milagros siguen a Pedro
9: 32-43

38-42 dC

Los datos de Lucas para este período son claramente incompletos;
él está mejor informado sobre el período posterior al concilio de Jerusalén.

Señales y milagros siguen a Pedro ESCUDRIÑAR: ¿Cuál es el propósito de estas señales y prodigios (vea 2:22 y 43, 4:30, 5:12-14, 9:35)? Aunque Pedro había sanado a muchas personas, nunca había resucitado a nadie de entre los muertos. ¿Qué pudo haber sentido al entrar en la casa de Tabita? ¿A cuál de los milagros de Yeshua le recuerdan estos dos incidentes?

REFLEXIONAR: ¿Por qué Tabita pudo ser resucitada, pero Esteban murió, aunque Pedro estaba allí también (8:2)? ¿Cómo le explicaría los caminos de Dios a la viuda o a la madre de Esteban? ¿Cómo podría ayudarle a comprender lo que sucedió como resultado de la muerte de Esteban y la resurrección de Tabita? ¿Cómo ha experimentado la sanidad de Dios en su vida? ¿Qué resultó de esta curación para otros?

La escena ahora cambia de Saulo a Pedro, quien nuevamente será la figura central en la narración de los próximos tres capítulos. Ya sabemos que Saulo/Pablo será el emisario a los gentiles, porque los gentiles necesitan ser salvos (Génesis 12:3). Sólo Pedro podía hacer esto ya que él tenía las llaves del Reino. Saulo fue convertido y había proclamado audazmente su nueva fe tanto en Damasco como en Jerusalén. Su predicación había enfurecido tanto a sus oponentes quienes primero en Damasco, luego en Jerusalén, intentaron matarlo. En este punto había huido de Sión a su ciudad natal de Tarso. Diez años después, como se registra en Hechos 13, el ministerio de Pablo dominaría el resto del libro.200

La continua expansión de la Comunidad Mesiánica (iglesia) fuera de Jerusalén requirió el traslado por parte de Pedro. La afirmación de que Pedro pasaba por todos los lugares, muestra el carácter incesantemente itinerante del ministerio de Pedro en aquel tiempo. Pasando Pedro por todos los lugares, aconteció que también fue a los santos que viven en Lida. Y allí encontró a cierto hombre de nombre Eneas, quien estaba paralizado, acostado en un catre por ocho años. Pedro le dijo: ¡Eneas, Jesucristo te sana, levántate y haz tu cama! Y al instante se levantó. Y lo vieron todos los que viven en Lida y en Sarón, y se convirtieron al Señor (9:32-35). En uno de sus viajes, Pedro llegó a los santos (kedoshim) que vivían en Lida, en la llanura debajo de Jerusalén, a unos 16 kilómetros al este de Jope y a la moderna Tel Aviv, a menos de unos 3 kilómetros del aeropuerto David Ben-Gurion. Cuando Pedro llegó allí, encontró a un hombre llamado Eneas, enfrentado a la perspectiva de permanecer postrado en cama por el resto de su vida. Pedro le dijo: Eneas, el Mesías Yeshua (no Pedro) te sana. Con una palabra o un toque; las sanidades fueron instantáneas y completas. El Brit Hadashah no sabe nada de curaciones graduales. El fruto espiritual fue dramático. Todos [los judíos] que habitaban en Lida y en la llanura de Sarón, al norte de Lida, lo vieron y se volvieron al Señor. Pero la mayoría de la gente que vivía en la costera llanura de Sarón eran gentiles, y ellos también se convirtieron al Señor. Jesús había encargado a Pedro cuidar de Sus ovejas (Juan 21:15-17), y Pedro fue fiel para cumplir esa comisión.

En Jope (16 kilómetros al noroeste de Lida), había una discípula cuyo nombre arameo era Tabita, y su nombre griego era Dorcas, que significa gacela. Entonces, tenía tanto un nombre judío como un nombre griego, probablemente porque vivía en un área principalmente gentil. Había entonces en Jope cierta discípula de nombre Tabitá (que significa Gacela). Ésta estaba llena de buenas obras y de limosnas que hacía. Y aconteció que en aquellos días se enfermó hasta que murió. Y después de lavarla, la pusieron en un aposento alto (9:36-37). Ella estaba llena de obras de caridad y limosna (mitzvot y tzedaká), y confeccionaba túnicas y mantos para las viudas, lo cual ella hacía continuamente. En aquellos días ella enfermó y murió. Y estando Lida cerca de Jope, los discípulos, oyendo que Pedro estaba en ella, le enviaron a dos hombres, rogándole: No tardes en venir a nosotros. Entonces Pedro, levantándose, fue con ellos; y cuando llegó, lo llevaron al aposento alto. Y todas las viudas se presentaron delante de él, llorando y mostrando cuántas túnicas y mantos hacía Gacela cuando estaba con ellas (9:38-39). Su muerte fue un golpe considerable para los creyentes allí y la lavaron como era la costumbre. Sin embargo, en lugar de enterrarla inmediatamente, la pusieron en el aposento alto. Ahora, según la Ley Oral, en Jerusalén un cuerpo debía ser enterrado antes de la puesta del sol, pero fuera de Sión un cuerpo podía permanecer insepulto durante tres días y tres noches, (vea el comentario sobre La Vida de Cristo Ei La Ley Oral). Como Lida estaba cerca de la ciudad costera de Jope, los discípulos, al enterarse de que Pedro estaba allí, enviaron a dos hombres en un viaje de medio día hacia él, rogándole: No tardes en venir a nosotros.201

Generalmente pensamos en los apóstoles como líderes que decían a otras personas qué hacer, pero a menudo la gente les ordenaba (para conocer el estilo del ministerio de Pedro, consulte Primera de Pedro, Capítulo 5). Pedro era un líder que servía al pueblo y estaba listo para responder a su llamado. Pedro tenía la autoridad para sanar y la usaba para glorificar a Dios y ayudar a la gente, no para promocionarse a sí mismo.202

Sin duda ellos también habían oído hablar de la curación de Eneas y creían que Pedro podría usar su autoridad como emisario para ayudar a Dorcas. Había muchos creyentes en la ciudad de Jope y si los milagros se practicaban comúnmente, uno de ellos podría haber venido y traído a Dorcas de regreso a la vida. Pero contrariamente a lo que muchos enseñan hoy en día, la comunidad mesiánica del libro de Hechos no era una comunidad que obraba milagros. Más bien, era una iglesia/comunidad mesiánica con apóstoles obradores de milagros. Por lo tanto, los creyentes en Lida tenían fe en que el Señor podría resucitar a Dorcas de entre los muertos, mediante la autoridad de Pedro como emisario.

Entonces Pedro, levantándose, fue con ellos; y cuando llegó, lo llevaron al aposento alto. Y todas las viudas se presentaron delante de él, llorando y mostrando cuántas túnicas y mantos hacía Gacela cuando estaba con ellas (9:39). Supo de primera mano cuánto amaban a Dorcas y la pérdida que fue su muerte para la congregación mesiánica/iglesia de Jope. Probablemente las viudas llevaban las cosas que ella había hecho para demostrar que era digna de la resurrección.

Pedro había visto hacer al Señor cuando resucitó a la hija de Jairo (vea el comentario sobre La vida de Cristo Fh Jesús resucita a una niña muerta y sana a una enferma). Entonces Pedro, sacando a todos, y puesto de rodillas, oró; y volviéndose hacia el cuerpo, dijo: ¡Tabitá, levántate! Y ella abrió sus ojos, y viendo a Pedro, se incorporó (9:40). La oración es esencial para todo ministerio exitoso porque reconoce la dependencia de ADONAI. Y al que puede hacer todas las cosas mucho más abundantemente y más allá de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros (Efesios 3:20). Pedro aprendió la importancia de la oración de Su Señor, lo había visto y oído muchas veces en comunión con Su Padre (Mateo 14:23; Lucas 6:12-13).

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Luego, dándole la mano, la levantó; y llamando a los santos y a las viudas, la presentó viva (9:41). Debemos recordar que Tabita no resucitó; fue resucitada a su antigua vida y volvería a morir.203 El don de sanidad era el mismo para los apóstoles que para su Maestro. Ellos sanaron con una palabra o un toque, enfermedades orgánicas desde el nacimiento (vea Ap Pedro cura a un mendigo cojo), sanaron instantáneamente y resucitaron a los muertos (vea Ci Pablo resucitó a Eutico de entre los muertos en Troas). Cualquiera que hoy afirme tener el don de curar debería poder hacer lo mismo. Para aquellos que amaban a Tabita, su alegría debe haber sido inexpresable. Sin embargo, Dios no la resucitó únicamente para su beneficio, como pronto resultaría evidente.

Debido a que el libro de los Hechos es un libro de transición, Dios usó los milagros como señales de confirmación de que el evangelio era verdadero. También los usó para autentificar a los apóstoles como Sus mensajeros. YHVH usó resucitar a Tabita como chispa para la salvación de la ciudad. Y fue notorio en toda Jope, y muchos creyeron en el Señor (9:42). Esta nota al pie sirve como puente entre este pasaje y el siguiente relato de la conversión de Cornelio. Fueron días desafiantes para Pedro, cuando los muros de los prejuicios de toda su vida se derrumbaron. Primero vino la conversión de los samaritanos (vea Ba Simón el Hechicero), con quien ningún judío que se precie tenía trato alguno. Sin embargo, Pedro fue obediente al recibirlos como hermanos en la fe. Pronto sufriría una conmoción aún mayor cuando los gentiles entraran en la Iglesia/Comunidad Mesiánica.

Y aconteció que se quedó muchos días en Jope, con cierto Simón curtidor (9:43). En esta nota a pie de página, aparentemente insignificante, otra barrera más se derrumba, cuando Pedro dijo me quedé con un curtidor. El curtido se consideraba una ocupación impura (Levítico 11:40) en la sociedad judía del primer siglo, ya que se trataba de pieles de animales muertos. De este modo los curtidores debían vivir a cincuenta codos (unos 23 metros) fuera de los límites de la ciudad. Pero obviamente este curtidor era un creyente y el hecho de que Pedro se quedaría con él presagiaba lo que seguiría en Hechos 10.

Una mirada más cercana a Lucas, Las mujeres y el ministerio: Lucas escribió sobre el Nuevo Pacto más que nadie, incluido Pablo. Dicho esto, una comprensión de las mujeres no judías en el mundo grecorromano es importante. Las mujeres romanas eran patronas, benefactoras y propietarias de negocios. La revolución helenística había cambiado considerablemente el papel de las mujeres griegas en varios lugares, especialmente en Macedonia y Asia Menor. Estas mujeres ocuparon distinguidas magistraturas cívicas y federales. Los cargos que ocuparon incluyen cargos federales que están completamente ausentes en Hechos. En tal ambiente no debería ser una sorpresa encontrar a Priscila (Hechos 18:2 y 18-19; 1 Corintios 16:19) o a Lidia (16:14), o a varias mujeres griegas prominentes (17:12), entre los primeros conversos al Camino que continuaron ejerciendo roles importantes, tanto dentro como fuera de la Comunidad Mesiánica/Iglesia, especialmente como anfitrionas y patronas, pero también como profetisas, maestras y similares.

Una clave para comprender cómo tales roles fueron posibles para las mujeres, en una cultura mediterránea patriarcal ciertamente fuerte, es comprender cómo se alcanzó el estatus durante el Imperio Romano. Cada vez más, el dinero fue capaz de crear estatus social, buena reputación y posiciones cívicas, tanto para mujeres como para hombres en el mundo romano, a medida que las antiguas distinciones de clase y el énfasis en el rango heredado o de nacimiento, y los orígenes étnicos se volvieron menos importantes para determinar el futuro de mujeres y hombres. Es estudiando cómo funcionaba el mundo romano en general, que uno puede evaluar mejor los roles de las mujeres creyentes tal como los describe Lucas.

Lucas, al igual que Pablo, al igual que otros primeros creyentes, pensaron que su fe los comprometía a reformar algunas de las estructuras patriarcales existentes, para que las mujeres pudieran desempeñar roles más vitales y variados en la comunidad de fe. Con ese fin, Lucas presenta cinco apariciones breves de importantes mujeres creyentes en una variedad de roles que asumieron. En Miriam, la madre de Juan Marcos (12:12-17) y en Lidia (16:12-40), vemos a mujeres asumiendo el papel de “madre” o patrona y benefactora de las entonces incipientes comunidades creyentes en Jerusalén y Filipos, respectivamente. Como ellas, en la historia de Tabita (ver arriba), una discípula notable con un ministerio en curso, encontramos a alguien que brinda ayuda material a un grupo particularmente necesitado en viudas judías helenísticas tempranas (6:1-7). La mención que hace Lucas de las cuatro hijas vírgenes de Felipe que profetizaron es breve (21:9), pero en comparación con Hechos 2:17 es suficiente para mostrar que las mujeres desempeñaron papeles importantes en la temprana Comunidad/Iglesia Mesiánica. Quizás la más importante, es la referencia que hace Lucas a Priscila como maestra de un noble evangelista cristiano primitivo, Apolos, en Hechos 18. Examinaremos estas historias con más detalle a medida que avance el comentario.

En última instancia, por el hecho mismo de que Lucas retrata a mujeres desempeñando estos diversos roles, muestra cómo el evangelio libera y crea nuevas oportunidades para las mujeres. Probablemente sea cierto que a Lucas no le interesan las mujeres y sus roles por mismos; más bien enfatiza cómo el evangelio se manifestó y progresó entre la población femenina en varias partes del mundo mediterráneo. En Jerusalén (1:14, 12:12-17), en Tesalónica (7:4), en Berea (17:12) y en Atenas (17:34), encontramos mujeres convirtiéndose o sirviendo a las congregaciones de Dios, en roles que en muchos casos no habrían estado disponibles fuera de esa comunidad. Así, Lucas enumera el progreso de las mujeres como parte del avance y efectos del evangelio. Aunque quizás no sea uno de sus temas principales en Hechos, se preocupa de revelar a su audiencia que dondequiera que llegara el evangelio, las mujeres, a menudo prominentes, fueron algunas de las primeras, más destacadas y más fieles convertidas a la fe cristiana. Y que la conversión de ellas las llevó a asumir nuevos roles en el servicio del evangelio. Dicho esto, el retrato que hace Lucas de las mujeres en los primeros años de la Iglesia/Comunidad Mesiánica, debe compararse y complementarse con el registro más completo y preciso de Pablo (vea el comentario sobre Génesis LvLa mujer y los dones espirituales Primera Timoteo 2:11-15, recomiendo mucho que lea, es un examen exhaustivo del texto griego.204

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2024-11-16T22:11:19+00:000 Comments

Bc – Saulo pasa de asesino al Mesías 9: 1-31

Saulo pasa de asesino, al Mesías
9: 1-31

34 dC
Termina el gobierno de Pilato como procurador en Judea

Saulo pasa de asesino, al Mesías ESCUDRIÑAR: Saulo viajó 250 kilómetros a Damasco para expandir lo que comenzó como una persecución local contra los creyentes en Jerusalén (8:1). ¿Qué le dice eso sobre él? El antiguo maestro de Saulo fue Gamaliel (22:3). ¿Qué había aconsejado Gamaliel al Sanedrín con respecto a los creyentes en 5:34-39? ¿Cómo respondió Saulo a ese consejo? ¿Qué dice eso de él? ¿Cómo cree que se sintió Saulo cuando fue confrontado por Yeshua? Cuando procedió a predicar sobre el Mesías en la sinagoga, ¿cómo reaccionaron? ¿Por qué? Los acontecimientos de los versículos 23-28 probablemente sucedieron dos o tres años después de la conversión de Saulo (vea Gálatas 1:15-18). ¿Cómo ha cambiado totalmente el Señor las cosas para Saulo durante ese tiempo? ¿Por qué los discípulos de Jerusalén todavía le temen? ¿Qué riesgo estaba corriendo Bernabé? La gente en Damasco y Jerusalén quiere matar a Saulo. ¿Qué dice eso de él? ¿Cómo se relaciona la historia de Saulo con 1:8?

REFLEXIONAR: ¿Cómo le llamó a usted su atención el Señor por primera vez? ¿Fue de alguna manera dramática como Saulo, o de una manera más tranquila y natural? ¿Qué tipo de personas supone que están fuera del alcance de Dios para que, si Dios le hablara de ellas a usted, lo cuestionaría a Él? Sea honesto. ¿Cómo desafía esta historia estas suposiciones? ¿Cuándo ha obedecido al Señor, como Ananías, incluso cuando tenía dudas al respecto? ¿Qué pasó? ¿Quién ha desempeñado el papel de Ananías en su vida? ¿Ante quién quiere el Señor que desempeñe ese papel? ¿Qué desafíos ha traído a su vida conocer a Jesús? ¿Cómo han respondido otras personas? ¿Quién ha sido un Bernabé para usted? ¿Cómo? ¿A quién ha servido como Bernabé?

Cuando era joven, John Newton se hizo a la mar. Como la mayoría de los marineros de su época, vivió una vida de rebelión y libertinaje. Durante varios años trabajó en barcos de esclavos, capturando esclavos para venderlos en las plantaciones del Nuevo Mundo. Cayó tan bajo, que en un momento él mismo se convirtió en esclavo, cautivo de otro traficante de esclavos. Con el tiempo, se convirtió en capitán de su propio barco de esclavos. La combinación de una aterradora tormenta en el mar, junto con su lectura del clásico Imitación de Cristo de Tomás Kempis, plantó las semillas que resultaron en su conversión. Luego se convirtió en un líder del movimiento evangélico en la Inglaterra del siglo XVIII, junto con hombres como Charles Wesley, George Whitefield y William Wilberforce. En su lápida está inscrito el siguiente epitafio, escrito por el propio Newton: “John Newton, clérigo, una vez infiel y libertino, siervo de esclavos en África, fue, por la rica misericordia de nuestro Señor y Salvador Jesucristo, preservado, restaurado, perdonado y designado para predicar la fe que durante mucho tiempo se había esforzado en destruir”. Cuando escribió el amado himno “Amazing Grace”, conoció de primera mano las verdades que proclamaba.191 La historia de la Iglesia está llena de relatos como este, que resaltan el maravilloso poder del evangelio para transformar a los pecadores. Pero ninguna transformación es tan notable ni ha tenido implicaciones de tan largo alcance para la historia, como la conversión de Saulo de Tarso.192

Después del interludio del capítulo 8, que describe el ministerio de Felipe y la salvación de los samaritanos, la escena vuelve a Jerusalén. En ese tiempo, Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, se acercó al sumo sacerdote [Caifás], y le solicitó cartas para las sinagogas de Damasco, para que cuando hallara hombres o mujeres que eran de este Camino, pudiera traerlos atados a Jerusalén (9:1-2). Saulo estaba tan indignado con la Iglesia/Comunidad Mesiánica (8:1 y 26:11) que no estaba satisfecho simplemente con realizar sus inquisiciones y persecuciones sólo en Jerusalén. Las cartas del sumo sacerdote tendrían peso en la diáspora. Bajo el dominio romano, el Sanedrín no tenía poder temporal; pero en asuntos judíos internos era honrado, incluso más allá de las fronteras de Israel, por ejemplo, en Damasco, que tenía una gran población judía.193

Personas pertenecientes al Camino: Evidentemente así se referían a sí mismos los primeros creyentes (19:9 y 23, 22:4, 24:14 y 22). Además, este es el nombre favorito para la nueva fe en el libro de Hechos. La palabra griega Camino tiene un origen judío detrás. En el TaNaJ se refería a una definición de vida que contrasta el camino de los justos con el camino a la perdición. Basado en Isaías 40:3a: el camino a YHVH. Porque YHVH conoce el camino de los justos, Pero la senda de los malos conduce a la perdición (Salmo 1:6). Entonces este era el Camino, una definición clara de la vida, el Camino del Mesías específicamente. Otros judíos, al llamarse a sí mismos natzratim o la secta de los nazarenos (24:5), los identificaron como una secta judía entre muchas; pero el término Camino es una afirmación del judaísmo mesiánico. De hecho, Yeshua se llamó a sí mismo el Camino (Juan 14:6).

La conversión: La historia de cómo Saulo llegó a confiar en Yeshua se cuenta nuevamente en 22:5-16 y una tercera vez en 26:13-18, cada una con diferentes detalles (vea 26:13-18 para registrar estas diferencias). Esta es la manera en que Lucas enfatiza la importancia de la conversión de Saulo y en realidad termina siendo el ocho por ciento de todo el libro. Pero yendo por el camino, sucedió que cuando se acercaba a Damasco, de repente resplandeció alrededor de él una luz del cielo, y cayendo en la tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? (9:3-4). Viajaba a Damasco para comenzar su persecución, de repente una luz del cielo, quizás la gloria Shekhinah de Dios, brilló a su alrededor.

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Los rabinos enseñaban que cuando Dios habla en el cielo, “la hija de Su voz”, el bat-kol, o un eco, se escucha en la tierra. Después del último de los profetas, se consideró que Dios proporcionó el bat-kol para seguir guiando al pueblo (Tratado Yoma 9b). Qué interesante es que el bat-kol testificara después del último de los profetas y antes de que se estableciera el Nuevo Pacto, que Yeshua es en verdad el Hijo de Dios. Esta es la primera vez desde el bautismo (inmersión) del Mesías (Mateo 3:17; Lucas 3:22c), que se escuchó el bat-kol. Vea Ntd1

El oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? (9:4); vea también 22:17-18). La repetición es enfática, como en otras partes de los escritos de Lucas (Lucas 10:41, 13:34 y 22:31). No hay nada en la narración que sugiera que Yeshua posteriormente cambió el nombre de Saulo. En Gálatas 1:15-17, Saulo habla de ser apartado antes de nacer para predicar a los gentiles (goyim), pero no se menciona ningún cambio de nombre.

En 26:14 dice: Y al caer todos nosotros por tierra, oí una voz que me decía en lengua hebrea: ¡Saulo, Saulo! ¿por qué me persigues? ¡Dura cosa te es dar coces contra el aguijón! Ahora Saulo nunca persiguió directamente a Yeshua y no se menciona en ninguno de los cuatro evangelios. Pero al perseguir a Sus hijos, Saulo también estaba persiguiendo al Mesías; perseguir al Cuerpo era perseguir a la Cabeza. El punto es que es inútil que Saulo resista a ADONAI y lo que Dios ha planeado para él.

Pero esto confundió a Saulo y preguntó: ¿Quién eres, Señor? En ese momento no pensó que estaba persiguiendo a un ser celestial. Pero el Mesías le dio una gran dosis de realidad cuando dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues (9:5). Cuando Saulo escuchó esas palabras, la luz de la verdad fue confirmada en su alma y el evangelio se hizo real para él. Habiendo escuchado el debate de las Buenas Nuevas de Esteban, Yeshua, a quien creía muerto, obviamente estaba vivo. La resistencia de Saulo fue aplastada en ese momento, y su corazón, quebrantado por el arrepentimiento, fue sanado por la fe (Filipenses 3:4-11). Por el resto de su vida, Saulo sólo pudo ofrecer una explicación a lo que le había sucedido: había visto resucitado al Señor Yeshua Mesías.

La autenticidad de la conversión de Saulo inmediatamente se hizo evidente. En Hechos 22:10, Pablo dijo: ¿Qué debo hacer, Señor? Aprendemos que desde que preguntó: ¿Qué debo hacer, Señor? su entrega fue completa, pues se sometió humildemente al Señor que había odiado. Yeshua continuó: Pero levántate y entra en la ciudad de Damasco, y se te dirá lo que tienes que hacer (9:6). Esta es la primera de las cuatro veces que Pablo vio al Señor en una visión (aquí; 18:9-10; 22:17-21 y 23:11).

Y los varones que iban con él se habían parado estupefactos, oyendo a la verdad la voz, pero no viendo a nadie (9:7). Aquí la palabra voz se usa con un genitivo, lo que significa escuchar un sonido, pero no entenderlo. Entonces sus compañeros de viaje sí escucharon la voz, pero no pudieron distinguir las palabras. Sólo Saulo entendió las palabras. Pablo relata el mismo incidente en 22:9: Ahora bien, los que estaban conmigo ciertamente vieron la luz, pero no oyeron la voz del que hablaba conmigo. Aquí la palabra griega para voz se usa con acusativo. En ese caso significa que pudieron distinguir las palabras, pero no pudieron entender lo que querían decir.

En segundo lugar, vieron la luz, pero no vieron a nadie, pero Saulo vio la luz y al que hablaba. Eso significaba que estaba calificado para ser apóstol de la segunda categoría, la de ver al Mesías resucitado. La primera categoría era haber vivido y presenciado el ministerio terrenal del Mesías.

Tan repentina había sido su fe en el Mesías que Saulo necesitó algo de tiempo para reflexionar sobre la transformación de cada aspecto de su vida. Entonces Saulo se levantó del suelo, y abriendo sus ojos, nada veía. Así que, llevándolo de la mano, lo introdujeron en Damasco. Y estuvo tres días sin ver, y no comió ni bebió (9:8-9). Todo lo que pudo hacer fue sentarse en un silencio ciego. Fue entonces que ADONAI lo guio a través del proceso de reconstrucción de todo lo que fue y todo lo que hizo. Su entrada a la ciudad fue muy diferente de lo que él había anticipado. En lugar de irrumpir como el héroe conquistador, el azote del Camino, entró impotente, cegado, llevado de la mano.194

La contrición: Mientras Saulo esperaba, cegado y ayunando, reflexionando sobre lo ocurrido, Dios estaba tratando con otro hombre. Había entonces en Damasco cierto discípulo de nombre Ananías. El Señor le dijo en visión: Ananías; y él respondió: Heme aquí, Señor (9:10), vea Bf La visión de Pedro: Una mirada más cercana a visiones o sueños. Ananías era la forma griega del nombre hebreo Hananyah, que significa ADONAI es misericordioso. Se le describe en 22:12 como varón piadoso conforme a la ley, que recibía aprobación de todos los judíos que viven allí. Era uno de los líderes espirituales de la sinagoga de Damasco e, irónicamente, habría sido uno de los principales objetivos de Saulo.

Heme aquí, Señor. El griego Idou ego (heme aquí), corresponde al hebreo hineni. Ananías se unió a un grupo selecto cuando dio esta respuesta expresando una sumisión lista y expectante a Dios. Abraham respondió: Hineni, cuando ADONAI le dijo que sacrificara a su hijo Isaac (Génesis 22:1), y también cuando el Ángel de Adonai le dijo no extiendas tu mano sobre el muchacho (Génesis 22:12). Moisés respondió, Hineni, al llamado de Dios desde la zarza ardiente (Éxodo 3:4). Lo mismo hizo Samuel cuando YHVH le habló por primera vez (Primera de Samuel 3:4-10), de igual manera Isaías cuando la voz de Adonai preguntó: ¿A quién enviaré? (Isaías 6:8). Hoy en día, la gente puede decir Hineni a ADONAI aceptando que Él habla a través de las Escrituras, aceptando el perdón del Señor a través de la muerte de Yeshua como expiación, arrepintiéndose de sus pecados y ofreciéndose a Dios incondicionalmente en servicio obediente y santo.195

Y el Señor le dijo a él: Ananías, levántate, ve a la calle llamada Derecha, y busca en casa de Judas a uno de nombre Saulo, de Tarso; porque he aquí, él ora (9:11). La mayoría de las calles en el mundo antiguo eran torcidas, por lo que esto hubiera sido fácil de encontrar. Judas, que probablemente era un incrédulo y su casa el lugar de residencia original de Saulo mientras estuvo en Damasco antes de ser salvo, parecía ser tan conocido que Ananías sabía adónde tenía que ir. Saulo ha visto a un varón de nombre Ananías que entra y le impone las manos para que recobre la vista (9:12). Esa habría sido una prueba severa para la fe de Ananías, ya que la temible reputación de Saulo era ampliamente conocida. Ananías no habría tenido manera de saber de la conversión de Saulo, ya que el Señor no se la había revelado hasta ese momento. Y en cuanto a Saulo, cuando Ananías apareció, autentificaría que la visión que había recibido era claramente de ADONAI. Yeshua el Mesías se apareció a Saulo de Tarso en otras dos ocasiones: Hechos 18:9 y 23:11. No hay evidencia confiable de que Él se haya aparecido a nadie más desde el fin de la era de los apóstoles.

Ananías protestó diciendo: Señor, he oído de muchos acerca de este hombre, cuántos males ha hecho a tus santos en Jerusalén. Y aquí tiene autoridad de los principales sacerdotes para atar a todos los que invocan tu nombre (9:13-14), En 26:9-10 Pablo reconoce: Yo, ciertamente, pensaba en mi interior que era mi deber hacer muchas maldades contra el nombre de Jesús de Nazaret; lo cual, en efecto, hice en Jerusalén, pues luego de recibir autorización de parte de los principales sacerdotes, no sólo encerré yo en cárceles a muchos de los santos, sino que deposité la piedrecita en cosas malas. Habían llegado noticias de muchas fuentes sobre el daño que ya había causado en la Ciudad de David, y rápidamente se supo por qué había viajado a Damasco. Sin duda, la petición le parecía suicida. Su vida y su ministerio estaban en juego y se preguntaba si el Señor realmente tenía la intención de acabar con ambos.

Pero el Señor le dijo: Ve, porque instrumento de elección me es éste para llevar mi nombre delante de las naciones, y también de reyes, y de los hijos de Israel; porque Yo le mostraré cuánto tiene que padecer por mi nombre (9:15-16). Tuvo una advertencia por adelantado: su futuro padecimiento. Saulo fue llamado por Dios mismo (Gálatas 1:1; Primera Timoteo 2:7; Segunda Timoteo 1:1). También entendió que el evangelio debía ser predicado primero a los judíos (13:14, 14:1, 17:1, 18:4, 19:8), aunque su llamado principal era ministrar a los gentiles (Romanos 11:13, 15:16). Además, tuvo el privilegio de dar testimonio de su Señor ante reyes, como Agripa (25:23ss), y probablemente, César (Segunda Timoteo 4:16-17).

Entonces Ananías fue y entró en la casa, y después de imponerle las manos, dijo: Hermano Saulo, el Señor Jesús, quien se te apareció en el camino por donde venías, me ha enviado para que recuperes la vista y seas lleno del Espíritu Santo (9:17). Fortalecido por la visión del Señor y venciendo sus temores, Ananías saludó calurosamente a Saulo. Curiosamente, Hechos 9 no menciona que Saulo habló en lenguas (es decir, idiomas) en ese momento. Sin embargo, más tarde les dijo a los corintios que hablaba en lenguas más que todos ellos (Primera Corintios 14:18).

Saulo de Tarso estaba muy consciente de las variedades de experiencias que le habían sucedido a la gente según lo registrado en Hechos. Él estaba justo en medio de ellos. Pero en ninguna de sus cartas insinuó que uno debe ser salvo primero y luego experimentar la inmersión del Espíritu algún tiempo después. Lo mismo ocurre en los escritos de Judas, Santiago y Pedro. Ningún apóstol escribió ni enseñó jamás la doctrina carismática o pentecostal de la subsecuencia (la salvación primero, y luego una segunda experiencia de hablar en expresiones de éxtasis más adelante).196

El Espíritu ya estaba activo en la vida de Saulo, convenciéndolo de pecado (Juan 16:9), convenciéndolo del señorío de Yeshua el Mesías (Primera Corintios 12:3), convirtiéndolo (Juan 3:5; Tito 3:5), colocándolo en el Cuerpo del Mesías y morando en él permanentemente (Primera Corintios 12:13). Más allá de todo eso, él debía ser llenado o controlado con el Ruaj HaKodesh de una manera que lo capacitara para el servicio.197 Y al instante le cayeron de los ojos como escamas y recobró la vista, y después de levantarse, fue bautizado (9:18).

No se menciona un cambio de nombre, y Yeshua todavía lo llama Saulo incluso después de su encuentro con el Señor resucitado en el camino a Damasco. Por eso se le conoce como Saulo y Pablo. De hecho, después de su experiencia de conversión, se le llama Saulo once veces más. Nuevamente, esto sería extraño si Jesús hubiera cambiado su nombre a Pablo.

En ese momento abandonó la casa de Judas y permaneció varios días con los discípulos en Damasco, permitiéndoles celebrar con él su conversión y atender sus necesidades. Mediante ese acto se unió abiertamente a las mismas personas que había odiado y perseguido. Sus odiados enemigos se convirtieron en sus amigos, mientras que sus antiguos amigos instantáneamente se convirtieron en sus enemigos (9:23). De acuerdo con el patrón constante de los testimonios de los creyentes en Hechos, Saulo fue bautizado después de su conversión. Entonces Saulo disfrutó por primera vez de la comunión con el Mesías mientras comió y se fortaleció. …y tomando alimento, recuperó fuerzas. Y estuvo con los discípulos en Damasco algunos días (9:19). Uno sólo puede imaginarse la alegría abrumadora de aquellos días y la alabanza continua a Dios.

Los conflictos: Y enseguida predicaba a Jesús en las sinagogas: ¡Éste es el Hijo de Dios! Y todos los oyentes estaban atónitos, y decían: ¿No es éste el que asolaba a los que invocan este nombre en Jerusalén, y a esto había venido acá, para llevarlos atados ante los principales sacerdotes? (9:20-21). ¡El mensaje de Pablo era todo acerca del Mesías! Todos los que lo oyeron estaban fuera de sí ante el cambio repentino en Saulo el perseguidor.

Luego se nos da un breve resumen de la estancia de Saulo en Damasco. Pero Saulo se fortalecía mucho más y confundía a los judíos que vivían en Damasco, demostrando que es el Mesías (9:22). Al igual que Esteban antes que él, Saulo se reunió con los judíos en un debate abierto sobre la deidad y el mesianismo de Yeshua. Y cuanto más predicaba, más confuso se volvía el pueblo judío incrédulo que vivía en Damasco demostrando que Yeshua es el Mesías. La palabra para probar (del griego: sumbibazo significa tejer, de ahí por extensión enseñar) muestra que él estaba trayendo los pasajes del TaNaJ con lo que sabía acerca de la vida del Mesías, demostrando que Él cumplió las Escrituras.

Probablemente en este punto, Saulo partió hacia Arabia o Nabatea, en lo que hoy es Siria. En varias épocas, Damasco fue la ciudad principal Nabatea. Entonces Saulo simplemente salió al campo sirio en las afueras de Damasco. El autor inspirado no decidió registrar esta parte de su vida. Pero el propio Pablo nos cuenta lo que pasó después: Pero cuando el que me separó desde el vientre de mi madre y me llamó por su gracia, se agradó de revelar a su Hijo en mí para que lo proclamara entre los gentiles, no consulté enseguida con carne y sangre; ni fui a Jerusalén, a los que eran apóstoles antes de mí; sino que me retiré a Arabia, y regresé otra vez a Damasco (Gálatas 1:15-17). Saulo pasó cerca de tres años aprendiendo de ADONAI en el reino de Arabia Nabatea.

37 dC

Las conspiraciones: Cuando habían pasado muchos días, los judíos tramaron darle muerte, pero el complot llegó a ser conocido por Saulo. Y aun vigilaban estrictamente las puertas de día y de noche para que lo mataran (9:23-24). Saulo había estado en Arabia Nabatea, regresó y comenzó a predicar nuevamente en Damasco (Gálatas 1:17b) con más fuerza que nunca, esto frustró por completo a los judíos [no creyentes] que conspiraban para matarlo. Entonces sus discípulos, tomándolo de noche, lo bajaron por el muro descolgándolo en una canasta (9:25). Esta es la primera de muchas conspiraciones contra Pablo (Segunda Corintios 11:21b-27). Aprendemos de Segunda de Corintios 11:32 que no solo los judíos no creyentes lo perseguían: En Damasco, el gobernador del rey Aretas vigilaba la ciudad de los damascenos para prenderme (Segunda Corintios 11:32). Aparentemente, durante sus tres años en Arabia, había predicado minuciosamente el evangelio y había agotado su bienvenida allí también. Ellos estaban tan unidos en su esfuerzo que vigilaban secretamente las puertas día y noche para matarlo. Un muro rodeaba la ciudad y la única salida era por las puertas.

Después de escapar de Damasco dice Pablo: Luego, después de tres años, subí a Jerusalén a visitar a Cefas, y permanecí con él quince días (Gálatas 1:18), vea el comentario a Gálatas AsPablo se encuentra con Pedro y Santiago en Jerusalén. Saulo llegó a Jerusalén por primera vez desde su salvación: Habiendo llegado a Jerusalén, intentó juntarse con los discípulos, pero todos tenían temor de él, y no creían que era discípulo (9:26). Él fue realmente salvo. Debe haber parecido un lobo con piel de oveja por excelencia, que ahora intenta destruir desde dentro lo que anteriormente había tratado de destruir desde fuera (Gálatas 1:18-20). Quería convertirse en parte de la Comunidad Mesiánica de Sión. Pero afortunadamente para Saulo; Bernabé lo tomó consigo y lo llevó ante los apóstoles, y les contó cómo había visto al Señor en el camino, y que Éste le había hablado, y cómo, en Damasco, había predicado con denuedo en el nombre de Jesús (9:27). Con el muy respetado Bernabé respondiendo por él, Saulo finalmente fue aceptado.

Así que Saulo finalmente obtuvo aceptación, Y estaba con ellos en Jerusalén, entrando y saliendo, hablando con denuedo en el nombre del Señor. También conversaba y discutía con los helenistas, pero éstos intentaban matarlo (9:28-29). Vea también Gálatas 1:18. Entonces Saulo hizo lo mismo que Esteban con el mismo grupo, pero con resultados diferentes. Saulo descubrió este complot en una visión en el Templo (Hechos 22:17-21). Cuando lo supieron los hermanos, lo bajaron a Cesarea, y lo enviaron a Tarso (9:30), esto fue por su propia seguridad que lo bajaron de Sion al puerto de Cesarea con escolta protegida. Luego lo enviaron a Tarso (su ciudad natal en Cilicia, poblada por medio millón de personas) en barco durante diez años para que otros aspectos de la vida espiritual de Saulo pudieran crecer a la altura de su celo.

Por lo tanto, Saulo desapareció de la escena durante diez años. Sin embargo, durante ese tiempo estuvo lejos de estar ocioso (Segunda Corintios 12:1-4). Entre ese momento y el momento en que Bernabé lo encontró en el puerto de Tarso y lo llevó a Antioquía (11:2-26), estuvo haciendo decididamente lo que ADONAI lo había llamado a hacer. Según Gálatas 1:21, fue a las regiones de Siria y Cilicia. Al menos algunas de las iglesias de esa región mencionadas en Hechos 15:23 debieron haber sido fundadas por él en esos años.198

Esta es una declaración de transición que proporciona pistas razonables para el desarrollo del material siguiente de Lucas, el cambio en el ministerio a Judea, Galilea y Samaria. Entretanto la iglesia tenía paz en toda Judea, Galilea y Samaria, siendo edificada y andando en el temor del Señor; y era multiplicada con la consolación del Espíritu Santo (9:31). Estos fueron edificados porque el perseguidor, Saulo/Pablo, ya era un creyente. La Comunidad Mesiánica /Iglesia se había extendido entonces a Galilea y Samaria, muy fuera de Sión.

Es importante entender que el cambio en la vida de Saulo no se debió a las profecías del TaNaJ, aunque él las conocía bien. Él simplemente no les creyó a ellos. Si Saulo hubiera ido a la cruz después de la muerte de Yeshua, eso no habría cambiado su vida. E incluso si Saulo hubiera ido a la tumba vacía del Mesías, eso no lo habría cambiado para siempre. La salvación es no saber acerca de Yeshua... es conocer a Yeshua. Saulo conoció personalmente a Yeshua en el camino a Damasco y todo cambió. Pasó de ser un asesino a ser un adorador del Mesías.

Señor Jesús, aunque nos has buscado y encontrado de diversas maneras según Tu perfecta voluntad y conocimiento, Tu Espíritu testifica junto con nuestro espíritu que somos tus hijos, y si somos hijos, también herederos: herederos de Dios y coherederos con Cristo (Romanos 8:16-17). Lejos de ser solo por nuestro bien, esto nos hace alabarte por Tu gloriosa gracia, la gracia con la que nos has favorecido en el Amado (Efesios 1:6). Nosotros, que merecemos tan poco, hemos sido colmados con Tu amor. ¿Cómo puedo empezar a agradecerte?199

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Ntd: Definición: voz del cielo, (bat kol) significa sonido, eco, tono y en la literatura talmúdica voz celeste, es decir, un eco de una voz del cielo, o una voz divina, que revela la voluntad, elección o juicio de Dios al hombre.

2024-11-01T11:28:46+00:000 Comments

Bb – Un etíope pregunta sobre el cap. 53 de Isaías 8: 26-40

Un etíope pregunta sobre Isaías 53
8: 26-40

34 dC

Un etíope pregunta sobre Isaías 53 ESCUDRIÑAR: ¿Por qué el eunuco visitó Jerusalén? El eunuco estaba leyendo Isaías 53. ¿En qué encaja Yeshua en la imagen de Aquel que allí se describe? Si usted fuera Felipe usando Isaías 53, ¿qué enfatizaría sobre el evangelio? ¿Cómo preparó Dios el camino para su mensaje? ¿Cuál es la relación entre la preparación divina y la iniciativa humana en este relato? ¿Cuál es el significado de esta historia para la Iglesia/Comunidad Mesiánica que estaba siendo perseguida en Jerusalén? Hasta ahora, ¿cuál ha sido el efecto de la muerte de Esteban en Felipe? ¿Y sobre la Iglesia/Comunidad Mesiánica en su conjunto? ¿Qué es el camino de Isaías?

REFLEXIONAR: En cuanto a la forma en que Dios establece oportunidades para testificar (2:5-14, 3:6-16, 8:26-40), ¿cómo eso lo libera a usted de los temores en la evangelización? ¿Qué muestran estas historias sobre el contexto en el que se llevará a cabo la evangelización? En el fondo, ¿cree usted que los directores ejecutivos exitosos realmente necesitan el evangelio tanto como los mendigos pobres? (3:2) ¿Por qué si o por qué no? ¿Conocería usted la Biblia lo suficientemente bien como para responder a las preguntas del eunuco? ¿Cómo puede crecer en su fe para estar preparado para oportunidades sorpresivas?

Felipe figura en una segunda historia, que nuevamente se ocupa de la expansión misionera de la Iglesia. La historia se incluye aquí porque trata sobre Felipe y porque forma parte del progreso gradual, pero inexorable, en Hechos desde los comienzos judíos de la comunidad mesiánica en Jerusalén, hasta el crecimiento gentil de la Iglesia hasta lo último de la tierra (1:8). No sólo eso, sino que esta historia también incluye a aquellos que fueron excluidos de los plenos derechos del judaísmo. La forma en que se cuenta la historia guarda cierta semejanza con otro relato en el que un extraño se unió a dos viajeros y les abrió las Escrituras, participó en una acto de ordenanza bíblica y luego desapareció repentinamente de la vista (vea el comentario sobre La vida de Cristo, Mh – En camino a Emaús).177

Después de que Pedro y Juan regresaron a Jerusalén (8:25), Felipe recibió un nuevo encargo. La historia se pone en marcha por una orden angelical dada a Felipe que lo alejó del escenario del evangelismo exitoso (vea Ba Simón el mago), y lo llevó a un lugar que no parecía tan prometedor. En aquel tiempo, un ángel del Señor habló a Felipe, diciendo: Levántate y ve hacia el sur, al camino que baja de Jerusalén a Gaza, el cual está deshabitado (8:26). Había dos caminos desde Jerusalén a Gaza, y el Espíritu le ordenó a Felipe que tomara el que rara vez se usaba. Entonces levantándose Felipe, fue. Y he aquí un hombre etíope, eunuco, funcionario de Candace, reina de los etíopes, el cual estaba sobre todo su tesoro, quien había ido a adorar a Jerusalén (8:27). No luchó con la idea un tanto loca de ir por un camino caluroso y desértico. Sin embargo, obedeció inmediatamente, vio a un eunuco etíope. Etiopía, al sur de Egipto, es la Cus bíblica (Segundo Samuel 18:21-32; Jeremías 46:9), identificándose su población con los hijos de Cam, a través de su primer hijo Cus. Según la Biblia, el rey Salomón desarrolló una amplia red comercial a través de Egipto y Cilicia hasta Seba (al sur de Arabia) a través del puerto recién construido de Ezion -Geber en el mar rojo (Primera de Reyes 9:26-28, 10:1-13). Josefo identificó a la reina de Seba como la reina de Etiopía (vea el comentario sobre La Vida de Salomón Bg – Salomón y la Reina de Seba).178 Esta remota, pero avanzada cultura fue objeto de infinita curiosidad para los griegos y romanos que la consideraban lo último de la tierra. En otras palabras, el eunuco había viajado una distancia no pequeña y era un funcionario de un reino no pequeño.179

Este funcionario de la corte era responsable de todo su tesoro. La palabra funcionario de la corte en griego es dynástes, y de aquí proviene la palabra dinastía. En Lucas 1:52 se usa para gobernantes. En Primera de Timoteo 6:15 se usa la misma palabra para referirse a Dios. El hecho de que se use esta palabra de él significa que tenía una posición muy alta e influyente en el gobierno. En términos modernos, fue ministro de finanzas de Etiopía, uno de los cargos más altos de su gobierno. Entonces, su influencia en Etiopía habría sido grande.

Candace, reina de los etíopes: Este no era un nombre propio, sino como César, Faraón y Abimelec, un título oficial. Debido a que el Reino de Etiopía era un matriarcado, el rey de Etiopía era considerado un hijo del sol y, por lo tanto, demasiado sagrado para realizar cualquiera de las funciones humanas de la realeza. Por lo tanto, la reina madre desempeñaba todos los deberes reales y siempre tuvo el título de Candace y el poder real detrás del trono.

Había ido a adorar a Jerusalén (8:27b) y ahora regresaba; adorar, del griego: proskynéo, que también significa besar el rostro. Estaba tan preocupado por su vida espiritual que viajó al menos sesenta días a Jerusalén para adorar al Dios de Abraham, Isaac y Jacob, pero su corazón todavía no estaba satisfecho. Este etíope representa a muchas personas hoy en día que son religiosas, leen las Escrituras y buscan la verdad, pero no tienen la fe salvadora en Yeshua Mesías. Son sinceros, pero están sinceramente perdidos. Necesitan que alguien les muestre el camino.180

El regresaba sentado en su carro leyendo al profeta Isaías (8:28), y el carro era tirado por bueyes. Esta era y es una práctica común en el Cercano Oriente, incluso cuando lo hacen para su propio conocimiento, sin ninguna intención de ser escuchados por otros. Mueven la cabeza, e incluso toda la parte superior del cuerpo, de un lado a otro mientras leen, y pronuncian palabras con un tono que se acerca más al canto que a nuestro modo desapasionado de leer.181 Sin la orquestación de los acontecimientos por parte del Ruaj, esta reunión nunca habría tenido lugar en absoluto. Una vez más esto enfatiza la obra soberana del Ruaj HaKodesh en la salvación.

¿Cómo un eunuco entró en contacto con el judaísmo? no se nos dice. El término eunuco normalmente indica una persona que ha sido castrada; A tales personas se les prohibía la entrada al Templo según la Torá de Moisés (Deuteronomio 23:1). Eso significaba que él nunca podría ser un prosélito pleno. Había tres niveles de relación de los gentiles con el judaísmo.

El primer nivel eran los temerosos de Dios: Estos eran gentiles que se convencieron de que ADONAI era el único Dios verdadero, abandonando su paganismo e idolatría, pero no eligieron convertirse en prosélitos de ninguna forma, y por lo tanto, no adoptaron las costumbres o prácticas judías (vea Be La visión del centurión).

El segundo nivel eran los prosélitos en la puerta: La Puerta era el muro intermedio de separación (Efesios 2:14) en el recinto del Templo que a los gentiles no se les permitía traspasar bajo pena de muerte (vea más abajo). Ellos adoptaron muchas prácticas judías como celebrar el Shabat y las fiestas de Israel, pero no llegaron a ser prosélitos completamente. La mayoría de estos eran hombres porque no se requería la circuncisión.

Y el tercer nivel eran Prosélitos del Pacto: Entraron al Pacto del Sinaí como judíos plenos, por así decirlo. La mayoría eran mujeres porque este nivel requería la circuncisión.182

Entonces, debido a que el eunuco etíope había sido castrado, hizo lo mejor que pudo y se convirtió en prosélito de la puerta. Y eso significaba que había adoptado muchas de las prácticas del judaísmo; de hecho, hizo todo lo que hubiera hecho un prosélito excepto la circuncisión. Sin embargo, a pesar de su poder y prestigio, el etíope tenía un gran vacío en el alma. Él había viajado a Jerusalén para adorar en ocasión de una de las tres fiestas de peregrinar, ya sea Sucot (Cabañas), Pesaj (Pascua) o Shavuot (Semanas), y estaba en su viaje a casa, pasando el tiempo leyendo su traducción griega del TaNaJ.183 Esta no fue una visita de estado, fue a adorar a ADONAI, él tenía hambre de la Palabra de Dios. Era este hombre con quien Felipe se encontraría en un camino solitario del desierto. El eunuco es un ejemplo clásico de aquel que estuvo a la altura de la luz que tenía. Luego Dios le dio la revelación completa de Yeshua Mesías a través del ministerio de Felipe.

En todo el TaNaJ, Isaías tiene la mayor esperanza para el eunuco en su descripción del futuro ideal de Dios, un futuro que promete un memorial en la casa de Dios, un nombre mejor que el de hijos e hijas, un nombre eterno que nunca será borrado (vea Isaías 56:3-8). El eunuco no sabía que estaba a punto de experimentar el cumplimiento de esas promesas. Y poco sabía Felipe de su propio papel en su cumplimiento. Probablemente Felipe todavía se preguntaba por qué Dios lo había enviado a este lugar solitario, y tal vez estaba un poco desconcertado por el extraño espectáculo del carro tirado por bueyes frente a él (avanzando lentamente a poco más que un paso de caminar), con su exótico pasajero y su séquito siguiéndolo detrás. Entonces, de repente, por segunda vez en la historia, Felipe recibió un mandato divino. Entonces el Espíritu dijo a Felipe: Acércate, y júntate a ese carro (8:29).184 Los rabinos enseñaban que cuando Dios habla en el cielo, “la hija de Su voz”, el batkol, o un eco, se escucha en la tierra. Después del último de los profetas, se consideró que Dios proveyó el bat-kol continuo brindando orientación a la gente (Tratado Yoma 9b).

A pesar de que el séquito del eunuco debió ser impresionante, Felipe no se dejó intimidar. Obedeciendo instantáneamente a la voz del Espíritu Santo, Felipe corrió hacia el carro que avanzaba lentamente y comenzó a trotar a su lado. Allí escuchó al etíope leer al profeta Isaías. Como era un hombre de posición, habría tenido un conductor manejando el carro tirado por bueyes. Por lo tanto, habría tenido tiempo de leer. No sólo eso, sino que, por la providencia de Dios, este hombre estaba leyendo una de las profecías mesiánicas clave que apuntaban a Yeshua (Isaías 52:11 a 53:12). En ese momento, Felipe probablemente supo que ADONAI le había dado una puerta abierta, un corazón preparado.

Cuando tuvo una oportunidad corriendo Felipe, lo oyó leyendo al profeta Isaías, y dijo: pero, ¿entiendes lo que lees? (8:30). Felipe no preguntaba si el eunuco entendía las palabras que estaba leyendo. Lo que realmente quería saber era: “¿Sabe de quién habla el pasaje?” Era bueno para el etíope leer Isaías, pero a menos que el entendimiento fuera traído a él, no habría ningún beneficio de su lectura. El libro de Hechos ya se ha referido cuatro veces a Yeshua como el Siervo de Dios (3:13 y 26, 4:27 y 30). La interpretación judía moderna entiende que este siervo es el pueblo de Israel y no el Mesías (vea el comentario sobre Isaías Iy La muerte del Siervo sufriente).

La experiencia de Felipe debería animarnos en nuestro testimonio personal del Señor. Para empezar, ADONAI dirigió a Felipe hacia la persona adecuada en el momento adecuado. Es poco probable que usted y yo tengamos un ángel que nos instruya, pero podemos conocer la guía del Espíritu Santo en nuestro testimonio si caminamos en el Espíritu y oramos por la dirección de Dios.185

Dios ya había preparado el corazón del hombre para recibir el mensaje de Felipe. Entonces el etíope contestó: Y ¿cómo podría, si alguno no me guía? Y rogó a Felipe que subiera a sentarse con él (8:31). Se dio cuenta de que necesitaba a alguien que interpretara el pasaje. El corazón del evangelista debe haber estado regocijándose en la confianza de que YHVH había preparado así a este eunuco. Tenía un espíritu de búsqueda, humildad y enseñanza. Pero el pasaje era Isaías 53:7b-8, y desconcertó al eunuco.

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Como ministro de finanzas de Etiopía, era muy probable que hablara griego leyendo de la Septuaginta (LXX), el idioma internacional de la época. El pasaje de la Escritura que leía era éste:

Como oveja fue llevado a la matanza;
Y como cordero mudo delante del que lo trasquila,
Así no abrió su boca (8:32).

En la humillación su juicio fue quitado;
¿Quién contará su generación?
Porque su vida es quitada de la tierra (8:33)

Es decir, dado que Yeshua murió físicamente, no tendrá descendientes físicos. Esto es un lamento. Pero el lamento resulta injustificado en el caso de Yeshua, porque Él ha resucitado de entre los muertos, y en Él hay muchos hijos espirituales, como diría Isaías unos versículos después: verá Su descendencia, Vivirá por días sin fin, y la voluntad de YHVH triunfará en su mano (Isaías 53:10b LXX). Dios hace lo inesperado, proporcionando descendientes para Aquel que murió sin esposa ni hijos. Porque su vida fue quitada de la tierra.

Tomando la palabra, el eunuco dijo a Felipe: Te ruego, ¿de quién dice esto el profeta? ¿de sí, o de algún otro? (8:34). Su confusión es comprensible, ya que el pensamiento judío contemporáneo estaba dividido sobre la interpretación. Isaías no cumplió con los requisitos del pasaje, a pesar de que era un siervo de Dios. Entonces Felipe, abriendo su boca, y comenzando desde esta escritura, le proclamó a Jesús (8:35). La frase “abrir la boca” se utiliza cuando va a seguir algo de gran importancia. He aquí, pues, el clímax de la conversación. Felipe desarrolló algunos puntos en común con el etíope al hablar de Isaías, pero se dirigió a proclamar las Buenas Nuevas sobre Yeshua. Claramente, su primer paso fue mostrar que el Mesías fue quien cumplió la profecía de Isaías. Una descripción del carácter general de Yeshua y la forma en que sufrió injustamente y fue condenado a muerte probaría el punto.

El hecho es que Isaías 53:7-8 no fue toda la historia, sino sólo el punto de partida. Y yendo por el camino, llegaron a cierta agua; y el eunuco dice: ¡Mira, agua! ¿Qué impide que yo sea bautizado? (8:36) Obviamente, Felipe debe haberle hablado del discurso de Pedro sobre la respuesta apropiada a la Buena Nueva: ¡Arrepentíos y sea bautizado cada uno de vosotros en el nombre de Jesús el Mesías para perdón de vuestros pecados, y recibiréis el don del Espíritu Santo! (2:38). De la misma manera, se puede suponer que el eunuco debió darle a Felipe su profesión de fe en Yeshua Mesías.186 Entonces el eunuco mandó parar el carro; y ambos, Felipe y el eunuco, bajaron al agua, y lo bautizó (8:38) para poder hacer una confesión pública. Felipe estuvo de acuerdo y ambos bajaron al agua y Felipe lo sumergió. La inmersión es la confesión pública de una convicción interior. Entonces el eunuco no sólo confesó su fe personalmente a Felipe sino abiertamente delante de toda su caravana.

Pero la falta de una mención clara de la profesión de fe del eunuco, llevó a uno de los primeros escribas a “mejorar” la historia agregando este versículo. ” Y Felipe dijo: Si crees con todo tu corazón, puedes. Respondió él y dijo: Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios (8:37)”. Los manuscritos más antiguos y confiables, sin embargo, no incluyen este versículo, así que yo tampoco.

Y cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe, y el eunuco no lo vio más, pero prosiguió gozoso su camino (8:39). La palabra arrebató, del griego: harpazo, significa arrebatado, ser llevado repentina y milagrosamente. Esta es la misma palabra que usó Pablo al describir el arrebatamiento de la Iglesia: Después nosotros, los que vivamos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados simultáneamente con ellos en las nubes al encuentro con el Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor (Primera Tesalonicenses 4:17). Al realizar este sorprendente milagro el Ruaj HaKodesh confirmó a toda la caravana que Felipe era en verdad su portavoz. En cuanto al eunuco, siguió su camino, gozoso del gozo en el Señor. El gozo del etíope, incluso después de la abrupta partida de Felipe, demostró que su fe estaba firmemente arraigada en Dios, no en Felipe. Lucas no nos cuenta la historia posterior del eunuco etíope, pero según el padre de la iglesia Ireneo, se convirtió en misionero entre los etíopes y quizás estableció la primera iglesia en el continente africano.187

Y Felipe fue hallado en Azoto, y al pasar, evangelizaba a todas las ciudades, hasta que llegó a Cesarea (8:40). Azoto (el nuevo nombre griego de Ashdod), estaba a unos 32 kilómetros al norte de Gaza. Felipe continuó haciendo la obra de evangelista. Allí se casó y se estableció (21:8-9). Como resultado, Cesarea se convirtió en el nuevo centro de los creyentes helenísticos de Judea. Puede haber sido debido a la predicación de Felipe en esta área que se establecieron iglesias en Lidia y Jope (vea Bd Señales y milagros siguen a Pedro). Cesarea continuó siendo un refugio para los creyentes judíos helenísticos hasta el año 66 dC cuando, como resultado de la revuelta judía, los líderes de la congregación mesiánica en Cesarea emigraron del país a la provincia de Asia, o lo que hoy es Turquía.188

En octubre de 1857, J. Hudson Taylor comenzó a ministrar en Ningpo, China, y guió al Sr. Nyi a Cristo. El hombre estaba muy feliz y quería compartir su fe con los demás. El señor Nyi le preguntó un día a Hudson Taylor: “¿cuánto tiempo hace que tenéis las Buenas Nuevas en Inglaterra?” Taylor reconoció que Inglaterra conocía el evangelio desde hacía siglos.” Mi padre murió buscando la verdad”, dijo Nyi.” ¿Por qué no vinieron antes?” Taylor no tenía respuesta para esta penetrante pregunta. ¿Hace cuánto que conoces el evangelio? ¿Hasta qué punto lo has compartido personalmente?189

El Dios de Israel desea brindar a la gente Su descanso y paz a través de una relación eterna consigo Mismo. Los siguientes cinco principios, tomados del profeta Isaías, nos ayudan a reconocer cómo podemos tener esa relación. Así como los creyentes a menudo han usado una serie de versículos de Romanos llamado “el camino de romanos”, los creyentes mesiánicos, al testificar a los judíos, pueden usar una serie diferente de versículos de Isaías llamado “el camino de Isaías”.

Pecadores ante Dios

Todos nosotros somos como cosa impura, Y nuestra justicia como trapo de menstruo. Todos nosotros nos marchitamos como hojas, Y la mano de nuestras iniquidades nos arrastra como el viento (Isaías 64:6). Podemos juzgarnos a nosotros mismos según normas relativas, pensando: “yo soy tan bueno como cualquier persona” o “yo no soy peor que cualquier persona”. Sin embargo, Dios nos juzga a cada uno de nosotros según Sus normas absolutas de Sí mismo y de su Torá: Habla a toda la asamblea de los hijos de Israel, y diles: Sed santos, porque Yo, YHVH vuestro Dios, soy santo (Levítico 19:2). Según Sus normas, todos somos fracasos morales.

Por supuesto, usted puede ser una buena persona y quizás recuerde llamar a su mamá el Día de la madre; es sólo que usted y “la persona a su lado” todavía no alcanzan las elevadas normas santas de Dios. Por cierto, todo rabino o pastor mesiánico tiene el mismo problema. El Salmo 14:3 declara: Todos se desviaron, a una se han corrompido, No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno. Todos nacemos con la enfermedad fatal del pecado transmitida a través de Adán. Así que nadie puede señalar con el dedo ni tirar piedras a nadie; todos tenemos el mismo gran problema del pecado original la naturaleza pecaminosa).

Separación de Dios

He aquí que no se ha acortado la mano de YHVH de modo que no puede salvar, Ni su oído se ha endurecido de modo que no puede oír. Son vuestras transgresiones las que se interponen entre vosotros y vuestro Dios; Son vuestros pecados los que os ocultan su rostro, e impiden que os oiga (Isaías 59:1-2). El resultado de nuestra naturaleza pecaminosa es una relación rota con Dios. Ahora usted puede orar e incluso ayunar, pero la Biblia es clara: Él no escuchará. ¡Es como si yo hubiera robado dinero y luego hubiera tenido el descaro de acercarme a usted y pedirle un regalo! Su respuesta debería ser: “primero abordemos la ofensa pasada, luego puedo considerar su necesidad presente o futura”. Dios quiere bendecirlo, pero la naturaleza pecaminosa de usted lo separa de Él y debe lidiar con ella primero antes de que Él pueda bendecirlo.

Dado que esta separación continúa hasta nuestra muerte, se convierte en un juicio de separación eterna de Dios. Esto rompe el corazón de Dios. Él realmente lo ama y desea que tenga vida eterna con Él. Por eso la historia no termina aquí, sino que continúa con la Buena Noticia para su vida.

Salvación en Dios

Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, Cada cual se apartó por su camino, Pero YHVH cargó en Él el pecado de todos nosotros (Isaías 53:6). Dios ha provisto el camino de la salvación y del perdón, ya que no podemos hacer nada, ninguna buena acción, para salvarnos a nosotros mismos. Los mejores quince minutos de nuestra vida no pueden salvarnos; el mayor logro de nuestras vidas tampoco puede salvarnos. Debido a Su gran amor, Dios ha prometido enviar al Mesías a morir como expiación o pago por nuestros pecados. En el Nuevo Pacto, el Mesías Yeshua dice que Él vino para dar Su vida en rescate por muchos (Mateo 20:28b). Ésta es la salvación y la relación correcta que Dios ofrece gratuitamente.

El Salvador es Dios

Porque un Niño nos es nacido, Hijo nos es dado; El dominio estará sobre su hombro, Y se llamará su nombre: Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. Lo dilatado de su principado y la paz no tendrán fin Sobre el trono de David y sobre su reino, Para disponerlo y afirmarlo con la justicia y el derecho Desde ahora y para siempre. ¡El celo de YHVH Sebaot hará esto! (Isaías 9:6-7). Sólo Dios mismo podría proporcionar el sacrificio perfecto por los pecados, ya que sólo Él es perfecto. Qué maravilloso amor y humildad que el Dios Poderoso de Israel naciera, viviera como hombre y muriera como el pago perfecto por nuestros pecados. El Mesías Yeshua es Adonai, el Señor.

Seguridad eterna con Dios

Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera, Porque en ti ha confiado (Isaías 26:3). La paz perfecta (shalom shalom) se encuentra sólo en Dios y es accesible sólo a través de la fe en el Mesías. El reconocimiento simple de nuestros pecados y fe en el Mesías Yeshua como nuestro sustituto, nuestro sacrificio, nuestra expiación salvadora, es la acción necesaria para una relación correcta con Dios. La Biblia dice de Abraham: Y creyó a YHVH, y le fue contado por justicia (Génesis 15:6). Al igual que Abraham, usted puede tener una relación correcta con Dios por la fe en lo que sólo Él ha provisto. Aquí usted tiene una oración sencilla que le ayudará:

Señor, por favor perdóname por todos mis pecados a través del sacrificio del Mesías en la cruz por mí.
Ayúdame a seguir
a Yeshua y honrarte.
Gracias a
Ti por amarme. Amén. 190

Si ha hecho esta oración, mire el comentario sobre La Vida de Cristo Bw – Lo que Dios hace por nosotros en el momento de la fe.

PÁGINA SIGUIENTE: Saulo pasa de asesino, al Mesías Bc

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2024-11-01T11:16:16+00:000 Comments

Dh – Glosario

Glosario

Abba: Palabra aramea usada como término afectuoso para dirigirse al padre de alguien. Yeshua (Jesús) lo usó para referirse a Dios como Su Padre, y los creyentes en Jesús también lo usan hoy para dirigirse a Dios como Padre. En hebreo moderno, este nombre común significa papá, papito o papi (vea también Marcos 14:36 y Romanos 8:15).

Adar: duodécimo mes del calendario bíblico judío.

Adonai: literalmente, mi Señor, palabra que usa el TaNaJ para referirse a Dios.

ADONAI Elohim: Esta es la palabra hebrea para SEÑOR Dios. Este título vincula al Dios de Israel, el Dios del Pacto, con Dios como Creador del universo (vea también Génesis 2:4; Isaías 48:16; Salmo 72:18; Lucas 1:32; Apocalipsis 1:8).

ADONAI: El Tetragrámaton, significa el nombre de cuatro letras de YHVH. Dado que se desconoce su pronunciación, y también por respeto al nombre de Dios, los judíos tradicionalmente lo sustituyen por las palabras ADONAI y Ha’Shem. ADONAI, sin embargo, es más un nombre cariñoso como papi (vea también Éxodo 3:15; Jeremías 1:9; Salmo 1:2, Mateo 1:22; Marcos 5:19; Lucas 1:5; Juan 1:23).

ADONAI Nissi: el SEÑOR es nuestro estandarte (ver Éxodo 17:15; Salmo 20:1)

ADONAI Sebaot (ó YHVH-Sidkenu): El SEÑOR de los ejércitos angelicales del cielo (vea Segunda de Reyes 19:31; Salmo 24:10; Segunda de Corintios 6:18).

ADONAI Shalom: el SEÑOR de Paz

ADONAI Sidkenu: el SEÑOR nuestra Justicia

Adversario: Satanás, el diablo, el príncipe de la potestad del aire o la serpiente antigua.

Afikomen (o aficomen): Literalmente, “lo que viene después”. Pedazo de pan matzá que se esconde durante el Seder, que se encuentra y se come después de la tercera copa de redención.

Amén: Al final de una oración, esta palabra significa “Es verdad”, o “Que así sea” o “Que se haga realidad”, lo que indica que los lectores u oyentes están de acuerdo con lo que se acaba de decir. Aunque todo lo que Yeshua (Jesús) dijo era verdad, “amén” agrega un énfasis especial (vea también Deuteronomio 27:25; Jeremías 28:6; Salmo 41:14; Nehemías 8:6; Mateo 5:26; Marcos 10:15; Lucas 23:43; Juan 10:1).

Árbol de la Vida: El árbol en el centro del jardín del Edén (Génesis 2:9, 3:24), la fuente de la vida eterna. Las Escrituras apuntan a un futuro en el Brit Hadashah, con acceso al Árbol de la Vida. Mientras tanto, la Torá es como el Árbol de para los que de ella echan mano, y felices son los que la abrazan (Proverbios 3:18, véase también Apocalipsis 2:7, 22:2 y 14).

Ariel: león de Dios, altar del templo de Dios.

Aviv: el primer mes del año bíblico, correspondiente al moderno mes judío de Nisán.

Azazel: un chivo expiatorio o cabra-demonio enviado al desierto en Yom Kipur.

Baal o Ba’al: el principal dios masculino de los fenicios y cananeos. La palabra significa señor o amo.

Bar o Bat Mitzvá (Mitzvah): En hebreo para “Hijo o hija del Mandamiento”. Aunque no se menciona especícamente en la Biblia, es un ritual judío de mayoría de edad, en el que un hombre joven (o para una mujer joven Bat Mitzvah), elige seguir los mandamientos de sus antepasados y asume la responsabilidad de su propia relación con el Dios de Israel. Esta ceremonia normalmente se lleva a cabo a los 13 años para los niños o a los 12 años para las niñas. Posteriormente, se le considera teóricamente un adulto, pero en el judaísmo moderno esto es principalmente simbólico, y un niño/a no es tratado como un adulto.

Beit Lejem: Belén, lugar de nacimiento de David y Yeshua (Jesus), que significa casa del pan.

Bnei-Yisrael: Los hijos de Israel

Brit Hadashah: Nuevo Pacto en hebreo. La cristiandad comúnmente lo llaman el Nuevo Testamento.

Cohanim: sacerdotes. Los cohanim descendían de Aarón, el hermano de Moisés. Los saduceos pertenecían a la secta sacerdotal del judaísmo.

Cohen (o kohen): Sacerdote, hombre que ofrecía sacrificios y realizaba otros rituales religiosos en el Templo de Jerusalén.

Cohen (Sacerdote de) El Elyon: Sacerdote del Dios Altísimo

Cohen Rosh Gadol: Sumo Sacerdote que servía como principal oficial religioso, el único en entrar al Lugar Santísimo. Aarón, el hermano de Moisés, fue el primer hombre designado como Cohen Gadol. En épocas posteriores, el cohen gadol estuvo a cargo del Templo y su administración. El kohen gadol Caifás jugó un papel clave al interrogar a Yeshua en Su juicio. El escritor de Hebreos describe al Mesías como nuestro gran Cohen Gadol, quien nos da acceso al trono de Dios en el santuario celestial (ver también Levítico 21:10; Hageo 1:14; Nehemías 3:1; Mateo 26:57ss; Marcos 14:61 y siguientes; Juan 18:19ss y siguientes; Hebreos 4:14ss y siguientes y 10:19-22).

Corban: Sacrificio u ofrenda dedicada a Dios, especialmente para cumplir un voto. Si algo iba a dedicarse a Dios, generalmente no podía utilizarse para otros fines. Algunos fariseos y maestros de la ley utilizaron erróneamente esto como excusa para no sustentar a sus padres en su vejez, a pesar de que la enseñanza judía insistía en que el mandamiento de honrar al padre y a la madre se extendía a satisfacer sus necesidades físicas (vea Marcos 7: 11).

Diáspora, la Dispersión: la dispersión del pueblo judío por el mundo en el exilio. Al momento de escribir esto, casi 7 millones de judíos viven en Israel, y más de 8 millones de judíos viven en la diáspora (ver también Isaías 11:10; Juan 7:35).

Ejád o ejad: Palabra hebrea para “uno” o “unidad”. Ejad se usa en el Shema (Deuteronomio 6:4).

Elohim: Dios” en términos generales, o como Creador. Compárese con ADONAI, el “nombre del pacto” de Dios usado especialmente en Su relación con el pueblo judío. Elohim es la forma plural de El, que también se encuentra ocasionalmente en la Biblia con el mismo significado. Yeshua a veces es llamado Ben-Elohim, el Hijo de Dios (vea también Génesis 2:19; Isaías 61:11; Mateo 4:3; Marcos 1:1; Lucas 1:35; Juan 11:4).

El Shaddai: Dios Todopoderoso o Dios Omnipotente

Elyon: Un título para Dios, que significa Dios Altísimo (ver Lucas 1:35 y 76; Hechos 7:48). Una forma más larga es El Elyon, Dios Altísimo (vea también Deuteronomio 32:8; Isaías 14:14; Salmo 91:1; Hechos 16:17).

Emisarios: Apóstoles

Eretz Israel: La tierra de Israel (Primera de Samuel 13:19)

Fariseos: Una de las sectas del judaísmo en el primer siglo. Los fariseos tenían sus propios puntos de vista sobre cómo exactamente guardar la Torá. Estaban especialmente preocupados por la impureza ritual y (a diferencia de los saduceos) creían en la resurrección de los muertos. Mientras que los saduceos estaban más involucrados con el templo, los fariseos estaban más preocupados por la vida del hogar y la sinagoga.

Gehena: La palabra para “infierno”, el lugar de miseria y sufrimiento perpetuo después de esta vida. Proviene de la palabra griega Geenna y la palabra hebrea Ge-Hinnom, que significa el valle de Hinnom. De hecho, había tal valle con ese nombre al sur del Templo en Jerusalén. Se usaba como vertedero de basura y siempre había fuegos encendidos allí, lo que lo convertía en una imagen adecuada de la vida en el infierno. En fuentes judías, el término se usa como lo opuesto a Gan -Eden, o el Jardín del Edén o Paraíso. (Mateo 23:33; Marcos 9:43).

Gentiles: Un término para individuos o grupos de personas que no son judíos. En hebreo, una palabra común para gentil es goy o goyim es la forma plural (vea Isaías 8:23; Mateo 10:18; Marcos 10:33).

Go’el: Literalmente, un redentor, usado tanto para Dios como para las personas. En el libro de Ruth, go’el significa el pariente-redentor, un pariente cercano obligado a defender y proteger a sus parientes. El go’el podía comprar (redimir) tierras o a alguien que se vendiera como esclavo, y podía casarse con una viuda de la familia para proteger su futuro. El go’el humano es una imagen de Dios el Go’el mayor que nos protege y redime a nosotros, los miembros de Su familia (ver Ruth 3:9-12).

Goyim: Naciones, no judíos, gentiles

Halajá: El término proviene de la raíz hebrea andar y se refiere generalmente al conjunto de disposiciones legales provenientes de la Ley Oral o las reglas que rigen la vida judía (vea el comentario sobre La Vida de Cristo, haga clic Ei La Ley Oral). Una halajá es una decisión específica dada sobre un tema en particular, siendo “la halajá” la decisión aceptada y observada por toda la comunidad no mesiánica (judíos no creyentes en Yeshua).

Hag Ha-Matzá: La Fiesta de los Panes sin Levadura

Ha’Shem (o Ha-Shem): El Tetragrámaton, significa el nombre de cuatro letras de YHVH. Dado que se desconoce su pronunciación, y también por respeto al nombre de Dios, los judíos tradicionalmente lo sustituyen por las palabras ADONAI y Ha’Shem. ADONAI, sin embargo, es más un nombre cariñoso como papi. Mientras que ADONAI es un nombre más cariñoso como papá, mientras que Ha’Shem es un nombre más formal como señor (vea también Éxodo 3:15; Jeremías 1:9; Salmo 1:2, Mateo 1:22; Marcos 5:19; Lucas 1:5; Juan 1:23).

Helenista: En Brit Hadashah, se refiere a los judíos que vivían en la diáspora, o se habían mudado a Israel desde la diáspora, hablaban griego y eran más griegos en su cultura que los judíos tradicionales criados en Israel (Hechos 6:1, 9:29, 11:20).

Hijo de hombre: Un nombre que Yeshua (Jesús) comúnmente uso para referirse a Sí mismo. Proviene de Daniel 7:13-14, en el que el Hijo del Hombre se le da toda la autoridad. Este nombre a veces enfatiza la humanidad de Yeshua y otras veces Su deidad (Mateo 9:6; Marcos 9:31; Lucas 21:36; Juan 6:27).

Jametz o Hametz: Palabra hebrea para levadura, que hace crecer el pan. Dios le ordenó a Israel que no comiera jametz durante la Pascua, Yeshua enseña que tanto el bien como el mal se esparcen, de la misma manera que el jametz leuda toda la masa (vea también 16:6-12; Marcos 8:15; Lucas 12:1 Éxodo 12:20; Levítico 7:13; Amós 4:5; Mateo 13:33 y 13:21).

Jánuca: Significa dedicación, la fiesta que conmemora la victoria de los Macabeos sobre los ejércitos de Antíoco Epífanes en el año 165 aC y la reconstrucción y dedicación del Templo después de su profanación por los invasores sirios.

Jesed (oChesed): “misericordia”, “bondad” y/o “lealtad al pacto”. Es una palabra compleja que resume el amor complejo y abrumador amor de Dios por su pueblo, yendo más allá de los conceptos de amor, misericordia o bondad en conjunto (vea también Isaías 63:7; Zacarías 7:1; Salmo 13:1; Salmo 86:1; Salmo 107:1; Salmo 118:1; Salmo 136:1).

Justos del TaNaJ: Creyentes (o santos) del Antiguo Testamento

Kadosh (o Cadosh): Es la palabra hebrea para “santo”. Este término describe al pueblo apartado para Dios. ADONAI mismo es kadosh (Levítico 19:1-2). Muchas cartas a las comunidades (iglesias) recién formadas de Cristo podrían haberse dirigido a los santos (o seguidores) de Yeshua como los kedoshim (vea también Jeremías 2:3; Nehemías 8:10; Primera Corintios 1:2; Efesios 1:1; Filipenses 1:1; Colosenses 1:2).

Levita: Descendientes de la tribu de Leví, que servían en el Tabernáculo y el Templo como porteros, músicos, maestros y asistentes de los sacerdotes. Los escribas, o maestros de la Torá, originalmente procedían únicamente de entre los levitas y fueron los precursores de los fariseos. Más tarde, los fariseos se expandieron para incluir miembros de todas las tribus, sin que se requiriera filiación con Leví (vea también Éxodo 4:14; Ezequiel 48:12; Esdras 1:5; Juan 1:19).

LXX (Septuaginta): La traducción griega “oficial” del TaNaJ, que data del siglo III aC hasta el siglo IV dC. La traducción inicial fue de la Torá (los cinco libros de Moisés), que la Carta de Aristeas registra y que supuestamente fue hecha por setenta eruditos judíos en Alejandría (Egipto) de donde obtuvo su nombre (Septuaginta). Se le conoce comúnmente con la abreviatura LXX (70).

Maestro de Torá: Un erudito de Torá dedicado a interpretar y transmitir la Torá. Escribieron rollos de la Torá, actas de divorcio y otros documentos legales. El término hebreo es sofer.

Mashiaj (hebreo): Mesías, el Ungido (Mateo 26:63; Marcos 1:1; Juan 20:31).

Matzá (singular) o Matzot (plural): Pan que se elabora sin levadura y se come especialmente durante la fiesta de Pascua (Pesaj). Véase también jametz (véase también Éxodo 13:6; Levítico 2:5; Ezequiel 45:21; Mateo 26:17; Marcos 14:22; Lucas 22:19; Juan 13:26).

Meguilá (singular) o Megillot (plural): Los cinco libros de la Escritura utilizados para lecturas especiales durante las fiestas: Cantar de los Cantares, Rut, Lamentaciones, Eclesiastés y Ester.

Melquisedec: MalkiTsedéc, MalquiTsedek, Malki-tsédeq

Menorá (singular) o Menorot (plural): El (los) candelabro(s) de siete brazos diseñado y ordenado por Dios para el servicio en el Tabernáculo/Templo (Éxodo 25:32; Primera de Reyes 7:49; Zacarías 4:2).

Mesías (griego): Cristo, el Ungido, usado a menudo para hablar de un Redentor enviado por Dios para liberar a Su pueblo del exilio y la opresión (vea también Mateo 1:16; Marcos 8:29; Lucas 2:11 y Juan 1: 41).

Midrash: Interpretación o aplicación alegórica de un texto. Se espera que el oyente comprenda que el escritor del midrash no está exponiendo el significado claro del texto, sino que presenta sus propias ideas. El término proviene de la raíz posbíblica “buscar” o “exponer”.

Mikve: baño o piscina con un flujo de agua dulce; utilizado en el judaísmo ortodoxo hasta el día de hoy para la purificación ritual o limpieza ceremonial, realizada en varios momentos de la vida de una persona (vea Mateo 3:13 y Tito 3:5).

Mitzvá (singular) o mitzvot (plural): Un mandamiento de Dios. Otro significado, más moderno, es “una buena acción”, más ampliamente, un principio general para vivir (Deuteronomio 11:22; Segunda de Reyes 17:37; Proverbios 6:20; Mateo 26:10; Marcos 14:6).

Moshé: Moisés

Naciones, las: Las goyim o los gentiles

Olam haba: “La era venidera” o “el mundo venidero”. Describe un tiempo después de que el mundo sea perfeccionado bajo el gobierno del Mesías. Este término también se refiere al más allá, donde pasa el alma después de la muerte. Se puede contrastar con olam hazeh, “este mundo” (Mateo 12:32; Marcos 10:30; Lucas 18:30 y 20:35; Efesios 1:21; Hebreos 6:5; Apocalipsis 20-21).

Ómer: Significa “gavilla”, el manojo de cebada utilizado en la ofrenda de Primicias. Después del período del Templo llegó a identificarse con la cuenta del omer (Sefirat HaOmer), la cuenta de los días desde las Primicias hasta Shavuot (festas de las Semanas o Pentecostés).

Pacto: Teológicamente, habla de la relación contractual entre Dios y su pueblo. El término hebreo es brit. Véase también Brit Hadashah, la palabra hebrea para Nuevo Pacto (vea Génesis 6:18 y 17:2; Jeremías 31:30; Nehemías 9:32; Mateo 26:28; Marcos 14:24; Lucas 1:72).

Pesaj: Pascua. La fiesta judía que conmemora la liberación de la esclavitud egipcia. En los tiempos bíblicos, los judíos solían viajar al templo, sacrificar corderos allí y comer una comida especial que conmemoraba la salida de los judíos de la esclavitud en Egipto. Era una de las tres “fiestas de peregrinación” que se esperaba que todos los judíos sanos celebraran ante YHVH en Jerusalén. Hoy en día, Pesaj se celebra en casa con una comida especial llamada seder. Yeshua celebró la Pascua con Sus apóstoles (Mateo 26:18; Marcos 14:12; Lucas 22:7; Juan 13:1).

Prosélitos de la Puerta: Había tres niveles de relación de los gentiles con el judaísmo. Después de los temerosos de Dios, los prosélitos de la Puerta eran el segundo nivel. La Puerta era la pared intermedia de separación (Efesios 2:14) en el recinto del Templo que a los gentiles no se les permitía pasar bajo pena de muerte (vea el enlace, haga clic Bb – Un etíope pregunta sobre Isaías 53). Estos fueron gentiles que adoptaron muchas prácticas judías como celebrar Shabat y la fiesta de Israel, pero no se convirtieron en prosélitos completos. La mayoría de ellos eran hombres porque no requería circuncisión.

Prosélitos del Pacto: En el tercer nivel de relación de los gentiles con el judaísmo (vea arriba), había prosélitos del Pacto. Ellos entraron en el Pacto del Sinaí como judíos completos, por así decirlo. La mayoría eran mujeres porque este nivel requería la circuncisión.

Purim: Significa “suertes”, la festividad basada en la historia de Ester.

Rasheet (o Reishit): Uno de varios nombres para la Fiesta de las Primicias o de los Primeros Frutos.

Redimir: Liberar de la esclavitud, volver a comprar algo perdido, por un precio.

Rosh Hashaná: en hebreo significa “Cabeza del Año”. Conocido como el Año Nuevo judío o la Fiesta de las Trompetas.

Ruaj: Palabra hebrea para “espíritu”, “aliento” o “viento”. Yeshua explica el viento y el Espíritu a Nicodemo en Juan 3:5-8. Las Escrituras se refieren con frecuencia al Ruaj HaKodesh, el Espíritu Santo (Éxodo 35:31; Números 11:25; Malaquías 2:15; Hechos 2:2 y 10:44; Romanos 8:4-17).

Ruaj HaKodesh: Nombre hebreo para el Espíritu de Dios, o Espíritu Santo (Isaías 63:11; Salmo 51:13; Mateo 1:20; Marcos 1:8; Lucas 1:16; Juan 14:26).

Saduceos: Una de las sectas del judaísmo del siglo I. De los saduceos procedían los principales sacerdotes que administraban los asuntos del templo. A diferencia de los fariseos, no creían en la resurrección de los muertos (Mateo 16:12; Marcos 12:18; Lucas 20:27).

Sanedrín: Literalmente, la reunión de los sentados, como ser un juez sentado en un banco – término legal para un juez oficiante. Esta era la Corte Suprema del antiguo Israel. Ejercía autoridad legislativa y judicial (Mateo 26:59; Marcos 15:1; Lucas 22:66; Juan 11:47).

SEÑOR: Cuando los traductores de la Biblia King James en el siglo XVII llegaron a la palabra hebrea YHVH, necesitaban distinguirla de la palabra Señor, que significa maestro. Entonces, lo escribieron en mayúscula. Por lo tanto, SEÑOR es en realidad el Tetragrámaton, es decir, el nombre de cuatro letras de YHVH.

Seol: El equivalente hebreo del griego “Hades”, el lugar donde estan los muertos.

Shabat: El día de reposo, el séptimo día de la semana, cuando cesa el trabajo. En este día El pueblo de Dios está llamado a descansar y renovar su relación con su Creador, quien también descansó el séptimo día. El Shabat comienza el viernes por la noche al atardecer y termina el sábado por la noche después de que aparecen tres estrellas (Éxodo 20:10; Nehemías 9:14; Mateo 12:10; Marcos 1:21; Lucas 23:56; Juan 9:14).

Shaddai: Nombre común de Dios en el TaNaJ, generalmente traducido como Todopoderoso u Omnipotente. El nombre se usa a menudo en una combinación como El Shaddai, o Dios Todopoderoso (Génesis 17:1; Ezequiel 1:24; Job 11:7).

Shalom: La palabra hebrea para paz, plenitud, bienestar; un saludo usado al encontrarse o partir (Génesis 26:31; Primera Samuel 16:4; Segunda Crónicas 18:16; Mateo 10:13; Marcos 9:50; Lucas 1:28; Juan 14:27).

Shavuot: la fiesta de las Semanas (hebreo) o Pentecostés (griego), ya que llega siete semanas después de Pesaj; también llamado Pentecostés, de la palabra griega cincuenta porque se cuentan cincuenta días después de la Pascua. Es una de las tres “fiestas de peregrinación” que se esperaba que todos los judíos sanos celebraran ante YHVH en Jerusalén. Originalmente celebraba la cosecha, pero luego conmemoró el día en que Dios entregó la Torá a Israel. Después de la resurrección de Yeshua, los discípulos esperaron el regalo de Dios del Ruaj HaKodesh, que también llegó en Shavuot (Éxodo 34:22; Segunda de Crónicas 8:13; Hechos 2:1 y 20:16; Primera de Corintios 16:8).

Shekinah: La manifestación visual de la gloria de Dios.

Shofar: Un cuerno de carnero, usado en la Biblia para convocar ejércitos, llamar al arrepentimiento y en otras situaciones. Los sonidos de variada duración y cantidad, significaban diferentes instrucciones. Las trompetas de metal también se usaban para propósitos similares, pero exclusivamente por los cohanim. Hoy el shofar se utiliza en Rosh Hashaná de Yom Kippur, los Días Santísimos judíos. El shofar también marca el comienzo del Año del Jubileo (Levítico 25:9-10; Zacarías 9:14; Mateo 24:31; Primera de Corintios 15:52; Primera de Tesalonicenses 4:16-17).

Shub: volver, volverse o arrepentirse del mal.

Sinaí: la montaña en el desierto entre Egipto y la tierra de Israel.

Sinagoga: Un lugar de reunión de los judíos para escuchar la Torá, orar y adorar a Dios. Había muchas sinagogas en todo Israel y el mundo grecorromano (Mateo 4:23; Marcos 5:22; Lucas 4:16; Juan 9:22).

Sion (Sión): El Monte Sion, fue originalmente la Ciudad de David, al sur de la moderna Ciudad Vieja de Jerusalén. Más tarde, el nombre Sion pasó a referirse metafóricamente al Monte del Templo, Jerusalén o el pueblo de Israel. La colina que ahora se llama Monte Sion recibió su nombre en el siglo IV dC (Isaías 1:27; Salmo 65:2; Mateo 21:5; Juan 12:15).

Sucot: la fiesta de las cabañas, tabernáculos o enramadas, que celebra los cuarenta años en que el pueblo de Israel vivió en tiendas o cabañas en el desierto entre Egipto y la tierra de Israel. La palabra hebrea sucá significa cabaña y sucot es el plural y significa cabañas. Sucot es una de las tres “fiestas de peregrinar” que se esperaba que todos los judíos sanos celebraran ante YHVH en Jerusalén (Levítico 23:34; Zacarías 14:16; Segunda Crónicas 8:13; Mateo 17:4; Marcos 9:5; Lucas 9:33).

Sumergir: Sumergir todo el cuerpo bajo el agua como acto de dedicación al SEÑOR, o como profesión de fe en Yeshua. La palabra se ve a menudo en otras traducciones como “bautizar”. La ceremonia de inmersión se llama “inmersión” o “bautismo”. El primo de Yeshua era conocido como Juan el bautista o sumergidor (Mateo 3:1; Marcos 6:14; Lucas 7:20).

Tabernáculo: Una vivienda temporal, como las cabañas construidas durante Sucot. También se usa en el TaNaJ de la tienda en la que Dios habitó entre el pueblo judío, tanto en el desierto como en la tierra de Israel. Cuando la palabra se usa como verbo (tabernaculizar), se refiere a Yeshua (Jesús) viniendo a habitar entre Su pueblo (Juan 1:14), recordándonos el Tabernáculo en el desierto y también la Fiesta de los Tabernáculos (Éxodo 25:9; Primera Crónicas 6:17; Juan 1:14 y 7:2).

Talmid (singular) o Talmudin (plural): Estudiante o estudiantes.

Talmud: El cuerpo codificado de la Ley Oral Judía; Incluye creaciones literarias, leyendas, interpretaciones de las escrituras, compuesto por la Mishná y la Guemará. Fue escrito en hebreo por los Tahnahiem (vea el comentario sobre La vida de Cristo Ei – La ley oral) y generalmente se considera que fue editado alrededor del año 200 dC.

TaNaJ: La palabra hebrea TaNaJ es un acrónimo, basado en las letras T (para Tora), N (para “Nevi’im” o los Profetas) y J (para “Ketuvim” o las Escrituras Sagradas). Es la colección de las enseñanzas de Dios a los seres humanos en forma de documento. Este término se usa en lugar de la frase “el Antiguo Testamento o Antiguo Pacto”.

Temerosos de Dios: Había tres niveles de relación de los gentiles con el judaísmo. Los temerosos de Dios eran el primer nivel. Estos fueron gentiles que se convencieron de que ADONAI era el único Dios verdadero, abandonaron su paganismo e idolatría, pero no eligieron convertirse en prosélitos de ninguna forma, y por lo tanto no hubo adopción de costumbres o prácticas judías (vea enlace haga clic Be – La visión del centurión).

Torá: Literalmente, esta palabra hebrea significa enseñanza o instrucción (Éxodo 13:9; Isaías 2:3; Salmo 1:2; Mateo 5:17; Marcos 1:22; Lucas 24:44; Juan 7:19; Romanos 7:1ff; Primera Corintios 9:20-21; Gálatas 3:21). Puede usarse para los cinco libros de Moisés, o más generalmente para los mandamientos de Dios, o para todo el TaNaJ (Juan 10:34). Sin mayúsculas, la Torá puede entenderse generalmente como una ley o principio (Romanos 7:21-8:2).

Tzitzit: Flequillo que se ponía en una prenda de vestir de acuerdo con Números 15:37-41.

Yerushalayim: Jerusalén o Jerusalem

Yeshua: Jesús, el nombre hebreo del Mesías, y es una forma masculina y un juego de palabras con yeshu’a (salvación) (Mateo 1:21; Marcos 6:14; Lucas 2:21; Juan 19). :19).

YHVH: El Tetragrámaton, que significa el Nombre, el nombre de cuatro letras de Dios. Por lo tanto, Dios no tiene muchos nombres, Él tiene un solo nombre: YHVH (Yod Heh Vav Heh). Todos los demás nombres en la Biblia describen Sus características y Sus atributos.

Yisra’el: Israel.

Yochanan: Juan.

Yom Ha-Bikkurim: Uno de los varios nombres para la Fiesta de las Primicias o primeros frutos.

Yom Kippur: El Día de la Expiación, el cierre de los Grandes Días Sagrados, y considerado el día más sagrado del año en el judaísmo tradicional

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2024-09-04T23:51:44+00:000 Comments

Ba – Simón el mago 8: 9-25

Simón el mago
Los samaritanos son salvados
mediante la predicación de Pedro
8: 9-25

34 dC
Los acontecimientos de Hechos 3-8 transcurren con creciente preocupación por parte de los judíos, y especialmente de las autoridades judías en Jerusalén. La creciente tensión dio lugar a una acción de vigilancia contra Esteban, y luego a un esfuerzo autorizado bajo el mando del
(rabino) Saulo para perturbar y destruir ese nuevo movimiento mesiánico, lo que implicó persecución e incluso la muerte de los creyentes. La persecución llevó a varios creyentes como Felipe a ir a Samaria y dar testimonio de Yeshua.

Simón el mago ESCUDRIÑAR: ¿Qué tienen en común Simón y Felipe en los versículos 5-11? ¿En qué se diferencian? ¿Cómo ha respondido la multitud a ambos hombres en el pasado? ¿Por qué vendrían Pedro y Juan a ellos? ¿Por qué el Padre podría retrasar el derramamiento de Su Espíritu hasta que Pedro y Juan estuvieran en escena? ¿Cree que esto fue más una lección para los samaritanos o para los apóstoles? ¿Por qué? ¿De qué manera la reacción de Simón hacia los apóstoles en los versículos 18 y 19, muestra su profundo conocimiento del evangelio? ¿Cree que las palabras de Simón en el versículo 24 revelan un cambio en su corazón? ¿Por qué si o por qué no?

REFLEXIONAR: ¿Con qué prejuicios culturales o étnicos lo criaron a usted? ¿Cómo está el evangelio rompiendo esos prejuicios en su vida? ¿Cuál fue su principal motivación al recibir a Jesús (Yeshua el Mesías) como Salvador? ¿Cuál es su principal motivación para continuar en la fe? ¿Ha disminuido o aumentado su influencia personal desde que se convirtió en creyente? ¿Cómo? ¿Por qué? ¿Le han obstaculizado de alguna manera los celos hacia otros creyentes?

Después de haber introducido a Felipe, el protagonista, en la historia, Lucas recurre ahora a Simón, el antagonista. Aunque Simón tenía un nombre hebreo, era un samaritano. Al principio Parecía ser un creyente genuino. Incluso alguien tan perspicaz como Felipe, lo aceptó como tal y se apegó. Simón incluso continuó con Felipe (8:13). Así, manifestó las tres marcas de un creyente genuino: creyó, fue obediente en bautismo y se apegó a Felipe. Entonces, Simón ilustra lo difícil que es distinguir el trigo de la cizaña (vea el comentario sobre La vida de Cristo Ev La parábola del trigo y la cizaña).

Y había grande gozo en aquella ciudad. Pero cierto varón de nombre Simón, había estado practicando magia en la ciudad y asombraba a la gente de Samaria, haciéndose pasar por alguien importante (8:9-10). ¿En qué se equivocó Simón? ¿Cómo alguien que estuvo tan cerca se perdió la verdadera salvación? La fe debe estar basada en la verdad, y la suya no la estaba. Este pasaje revela cuatro fallas flagrantes en la creencia de Simón.

En primer lugar, Simón falla, él tenía una visión equivocada de sí mismo, era egoísta. Practicar magia en la ciudad y asombrar al pueblo de Samaria le llevó a afirmar que era alguien grande. Es posible que Simón fuera simplemente un mago al que le gustaba tener poderes y controlar a la gente. O pudo haber sido el líder de una secta gnóstica judía herética. Los gnósticos generalmente creían en varios seres espirituales en una cadena de mando que conducía a Dios y proponían un conjunto de prácticas como medio para alcanzar niveles espirituales más altos en su culto religioso. Es muy posible que haya estado en contacto con lo sobrenatural; pero habría sido con demonios, no con el poder de Dios. El pecado de Simón en los versículos 18-23 a continuación confirma su impiedad.171 El dominio de Simón sobre el pueblo de Samaria era total. Todos le estaban prestando especial atención. Impresionados por sus poderes de lo oculto, ellos declararon erróneamente: Éste es el llamado gran poder de Dios (8:10b). Ese título demostró que Simón reivindicaba la deidad para sí mismo. Y por haberlos embelesado bastante tiempo con artes mágicas, le prestaban gran atención (8:11). Mientras Simón creyera que era una deidad, no podría llegar a tener un sentido adecuado de sí mismo. Sólo los humildes, conscientes de sus insuficiencias y carencias, tienen ese sentimiento de estar perdidos que los impulsa hacia ADONAI. Simón, firmemente atrapado en las garras del orgullo, no lo hizo.

En segundo lugar, Simón falla, él tenía una visión equivocada de la salvación. A través de la predicación de Felipe, estalló un avivamiento en la ciudad. Pero cuando creyeron a Felipe, que proclamaba las buenas nuevas acerca del reino de Dios y del nombre de Jesús el Mesías, fueron bautizados tanto hombres como mujeres (8:12). Los samaritanos necesitaban llegar a la conclusión de que el reino de Dios sería un reino judío y no un reino samaritano como habían pensado (vea el comentario sobre La vida de Cristo Ca Jesús habla con una mujer samaritana). Así, a medida que más y más personas creían en el Mesías para su salvación, Simón veía disminuir su número de seguidores. Su popularidad decreciente, su deseo de estar asociado con Dios de alguna manera y su deseo de aprender más sobre lo que percibía como el poder de Felipe, motivaron a Simón a creer. Y aun Simón mismo creyó, y habiendo sido bautizado, estaba apegado constantemente a Felipe; y se maravillaba al ver las señales milagrosas y los grandes portentos que se hacían. (8:13). Simón continuo con Felipe como una oportunidad para conseguir ese poder y tener más influencia sobre las personas. Tenía, por así decirlo, un interés profesional en descubrir la fuente del asombroso poder de Felipe. Pero su “fe” estaba basada en el poder de los milagros, no en el poder salvador del Mesías. Lo que él vio resultó en asombro, no en santidad.

Los samaritanos son salvos: Y los apóstoles que estaban en Jerusalén, al oír: ¡Samaria ha recibido la palabra de Dios! les enviaron a Pedro y a Juan, quienes, después de bajar, oraron por ellos para que recibieran el Espíritu Santo; porque aún no había descendido sobre ninguno de ellos, sino que sólo estaban bautizados en el nombre del Señor Jesús (8:14-16). Pedro y Juan fueron para comprobarlo, esta es la última mención de Juan en Hechos, cuando Pedro, y luego Pablo, toman el centro del relato. Los samaritanos despreciaban a Jerusalén, ¿rechazarían a los apóstoles por ser de la Ciudad Santa? ¿Rechazarían los judíos a los samaritanos? Les sorprendió que los samaritanos pudieran ser incluidos en el Reino porque practicaban una religión híbrida (Lucas 9:54). Entonces, los apóstoles fueron enviados por tres razones. Primero, autentificar la salvación de los samaritanos. En segundo lugar, porque Pedro tenía las llaves del Reino. Y en tercer lugar, oraron para que recibieran el Ruaj HaKodesh. Aunque estos samaritanos ya habían creído y habían sido bautizados por inmersión.

Aquellos que enseñan que los creyentes reciben el Espíritu después de la salvación, recurren a este y a otros pasajes similares en busca de apoyo. Aquí hay un ejemplo claro, argumentan, de personas que fueron salvas, pero no tenían el Ruaj HaKodesh. Tal enseñanza ignora la naturaleza transitoria de Hechos (vea más abajo). También falla frente a la clara enseñanza de las Escrituras de que, si alguno no tiene el Espíritu de Cristo Mesías, éste no es de Él (Romanos 8:9). No existe un creyente que aún no tenga el Ruaj HaKodesh, ya que por un Espíritu todos fuimos sumergidos en un solo cuerpo en el momento de la conversión (vea el comentario sobre La Vida de Cristo Bw – Lo que Dios hace por nosotros en el momento de la fe).

¿Por qué los samaritanos (y más tarde los gentiles) tuvieron que esperar a los apóstoles antes de recibir al Espíritu Santo? Si los samaritanos hubieran recibido el Espíritu Santo independientes de la iglesia/Comunidad Mesiánica, la ruptura entre ellos se podría haber perpetuado. Bien podría haber habido dos entidades separadas, una Iglesia o (Congregación Mesiánica) y una Iglesia Samaritana. Pero Dios diseñó una Congregación Mesiánica/Iglesia: Porque Él es nuestra paz, que de ambos hizo uno, y derribó la pared intermedia de separación, es decir, la enemistad (Efesios 2:14a).

Dios nunca llega tarde al diferir la venida del Espíritu hasta que llegaran Pedro y Juan. ADONAI preservó la unidad de la Congregación Mesiánica/Iglesia. Los apóstoles necesitaban ver por sí mismos y dar testimonio de primera mano a la Congregación Mesiánica/Iglesia en Jerusalén, de que el Espíritu había venido a los samaritanos. Además, los samaritanos necesitaban aprender que estaban sujetos a la autoridad de los apóstoles. Los creyentes judíos y los creyentes samaritanos estaban unidos en un solo Cuerpo. Cuando llegaron Pedro y Juan, les imponían las manos, y recibían el Espíritu Santo (8:17).172 En ninguna parte la Biblia enseña que el don de lenguas sea otra cosa que los lenguajes humanos.173

Una mirada más cercana a las llaves del Reino: En Cesarea de Filipo, Pedro declaró que Jesús era el Mesías, el Hijo del Dios viviente. En respuesta, Jesús dice en Mateo 16:19a: te daré las llaves del reino de los Cielos (vea el comentario La Vida de Cristo Fx Sobre esta roca edificaré mi iglesia). Siempre que la palabra llave o llaves se usa simbólicamente en la Biblia, representa la autoridad para abrir o cerrar puertas (Jueces 3:25; Primera de Crónicas 9:27; Isaías 22:20-24; Mateo 16:19a; Apocalipsis 1:18, 3:7, 9:1 y 20:1). Pedro será el encargado de abrir las puertas de la Iglesia. Él tiene un papel especial en el libro de los Hechos. En la Dispensación de la Torá (Ley), la humanidad fue dividida en dos grupos, judíos y gentiles. Pero en la Dispensación de la Gracia, por lo que sucedió en el período intertestamentario, hubo tres grupos de personas, judíos, samaritanos y gentiles (Mateo 10:5-6). Pedro sería la persona clave (juego de palabras) para traer a los judíos (vea Hechos 2), a los samaritanos (vea Hechos 8), y a los gentiles (Hechos 10) a la Iglesia al recibir el Espíritu Santo. Una vez que se abrió la puerta, permaneció abierta.

A medida que avancemos en el libro de Hechos, estaremos comparando la forma en que la salvación llega a judíos, samaritanos y gentiles, mostrando, como fue el caso con la forma en que Yeshua curaba, que no hay un orden específico establecido. Hechos es un libro de transición y un libro histórico, y no se puede establecer una doctrina basada en la historia. Usted basa la doctrina en declaraciones teológicas claras. Los hechos históricos pueden ilustrar la doctrina, pero no pueden desarrollarla por sí solos.

El don de lenguas (idiomas) se puede ver cuatro veces en el libro, Hechos 2, Hechos 8, Hechos 10 y Hechos 19. No existe un orden establecido que conduzca al bautismo en el Espíritu y al posterior hablar en idiomas. En Hechos 2, cuando la salvación llegó a los judíos, el orden fue primero el arrepentimiento, luego la inmersión en agua y luego recibir la inmersión en el Espíritu mediante el Ruaj HaKodesh, como se evidencia al hablar en idiomas. Aquí en Hechos 8 con la salvación llegando a los samaritanos, el orden fue este: primero creyeron, luego vino la inmersión en agua, luego llegaron los apóstoles, luego impusieron sus manos sobre los samaritanos, y luego recibieron la inmersión en el Espíritu Santo, y en opinión de este autor habría sido demostrado por los idiomas (lenguas) que ellos hablaron. Una vez más, no se construye doctrina sobre la historia. Tenga presente este orden y veremos en qué fue diferente con los samaritanos, los gentiles y los discípulos de Juan.

Para comprender las diferencias en las cuatro apariciones de los idiomas en Hechos, haremos seis preguntas a medida que lleguemos a cada pasaje. Sin embargo, el elemento común clave en los cuatro casos es que los idiomas (es decir, las lenguas) tienen como finalidad la autenticación.

1. ¿Quién lo recibió? Los creyentes de Samaria.

2. ¿Qué eran ellos? Eran samaritanos, a quienes históricamente no les agradaban los judíos y eran antagónicos hacia Jerusalén. De hecho, a menudo atacaron e incluso mataron a judíos que se dirigían desde Galilea a Jerusalén a través de Samaria (Lucas 9:51-53).

3. ¿Cuáles fueron las circunstancias? Felipe predicó a los samaritanos que creyeron y fueron salvos. Pero esto generó algunas preguntas por parte de los apóstoles en Sión que tenían en mente el viejo antagonismo samaritano. Entonces Pedro y Juan fueron enviados para autenticar estos informes.

4. ¿Cuál fue el medio? La imposición de manos de Pedro y Juan, apóstoles, que vinieron de Jerusalén.

5. ¿Cuál fue el propósito en este contexto? Como ocurre en todos los casos en el libro de los Hechos, hablar en lenguas se utiliza con fines de autenticación. Eso fue cierto en Hechos 2, es cierto aquí en Hechos 8, y será cierto en Hechos 10 y Hechos 19, los cuatro lugares donde se encuentra. Para los apóstoles judíos demostró que los samaritanos pudieron ser salvos. Fue difícil para ellos creerlo, pero eso es lo que autenticaría para los apóstoles en Sión. Y para los samaritanos autentificó la autoridad de los apóstoles judíos. Esto fue para enseñar a los samaritanos que no debían crear una Iglesia Samaritana separada, porque eso es exactamente lo que habían hecho, cuando los judíos los rechazaron en el tiempo que Esdras regresó a Palestina del cautiverio babilónico para reconstruir el Templo (vea el comentario sobre Esdras-Nehemías As Oposición a la reconstrucción del Templo). Ellos construyeron su propio templo rival en el monte Gerizim con un lugar santo y un lugar santísimo. Entonces, no debían construir una Iglesia Samaritana en oposición a la Iglesia/Comunidad Mesiánica.

6. ¿Cuáles fueron los resultados? Los samaritanos recibieron la inmersión del Espíritu Santo y se convirtieron en miembros del Cuerpo del Mesías, y nunca se estableció ninguna Iglesia Samaritana rival.174

En tercer lugar, Simón falla, él tenía una visión equivocada del Espíritu. Este pasaje revela el tercero de cuatro fallos flagrantes en la teología de Simón. Y viendo Simón que por la imposición de las manos de los apóstoles era dado el Espíritu, les ofreció dinero, diciendo: Dadme también este poder, para que a cualquiera que imponga las manos reciba el Espíritu Santo (18-19) como lo demuestra el hecho de hablar en otros idiomas, fue demasiado para él. Felipe lo había impresionado, pero Pedro y Juan lo habían abrumado. Era obvio que algo sobrenatural debía haber ocurrido. Simón les ofreció dinero para recibirlo. Trató a los dos apóstoles como si fueran compañeros practicantes de magia, y estaba dispuesto a negociar el precio para comprar el secreto de su poder. Sin embargo, nada de lo que Dios tiene está a la venta. Ciertamente no el Ruaj HaKodesh. Por lo tanto, Pedro se enojó y le dijo: “Tu plata sea contigo para destrucción, porque pensaste obtener el don de Dios por dinero. (la interpretación de JB Phillips, “¡Al diablo contigo y tu dinero!” transmite el sentido real de las palabras de Pedro) – porque pensabas que se podía comprar el don de Dios con dinero. La visión de Simón del Espíritu Santo como una mercancía que debía comprarse y agregarse a su repertorio de trucos espirituales, era completamente detestable y mostraba su condición perdida.

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En cuarto lugar, Simón falla, él tenía una visión equivocada del pecado. Pedro luego de su condena a Simón, le hace un llamado a la salvación. Arrepiéntete pues, de esta tu maldad, y ruega al Señor, por si acaso te será perdonado el pensamiento de tu corazón; porque veo que estás en hiel de amargura y en prisiones de maldad (22-23). Pedro, usando la expresión para las ofensas más graves contra Dios en el TaNaJ (Deuteronomio 18:18-20), le advierte a Simón de la gravedad de su situación: que estás en hiel de amargura y en prisiones de maldad. Simón, sin embargo, no se dejó convencer. Aunque probablemente conmocionado y asustado, se negó a pedir perdón al Señor. En cambio, dijo: ¡Rogad vosotros por mí al Señor, para que ninguna de las cosas que habéis dicho venga sobre mí!”. Su única preocupación era escapar de las consecuencias de su pecado. Sin embargo, el verdadero arrepentimiento consiste en algo más que el mero dolor por el pecado. (Segunda Corintios 7:9-10).175

Ellos entonces, después de testificar fielmente y hablar la palabra del Señor, regresaron a Jerusalén evangelizando muchas aldeas de los samaritanos (8:25). En resumen, este archivo muestra el evangelio a medida que comienza a alejarse de una ocupación exclusiva por Israel. El evangelio es para cada persona, para que cada uno lo considere, se espera, con un oído y corazón que responda. Esto es tan cierto hoy como lo era entonces. Aquí vemos a los judíos cruzando fronteras raciales y étnicas con el evangelio, llevando el mensaje de esperanza a los samaritanos. Y tomar esa iniciativa está en el corazón de la misión de la Iglesia/Comunidad Mesiánica en el mundo: Entonces Jesús se acercó y les habló, diciendo: Toda potestad me ha sido dada en el cielo y en la tierra, Id pues, discipulad a todas las gentes, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo; enseñándoles a guardar todas las cosas que os mandé. He aquí Yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin de los siglos (Mateo 28:18b-20).176

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Di – Notas finales

Notas finales

El libro de los Hechos desde una perspectiva judía

1. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, pág. 1-2.

2. El Libro de los Hechos, La guía inteligente de la Biblia, por Robert Girard, Thomas Nelson, Nashville, Tennessee, 2007, páginas iii-iv.

3. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, página xxxi.

4. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, página xxxii-xxxxiii.

5. Caos carismático, por John MacArthur, Zondervan, Grand Rapids, MI, 1992, pág. 171-172.

6. Las raíces judías de los Hechos, por Joseph Shaulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2003, páginas xxxvi y xxxvii.

7. Fundamentos Mesiánicos, por Sam Nadler, Word of Messiah Ministries, Charlotte, NC, 2010, páginas 133-142.

Testimonio en Jerusalén 1:1 a 8:4

8. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, MI, 1998, página 199.

9. Las raíces judías de los Hechos, por Joseph Shaulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2003, páginas 2-3.

10. acto 101.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

11. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 21.

12. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 15.

13. Ibid, página 18.

14. acto 101.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

15. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, página 24.

16. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 23.

17. Una vida con propósito, por Rick Warren, Zondervan, Grand Rapids, Michigan, 2002, página 290.

18. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 217.

19. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 12.

20. acto 101.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

21. ¿Quién soy yo en Cristo?, por Neil Anderson, Regal Books, Ventura, California, 1973, páginas 213-219.

22. acto 101.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

23. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, MI, 1998, páginas 126-127.

24. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, páginas 217-218.

25. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, pág. 29.

26. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, MI, 1998, página 123.

27. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 28.

28. acto 101.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

29. El mensaje de Hechos, por John Stott, Inter-Varsity Press, Downers Grove, Illinois, 1990, página 59.

30. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, MI, 1998, páginas 147-150.

31. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, pág. 39.

32. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, páginas 219 y 221.

33. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, página 65.

34. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 219.

35. God’s Appointed Times, por Barney Kasdan, Lederer Messianic Pub, Baltimore, MD, 1993, página 55.

36. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 221.

37. Charismatic Chaos, por John MacArthur, Zondervan, Grand Rapids, MI, 1992, páginas 173-174 y 226.

38. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 41.

39. gotquestions.org

40. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 216.

41. Los tiempos designados por Dios, por Barney Kasdan, Lederer Messianic Pub, Baltimore, MD, 1993, página 55.

42. Caos carismático, por John MacArthur, Zondervan, Grand Rapids, Michigan, 1992, página 179.

43. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 46.

44. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, páginas 217 y 220.

45. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, MI, 1998, página 123.

46. Ibid, página 123.

47. Ibid, página 123.

48. Ibid, páginas 116-118.

49. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 76.

50. act102.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

51. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 226.

52. act102.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

53. God’s Appointed Times, por Barney Kasdan, Lederer Messianic Pub, Baltimore, MD, 1993, página 56.

54. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 33.

55. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 84.

56. El Libro de los Hechos, La guía inteligente de la Biblia, por Robert Girard, Thomas Nelson, Nashville, Tennessee, 2007, página 35.

57. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 43.

58. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 228.

59. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, página 158.

60. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 228.

61. El mensaje de Hechos, por John Stott, Inter-Varsity Press, Downers Grove, Illinois, 1990, página 87.

62. Acts, de I. Howard Marshall, TNTC, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1996, página 86.

63. act103.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

64. Hechos, por John Polhill, The New American Commentary, Volumen 26, Broadman Press, Nashville, Tennessee, 1992, página 126.

65. El Mesías en el templo, de Roger Liebi, Christlicher Medien-Vertrieb, Dusseldorf, Alemania, 2012, página 335.

66. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 97.

67. Hechos, por John Polhill, The New American Commentary, Volumen 26, Broadman Press, Nashville, Tennessee, 1992, página 128.

68. Acts, de I. Howard Marshall, TNTC, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1996, página 89.

69. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, MI, 1998, página 221.

70. Charismatic Chaos, por John MacArthur, Zondervan, Grand Rapids, Michigan, 1992, páginas 112-115 y 214-216.

71. Acts, de I. Howard Marshall, TNTC, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1996, página 89.

72. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 51.

73. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 230.

74. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 51.

75. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 40.

76. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, páginas 115-116.

77. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 51.

78. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, MI, 1998, página 123.

79. Ibid, página 123.

80. act103.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

81. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, páginas 55-57.

82. Acts, de I. Howard Marshall, TNTC, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1996, página 97.

83. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, páginas 225-226.

84. Ibid, página 220.

85. Ibid, página 241.

86. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 49.

87. Una vida con propósito, por Rick Warren, Zondervan, Grand Rapids, Michigan, 2002, página 282.

88. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 234.

89. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 138.

90. Respuestas a preguntas difíciles, por J. Carl Laney, WIPF & Stock, Eugene, Oregon, 1997, página 245.

91. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, MI, 1998, página 123.

92. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, páginas 49-50.

93. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 142.

94. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 51.

95. Respuestas a preguntas difíciles, por J. Carl Laney, WIPF & Stock, Eugene, Oregon, 1997, página 245.

96. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 52.

97. El mensaje de Hechos, por John Stott, Inter-Varsity Press, Downers Grove, Illinois, 1990, página 108.

98. Hechos, por John Polhill, The New American Commentary, Volumen 26, Broadman Press, Nashville, Tennessee, 1992, página 154.

99. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, MI, 1998, páginas 211-213.

100. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 75.

101. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 53.

102. Ibid, página 54.

103. Ibid, página 55.

104. Manners and Customs of the Bible, por James Freeman, Logos International, Plainfield, Nueva Jersey, 1972, página 441.

105. Hechos, por John Polhill, The New American Commentary, Volumen 26, Broadman Press, Nashville, Tennessee, 1992, página 158.

106. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 56.

107. Hechos, por John Polhill, The New American Commentary, Volumen 26, Broadman Press, Nashville, Tennessee, 1992, página 159.

108. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, página 266.

109. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 57.

110. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 153.

111. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 55.

112. act105.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

113. Acts, por I. Howard Marshall, TNTC, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1996, páginas 110-111.

114. Serie de cintas La vida de Cristo, de Arnold Fruchtenbaum.

115. act105.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

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117. Hechos, por John Polhill, The New American Commentary, Volumen 26, Broadman Press, Nashville, Tennessee, 1992, página 166.

118. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 236.

119. Hechos, por John Polhill, The New American Commentary, Volumen 26, Broadman Press, Nashville, Tennessee, 1992, página 167.

120. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 169.

121. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 91.

122. Acts, de I. Howard Marshall, TNTC, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1996, página 120.

123. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, MI, 1998, pág. 234.

124. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 95.

125. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, página 297.

126. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 65.

127. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 20.

128. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 67.

129. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, página 303.

130. The Acts of the Apostles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1998, páginas 240 y 242.

131. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, páginas 311 y 313.

132. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, páginas 179-180.

133. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, páginas 316 y 319-320.

134. El mensaje de Hechos, por John Stott, Inter-Varsity Press, Downers Grove, IL, 1990, página 122.

135. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 71.

136. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 240.

137. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, páginas 187-188.

138. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 201.

139. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 34.

140. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, páginas 195-196.

141. act106.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

142. Los Hechos de los Apóstoles, por Frank Gaebelein, The Expositor’s Bible Commentary, volumen 9, Grand Rapids, Michigan, 1982, página 337.

143. act107.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

144. Acts, de I. Howard Marshall, TNTC, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1996, página 135.

145. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, MI, 1998, página 123.

146. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 205.

147. Ibid, páginas 203-207.

148. Ibid, páginas 209-211.

149. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, MI, 1998, pág. 123.

150. Ibid, página 273.

151. Ibid, página 123.

152. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 245.

153. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 216.

154. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 247.

155. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 105.

156. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 39.

157. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 233.

158. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 247.

159. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 33.

160. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 224.

161. Acts, de I. Howard Marshall, TNTC, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1996, página 150.

162. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 225.

163. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, páginas 35 y 39.

164. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, páginas 35 y 39.

165. Acts, por I. Howard Marshall, TNTC, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1996, página 152.

166. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 231.

167. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 36.

Testimonio en Judea y Samaria 8:5 a 11:18

168. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, páginas 227-229.

169. Acts, por I. Howard Marshall, TNTC, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1996, página 152.

170. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, páginas 234-235.

171. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 250.

172. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, páginas 238-243.

173. Caos carismático, por John MacArthur, Zondervan, Grand Rapids, Michigan, 1992, página 226.

174. act108.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

175. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, páginas 244-246.

176. Hechos, por Darrell Bock, Baker Exegetical Commentary on the New Testament, Baker Academic, Grand Rapids, Michigan, 2007, página 336.

177. Acts, de I. Howard Marshall, TNTC, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1996, página 161.

178. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, página 414.

179. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, Mi, 1998, página 295.

180. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 124.

181. Usos y costumbres de la Biblia, James Freeman, página 441.

182. El Mesías en el templo, de Roger Liebi, Christlicher Medien-Vertrieb, Dusseldorf, Alemania, 2012, página 169.

183. act108.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

184. Hechos, por John Polhill, The New American Commentary, Volumen 26, Broadman Press, Nashville, Tennessee, 1992, página 224.

185. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 124.

186. Acts, de I. Howard Marshall, TNTC, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1996, página 164.

187. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 260.

188. act108.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

189. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 127.

190. ¿Cuál es el camino judío hacia Dios? por Sam Nadler, Ministerios Palabra del Mesías, Charlotte, Carolina del Norte, 2018.

191. 101 Himnos, por Kenneth W. Osbeck, Kregel Publishers, Grand Rapids, Michigan 1982, página 28.

192. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 264.

193. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 253.

194. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, páginas 269 y 271.

195. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 255.

196. Caos carismático, por John MacArthur, Zondervan, Grand Rapids, Michigan, 1992, página 187.

197. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 275.

198. Ibid, páginas 275-277.

199. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 44.

200. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 280.

201. act09.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

202. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 147.

203. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 112.

204. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1998, páginas 334-339.

205. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, páginas 148-149.

206. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1998, página 346.

207. Hechos, por John Polhill, The New American Commentary, Volumen 26, Broadman Press, Nashville, Tennessee, 1992, página 251.

208. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1998, página 347.

209. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, páginas 548 y 552-553.

210. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 257.

211. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 294.

212. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 150.

213. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, página 533.

214. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 116.

215. Hechos, por John Polhill, The New American Commentary, Volumen 26, Broadman Press, Nashville, Tennessee, 1992, página 253.

216. Ibid, página 253.

217. El mensaje de Hechos, por John Stott, Inter-Varsity Press, Downers Grove, Illinois, 1990, página 185.

218. Acts, por I. Howard Marshall, TNTC, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1996, páginas 180-181.

219. El mensaje de los Hechos, por John Stott, Inter-Varsity Press, Downers Grove, Illinois, 1990, página 186.

220. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, página 558.

221. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 117.

222. Primicias de Sión, Torah Club, Shemini, Volumen 5, página 675.

223. El mensaje de Hechos, por John Stott, Inter-Varsity Press, Downers Grove, Illinois, 1990, páginas 187-188.

224. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 120.

225. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 64.

226. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, páginas 120-121.

227. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 258.

228. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 298.

229. Ibid, página 299.

230. The Genesis Record, de Henry Morris, Baker Book House, Grand Rapids, MI, 1976, páginas 294-295.

231. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 301.

232. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 260.

233. Caos carismático, por John MacArthur, Zondervan, Grand Rapids, Michigan, 1992, página 226.

234. Ibid, página 183.

235. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 305.

236. Acts, de I. Howard Marshall, TNTC, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1996, página 195.

237. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 261.

238. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, página 311.

239. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1998, página 365.

240. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 161.

241. Caos carismático, por John MacArthur, Zondervan, Grand Rapids, Michigan, 1992, página 184.

242. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, páginas 311-312.

243. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 261.

244. Testigo del Fin de la Tierra 11:19 al 28:31

245. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, páginas 10-13.

246. act11.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

247. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, página 615.

248. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1998, página 367.

249. Acts, de I. Howard Marshall, TNTC, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1996, página 198.

250. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, páginas 261-262.

251. Hechos, por Darrell Bock, Baker Exegetical Commentary on the New Testament, Baker Academic, Grand Rapids, Michigan, 2007, página 419.

252. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 164.

253. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1998, página 370.

254. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 72.

255. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, páginas 263.

256. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, páginas 628, 630 632-633.

257. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 74.

258. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 135.

259. La Historia de la Iglesia: Eusebio, por Paul Maier, Amazon, 2.9.2-3.

260. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 175.

261. act12.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

262. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 175.

263. Manners and Customs of the Bible, por James Freeman, Logos International, Plainfield, Nueva Jersey, 1972, página 442.

264. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 178.

265. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1998, página 387.

266. Hechos 1-12, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1994, páginas 325-326.

267. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 178.

268. Ibid, página 181.

269. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, páginas 265-266.

270. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 1-12, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1987, página 181.

271. El mensaje de Hechos, por John Stott, Inter-Varsity Press, Downers Grove, Illinois, 1990, página 213.

272. The Gospel Coalition, edición estadounidense, 3 de mayo de 2017, por Greg Lanier.

273. Hechos 13-28, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1996, página 3.

274. Ibid, página 4.

275. Ibid, página 5.

276. act13.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

277. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 267.

278. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 146.

279. Hechos, por John Polhill, The New American Commentary, Volumen 26, Broadman Press, Nashville, Tennessee, 1992, página 293.

280. Hechos 13-28, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1996, página 9.

281. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 13-28, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1988, página 15.

282. El Libro de los Hechos, La guía inteligente de la Biblia, por Robert Girard, Thomas Nelson, Nashville, Tennessee, 2007, página 164.

283. Acts, de I. Howard Marshall, TNTC, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1996, página 219.

284. Hechos, por Darrell Bock, Baker Exegetical Commentary on the New Testament, Baker Academic, Grand Rapids, Michigan, 2007, página 447.

285. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1998, página 403.

286. Hechos, por Darrell Bock, Baker Exegetical Commentary on the New Testament, Baker Academic, Grand Rapids, Michigan, 2007, páginas 450-451.

287. Respuestas a preguntas difíciles, por J. Carl Laney, WIPF & Stock, Eugene, Oregon, 1997, página 247.

288. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, páginas 686 y 692-693.

289. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 268.

290. Una vida con propósito, por Rick Warren, Zondervan, Grand Rapids, Michigan, 2002, página 190.

291. El regreso del cerdo kosher, por el rabino Itzhak Shapira, Lederer Books, una división de Messianic Jewish Publishers, Clarksville, Maryland, 2013, páginas 149-150.

292. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 150.

293. acto 13.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

294. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1998, página 123.

295. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 270.

296. acto 13.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

297. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1998, página 123.

298. Las raíces judías de Hechos 16-28, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, página 746.

299. Hechos, por John Polhill, The New American Commentary, Volumen 26, Broadman Press, Nashville, Tennessee, 1992, página 307.

300. acto 13.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

301. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1998, página 123.

302. Bocetos de la vida social judía en los días de Cristo, por Alfred Edersheim, Eerdmans Publishing Company, Grand Rapids, Michigan, 1984, página 15.

303. Hechos 13-28, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1996, página 40.

304. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 92.

305. Ibid, página 95.

306. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, página 764.

307. Hechos 13-28, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1996, página 46.

308. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 95.

309. Hechos 13-28, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1996, página 46.

310. Las raíces judías de Hechos 1-15, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, página 772.

311. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 101.

312. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 13-28, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1988, página 20.

313. Acts, por I. Howard Marshall, TNTC, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1996, páginas 234-235.

314. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 13-28, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1988, página 20.

315. Hechos, por John Polhill, The New American Commentary, Volumen 26, Broadman Press, Nashville, Tennessee, 1992, página 313.

316. El mensaje de Hechos, por John Stott, Inter-Varsity Press, Downers Grove, Illinois, 1990, páginas 230-231.

317. The Acts of the Apostles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1998, páginas 421 y 424.

318. El mensaje de Hechos, por John Stott, Inter-Varsity Press, Downers Grove, Illinois, 1990, páginas 231.

319. Manners and Customs of the Bible, por James Freeman, Logos International, Plainfield, Nueva Jersey, 1972, página 444.

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392. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 13-28, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1988, página 49.

393. Manners and Customs of the Bible, por James Freeman, Logos International, Plainfield, Nueva Jersey, 1972, página 446.

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468. El Libro de los Hechos, La guía inteligente de la Biblia, por Robert Girard, Thomas Nelson, Nashville, Tennessee, 2007, página 244.

469. Comentario versículo por versículo sobre Hechos, por David Guzik, Enduring Word Commentary Series, Simi Valley, California, 2000, página 217.

470. El Libro de los Hechos, La guía inteligente de la Biblia, por Robert Girard, Thomas Nelson, Nashville, Tennessee, 2007, página 244.

471. act18.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

472. Hechos 13-28, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1996, página 188.

473. Hechos 13-28, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1996, páginas 189-190.

474. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 13-28, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1988, página 91.

475. Ibid, páginas 95-96.

476. El mensaje de Hechos, por John Stott, Inter-Varsity Press, Downers Grove, Illinois, 1990, página 317.

477. Be Dynamic, Comentario del Nuevo Testamento sobre Hechos 13-28, por Warren Wiersbe, David Cook, Colorado Springs, Colorado, 1988, página 97.

478. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 293.

479. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 228.

480. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 298.

481. Hechos, por John Polhill, The New American Commentary, Volumen 26, Broadman Press, Nashville, Tennessee, 1992, página 425.

482. Una vida con propósito, por Rick Warren, Zondervan, Grand Rapids, Michigan, 2002, página 285.

483. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 231.

484. Hechos, por John Polhill, The New American Commentary, Volumen 26, Broadman Press, Nashville, Tennessee, 1992, página 428.

485. Hechos 13-28, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1996, páginas 230-231.

486. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 231.

487. Ibid, página 245.

488. act21.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

489. Hechos 13-28, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1996, página 239.

490. Ibid, páginas 239-240.

491. El mensaje de Hechos, por John Stott, Inter-Varsity Press, Downers Grove, Illinois, 1990, página 333.

492. Ibid, página 315.

493. Hechos, por John Polhill, The New American Commentary, Volumen 26, Broadman Press, Nashville, Tennessee, 1992, página 437.

494. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 252.

495. Hechos, por John Polhill, The New American Commentary, Volumen 26, Broadman Press, Nashville, Tennessee, 1992, páginas 439-440.

496. Ibid, página 445.

497. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1998, página 643.

498. Hechos, por John Polhill, The New American Commentary, Volumen 26, Broadman Press, Nashville, Tennessee, 1992, página 447.

499. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, páginas 302-303.

500. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 256.

501. El Mesías en el templo, de Roger Liebi, Christlicher Medien-Vertrieb, Dusseldorf, Alemania, 2012, página 377.

502. Josefo, Guerras 2.15.1

503. Hechos 13-28, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1996, página 252.

504. El Mesías en el templo, de Roger Liebi, Christlicher Medien-Vertrieb, Dusseldorf, Alemania, 2012, página 380.

505. Ibid, página 377.

506. Ibid, páginas 168-170.

507. Hechos, por Darrell Bock, Baker Exegetical Commentary on the New Testament, Baker Academic, Grand Rapids, Michigan, 2007, páginas 648-649.

508. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 258.

509. Hechos 13-28, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1996, página 257.

510. act21.mp3, Arnold Fruchtenbaum.

511. Las raíces judías de Hechos 16-28, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, página 1199.

512. Los Hechos de los Apóstoles, por Ben Witherington III, Eerdmans, Grand Rapids, Michigan, 1998, página 657.

513. Hechos 13-28, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1996, páginas 260-261.

514. Hechos, por Darrell Bock, Baker Exegetical Commentary on the New Testament, Baker Academic, Grand Rapids, Michigan, 2007, página 653.

515. El mensaje de Hechos, por John Stott, Inter-Varsity Press, Downers Grove, Illinois, 1990, páginas 336-337.

516. Paul, por Beth Moore, B&H Publishing Company, Nashville, Tennessee, 2010, página 261.

517. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 305.

518. Las raíces judías de Hechos 16-28, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, páginas 1209-1210.

519. Manners and Customs of the Bible, por James Freeman, Logos International, Plainfield, Nueva Jersey, 1972, página 453.

520. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 306.

521. Respuestas a preguntas difíciles, por J. Carl Laney, WIPF & Stock, Eugene, Oregon, 1997, página 250.

522. Las raíces judías de Hechos 16-28, por Joseph Shulam, Ministerio de Instrucción Bíblica Netivyah, Jerusalén, Israel, 2012, página 1214.

523. Hechos 13-28, por John MacArthur, Moody Publishers, Chicago, Illinois, 1996, páginas 269-270.

524. The Jewish New Testament Commentary, por David Stern, Jewish New Testament Publications, Clarksville, Maryland, 1992, página 307.

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Dj – Bibliografía

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2024-09-03T11:40:57+00:000 Comments

Az – Las Buenas Nuevas llegan a Samaria 8: 5-8

La Buenas Nuevas llegan a Samaria
8: 5-8

34 dC
Los acontecimientos de Hechos 3-8 transcurren con creciente preocupación por parte de los judíos, y especialmente de las autoridades judías en Jerusalén. La creciente tensión dio lugar a una acción de vigilancia contra Esteban, y luego a un esfuerzo autorizado bajo el mando del rabino Saulo para perturbar y destruir ese nuevo movimiento mesiánico, lo que implicó persecución e incluso la muerte de los creyentes. La persecución llevó a varios creyentes como Felipe a ir a Samaria y dar testimonio de Yeshua.

La buena nueva llega a Samaria ESCUDRIÑAR: ¿Por qué era importante que los judíos helenistas fueran expulsados de Jerusalén? ¿Cómo usó Dios a Felipe? ¿Por qué supone usted que Él obró de esta manera en este caso? ¿Quiénes eran los samaritanos y por qué los judíos los despreciaban tanto?

REFLEXIONAR: ¿En qué sentido el evangelio es como sembrar una semilla? ¿Cómo se sembró el evangelio en su vida antes de convertirse en creyente? ¿Cuánto desea ver a los incrédulos de otras culturas venir al Señor? ¿Se acerca intencionalmente para compartir su testimonio? ¿O está contento con permanecer dentro de su “santo grupo”?

La dispersión de los judíos helenísticos condujo al paso adelante más significativo en la misión de las congregaciones de Dios. Se podría decir que fue necesaria la persecución para que cumplieran el mandato implícito de 1:8. A medida que los judíos helenísticos se trasladaron a nuevas áreas, encontraron una respuesta inmediata al evangelio, y esto quedó ejemplificado en la forma en que respondió el pueblo samaritano.169

Felipe no era uno de los apóstoles, sino un judío de habla griega porque los apóstoles permanecieron en Jerusalén. Él fue uno de los siete elegidos para atender las necesidades de las viudas judías helenísticas (6:5). Al igual que Esteban, su fidelidad a esa tarea llevó a ADONAI a utilizarlo en un ministerio más amplio. Más adelante en el libro de los Hechos, a Felipe se le llama evangelista (21:8).

Como resultado de la persecución de los judíos helenísticos en Jerusalén: Felipe, bajando a una ciudad de Samaria, les predicaba al Mesías (8:5). Esta no era la Samaria del TaNaJ. En el año 30 aC, después de que los asirios destruyeran la antigua capital del reino del norte, el emperador romano Augusto se la otorgó a Herodes el Grande, quien la rebautizó como Sebaste (la forma femenina de la palabra griega Sebastos o Augusto). Esta era simplemente una ciudad en Samaria. En los tiempos del Nuevo Pacto el término Samaria ya no era aplicable a una ciudad, sino a una región, como Galilea o Judea.

¿Quiénes eran los samaritanos? Seiscientos años antes de esto, los asirios conquistaron esta zona del norte de Israel, y ellos los deportaron de la zona. El rey de Asiria subió contra toda aquella tierra, y subió a Samaria y la asedió durante tres años; y en el año noveno de Oseas, el rey de Asiria conquistó Samaria y llevó a Israel en cautiverio a Asiria, e hizo que habitaran en Halah y en Habor, junto al río Gozán, y en las ciudades de los medos (Segunda Reyes 17:5-6). Los “israelitas llevados” a Asiria eran ricos y de clase media. Allí ellos vivían en una población pagana con su vasto imperio. Y el rey de Asiria trajo gente de Babilonia, de Cuta, de Ava, de Hamat y de Sefarvaim, y los hizo habitar en las ciudades de Samaria, en lugar de los hijos de Israel. Así ocuparon Samaria, y habitaron en sus ciudades (Segunda Reyes 17:24). Esos paganos se casaron con las clases más bajas de los judíos restantes en el norte de Israel, y de ese pueblo surgieron los samaritanos. Debido a que los israelitas se casaron con los asirios, de modo que, al tiempo que reverenciaban a YHVH, servían a sus propios dioses, conforme a la costumbre de las naciones de donde habían sido llevados cautivos (Segunda Reyes 17:33). Los judíos odiaban a los samaritanos y los consideraban mestizos peligrosos que corrompían la verdadera adoración a YHVH.

Felipe, quien proclamó el Mesías a los samaritanos a pesar de que los samaritanos sólo aceptaban los cinco libros de Moisés como sus Sagradas Escrituras, cumplió con el mandato expreso de ADONAI en 1:8, inicialmente con esta tarea para ellos (vea el comentario sobre Esdras-Nehemías, As – Oposición a la reconstrucción del templo). Y al oír y ver las señales milagrosas que hacía, las gentes unánimemente prestaban profunda atención a las cosas dichas por Felipe (8:6). Debido a que los samaritanos no aceptaron a los profetas del TaNaJ judío, creyeron que el próximo profeta que entraría en escena sería el Mesías. Así que no fue una sorpresa que, de común acuerdo, las multitudes continuaron prestando mucha atención a lo que Felipe estaba diciendo, ya que la expectativa de un futuro libertador conocido como el ta’be, o restaurador, que restauraría la “adoración verdadera” en el monte Gerizim, era una parte importante de la teología samaritana (Deuteronomio 18:15 y siguientes). Dado ese fundamento de creencia, Felipe podría simplemente proclamar a Yeshua como el Mesías tan esperado.

A pesar de las relaciones hostiles entre judíos y samaritanos en ese momento, Felipe encontró una audiencia receptiva en Samaria. El Ruaj HaKodesh preparó sus corazones para responder al mensaje de Felipe (8:6). Porque los apóstoles habían impuesto las manos en él (6:6), Felipe tenía la misma capacidad que ellos para realizar señales y milagros que actuaron como confirmación de su mensaje. Las únicas personas que realizaron señales y milagros en Hechos fueron los apóstoles, o aquellos designados por los apóstoles. En ningún lugar de Hechos se dio esta capacidad a los creyentes en general. Y en este contexto esto fue especialmente esencial debido a la actividad de Satanás (vea Ba Simón el mago). Simón engañó a la gente con su capacidad de realizar milagros falsos. Por eso fue necesario que Felipe hiciera milagros: Porque de muchos que tenían espíritus inmundos, salían clamando a gran voz; y muchos paralíticos y cojos eran sanados (8:7), para contrarrestar los “milagros” de Simón. El Adversario reunió todas sus fuerzas en un esfuerzo inútil por oponerse a Dios; sin embargo, todavía él estaba sanando a los endemoniados a través de aquellos designados para hacerlo por los apóstoles. Entonces había grande gozo en aquella ciudad (8:8).

Todavía hoy en día hay muchas personas endemoniadas. Pero a pesar de las afirmaciones de los curanderos actuales, los creyentes no tienen ninguna autoridad o capacidad para ordenar o expulsar directamente a los demonios. La señal temporal del don de los milagros era el poder (griego: dunamis) de expulsar demonios. Como otros dones de señales, ese don ya no existe. A medida que los apóstoles fallecieron, también desapareció la necesidad de dones de señales. Sin embargo, al igual que con la curación física, podemos orar para que interceda Dios, quien siempre escucha y tiene todo el poder.

En ninguna parte de las Escrituras se les dice a los creyentes que “aten a Satanás” o ejerzan autoridad sobre los demonios. De hecho, si alguien piensa que está atando a Satanás, está haciendo un trabajo bastante pésimo, porque él todavía está muy activo en mi vecindario. El diablo no será atado hasta que un santo ángel lo haga al comienzo del Reino Mesiánico (vea el comentario sobre Apocalipsis FbPrendió al Dragón, o Satanás, y lo ató por mil años). Y aquellos que intentan afirmar su autoridad sobre los demonios corren el riesgo de terminar como los exorcistas judíos, los hijos de Esceva, de Hechos 19:13-16. Es peligroso reclamar para nosotros mismos autoridad que ADONAI no nos ha otorgado. La instrucción bíblica para llevar a cabo la guerra espiritual se establece en Efesios 6:10-18.

Los poderosos milagros y la predicación de Felipe dieron como resultado, como sucedió en Jerusalén, la salvación de muchos samaritanos. Pero como ocurre inevitablemente con la verdadera predicación bíblica, produjo dos respuestas muy diferentes. Muchos aceptaron el evangelio y creyeron, de modo que hubo gran gozo en aquella ciudad. Ellos eran los verdaderos creyentes, el trigo. Su gozo no vino de los demonios, sino de la liberación completa del pecado a través del Señor Yeshua el Mesías. Otros, sin embargo, eran falsos creyentes, la cizaña (vea el comentario sobre La Vida de Cristo Ev La parábola del trigo y la cizaña).170 Después de haber presentado al protagonista de la historia, Lucas ahora recurre al antagonista: cierto hombre llamado Simón.

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2024-11-05T13:31:04+00:000 Comments

Ay – Testigos en Judea y Samaria 8:5 a 11:18

Testigos en Judea y Samaria
8:5 a 11:18

34-42 dC

El domingo 8 de enero de 1956, a orillas de un río solitario en lo profundo de la selva ecuatoriana, cinco misioneros fueron asesinados por indios nativos Auca. La noticia de la masacre conmocionó al mundo. Para algunos, sus muertes parecieron una tragedia sin sentido. Muchos denunciaron las prometedoras carreras misioneras truncadas, las cinco esposas llorando por sus maridos y los niños que quedaron huérfanos. A primera vista, al igual que la muerte de Esteban, parecía tan inútil.

Más que inútil, el ministerio de Esteban parecía haber terminado en un fracaso. No sólo fue asesinado como hereje, sino que su muerte también desencadenó la primera persecución contra toda la iglesia/comunidad mesiánica. Esa persecución, encabezada por Saulo de Tarso, dispersó a un gran número de creyentes helenísticos y probablemente, también a muchos creyentes judíos. Pero en el análisis final, la persecución que parecía tan negativa, fue en realidad un factor positivo. Condujo al primer gran esfuerzo misionero realizado por los primeros creyentes. El intento del Adversario de apagar el fuego de la primitiva comunidad mesiánica, simplemente dispersó a los miembros y provocó nuevos incendios en todo el mundo. En palabras del padre de la Iglesia primitiva de Tertuliano: “La sangre de los mártires se convirtió en la semilla de la Iglesia”.

El primer esfuerzo misionero de las comunidades mesiánicas, que comienza en estos capítulos, fue presagiado por el Capítulo 5, cuando la gente de las ciudades cercanas a Jerusalén llevaba sus enfermos para que los apóstoles los sanaran (5:16). El acercamiento de Esteban a los judíos helenistas, aquellos de tierras extranjeras, fue un paso en la dirección correcta. Estos capítulos marcan otro punto de inflexión. Jerusalén, que ha dominado la historia hasta este punto, comienza a pasar a un segundo plano, ilustrando la verdad de que una oportunidad ignorada es una oportunidad perdida.168

Yeshua el Mesías le había dado a Pedro las llaves del reino y sería responsable de traer los tres grupos étnicos conocidos de su época al reino de Dios (vea el comentario sobre La Vida de Cristo Fx – Sobre esta roca edificaré mi iglesia). Ya hemos visto como él abrió la puerta a la salvación para los judíos en la festividad de Shavuot (vea An Pedro habla a la multitud en Pentecostés). Luego, en el Capítulo Ocho , Pedro abrirá la puerta a la salvación para los samaritanos (vea Ba Simón el Hechicero), y finalmente en el Capítulo Diez, Pedro abrirá la puerta a la salvación a los gentiles (vea Bg Pedro va a la casa de Cornelio). La Comunidad/Iglesia Mesiánica seguirá creciendo, pero los días explosivos de los milagros de los apóstoles pasarán a un segundo plano. Pablo escribió que el evangelio llegó primero a los judíos y luego a los gentiles (Romanos 1:16). Es casi seguro que el asesinato de Esteban fijó un punto en el rechazo final del evangelio por parte del Sanedrín, y comenzó el diseño de ADONAI para que la Buena Nueva se extendiera a un nuevo territorio.

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2024-11-05T13:22:15+00:000 Comments

Ax – La lapidación de Esteban 7:54 a 8:4

La lapidación de Esteban
7:54 a 8:4

31-33 dC
Los acontecimientos de Hechos 3-8 transcurren con creciente preocupación por parte de los judíos, y especialmente de las autoridades judías en Jerusalén. La creciente tensión dio lugar a una acción de vigilancia contra Esteban, y luego a un esfuerzo autorizado bajo el mando del rabino Saulo, para perturbar y destruir ese nuevo movimiento mesiánico (la iglesia), lo que implicó la persecución e incluso la muerte de los creyentes. La persecución llevó a varios creyentes como Felipe a ir a Samaria y dar testimonio de Yeshua.

La lapidación de Esteban ESCUDRIÑAR: ¿Por qué los oyentes de Esteban están tan enfurecidos? La muerte de Esteban fue ilegal (Juan 18:31), ¿qué revela eso sobre la desesperación del Gran Sanedrín? ¿Cómo es la muerte de Esteban y la persecución de Saulo un ejemplo de la forma en que ADONAI usa el mal para cumplir Su plan (1:8)? Esto comienza una nueva fase en el plan de Dios (1:8). ¿Cómo resumiría la “fase de Jerusalén” en los capítulos 2 al 7?

REFLEXIONAR: ¿Qué es lo peor que le ha pasado a usted? ¿Puede ver ahora cómo Dios lo usó para bien? ¿O está enojado con Él? ¿Cómo le está funcionando eso? Es mejor entender quién es el enemigo y el Señor no lo es. Es el Adversario, el ladrón que viene sólo a hurtar, matar y destruir (Juan 10:10a). El discurso de Pedro condujo a una conversión masiva (2:14-41), mientras que el de Esteban condujo a su muerte. ¿Qué nos enseña eso sobre el éxito en su servicio al Rey Kosher? ¿Qué oportunidades le han dado últimamente para profesar la bondad y fidelidad de Dios? ¿Cómo ha manejado estas situaciones? ¿Cómo puede estar mejor preparado la próxima vez para declarar su testimonio de Él con una seguridad más natural?

El Sanedrín escuchó la primera parte del discurso de Esteban con interés y acuerdo. Después de todo, simplemente él estaba recitando la historia de la nación, un tema cercano y querido por sus corazones. Pero a medida que su significado se hizo cada vez más claro, ellos comenzaron a sentirse cada vez más incómodos. Cuando le oyeron decir: ¡Duros de cerviz, e incircuncisos de corazones y de oídos! Vosotros resistís siempre al Espíritu Santo; como vuestros padres, también vosotros (7:51). Al oír estas cosas, se enfurecieron en sus corazones y crujían los dientes contra él (7:54). La frase se enfurecieron en sus corazones literalmente dice cortados por la mitad. Esto presagia la obstinada generación de pecadores que vendrá. Cuando el cuarto ángel derrame su copa de ira y juicio durante la Gran Tribulación, los pecadores que se nieguen a arrepentirse se morderán sus lenguas de dolor y blasfemarán contra el Dios del cielo por causa de sus dolores, y por sus plagas, y no se arrepentirán de sus obras (Apocalipsis 16:10-11). Obviamente, el discurso de Esteban fue diseñado para producir una reacción, como lo fue el discurso de Pedro: Al oírlo entonces, se compungieron de corazón, y dijeron a Pedro y a los otros apóstoles: Varones hermanos, ¿qué haremos? (2:37). Pero allí el mensaje produjo arrepentimiento y fe, aquí sólo produjo rabia y furia.154 Esta era al menos la tercera vez que habían escuchado el evangelio presentado (4:8ss y 5:27ss), sin embargo, su ira solo aumentó y, como Faraón, solo continuaron endureciendo sus corazones. Las personas que rechazan la gracia y el amor de Dios no sentirán remordimientos bajo su juicio. De hecho, sólo los enojará más.

En contraste, el énfasis en la vida de Esteban se caracterizó por la plenitud. Él estaba lleno del Espíritu Santo y sabiduría (6:3 y 10), lleno de fe (6:5) y lleno de gracia y poder (6:8). En las Escrituras, estar lleno de significa ser controlado por. Esteban era controlado por Dios, el hombre se entregó al Espíritu Santo, un hombre que buscaba llevar al pueblo al Mesías.155

Pero él, lleno del Espíritu Santo, fijos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús en pie a la diestra de Dios (7:55). En el ojo de la tormenta que estaba a punto de desatarse, él permaneció tranquilo, totalmente entregado al control del Espíritu Santo. El Espíritu produce el fruto de una vida piadosa en la vida diaria del creyente. Pero, como lo hizo con Esteban, también proporciona una gracia y fortaleza especiales en tiempos de crisis (Lucas 12:11-12; Primera de Pedro 4:14). Los creyentes, entonces, no deben rehuir las situaciones difíciles. Como Pablo, pueden decir: Por lo cual me complazco en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias por causa del Mesías; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte (Segunda Corintios 12:10). Debemos reconocer con valentía a Yeshua en todas las situaciones y circunstancias, sabiendo que el Ruaj HaKodesh nos concederá la gracia de afrontar las consecuencias con paz y alegría.

En medio de sus circunstancias, Esteban fijos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús en pie a la diestra de Dios (7:55b). La gloria de Dios es la manifestación visible de la presencia de Dios, vea (Salmo 110:1). En otra parte del Brit Hadashah, se describe a Yeshua sentado a la diestra de Dios (Mateo 22:44, 24:64; Lucas 22:69; Hechos 2:34; Efesios 1:20; Colosenses 3:1; Hebreos 1:3, 8:1, 10:11-12 y 12:2). Él está sentado en términos de Su obra redentora, la cual está consumada para siempre (Hebreos 10:12). Esteban, sin embargo, ve a Jesús de pie para mostrar Su preocupación por él. También se levanta para darle la bienvenida a Esteban al cielo. Él fue uno de los pocos bendecidos en las Escrituras con un resplandor del cielo, junto con Isaías (Isaías 6:1-3), Ezequiel (Ezequiel 1:26-28), Pablo (Segunda Corintios 12:2-4), y Juan (Apocalipsis 4:1ss).

Mientras el Mesías observaba, no pasó por alto ni un solo movimiento de cabeza de Saulo. El Hijo del Hombre estaba en pie en ese momento. Uno sólo puede imaginar Sus emociones encontradas al mirar a los dos actores clave del Reino ese día. Uno para Él; uno contra Él. Uno cubierto de sangre; el otro cubierto con un chal de oración. Uno que no pudo salvarse de los hombres; el otro que no pudo salvarse del pecado. Uno muerto en el cuerpo, pero vivo en espíritu; el otro vivo en el cuerpo, pero muerto en el espíritu. Uno amado por Dios; y el otro amaba a Dios.156

Y dijo Esteban: ¡He aquí, veo los cielos abiertos y al Hijo del Hombre en pie a la diestra de Dios! (7:56)! Para el Sanedrín, tal declaración fue el colmo, su tolerancia hacia el blasfemo estaba agotada. El uso que hizo Esteban de la frase Hijo del Hombre, y se usa aquí por última vez en el Brit Hadashah, puede haber sido la daga más afilada porque los llevó de regreso al juicio de otro prisionero. Al igual que Esteban, los testigos falsos acusaron a Yeshua de blasfemia: Pero Jesús callaba. Entonces el sumo sacerdote le dijo: ¡Te conjuro por el Dios viviente que nos digas si tú eres el Mesías, el Hijo de Dios! Jesús le dice: Tú lo has dicho. Y además, os digo: Desde ahora veréis al Hijo del Hombre sentado a la diestra del Poder, y viniendo en las nubes del cielo (Mateo 26:63-64). Entonces, por esa supuesta blasfemia de afirmar ser el Hijo de Dios y el Hijo del Hombre que se sentaría a la diestra de Dios, los mismos miembros del Sanedrín habían crucificado al Mesías. La visión de Esteban y las palabras que describieron a quién vio, les arrojaron a la cara la afirmación que Yeshua hizo. Yeshua afirmó que Él estaría a la diestra del Padre; ¡Esteban estaba afirmando que Él estaba allí! Por lo tanto, el Sanedrín se encontraba una vez más en medio de un dilema. Ellos también tendrían que matar a Esteban, o admitir que estaban equivocados y que Yeshua no estaba realmente poseído por un demonio (vea el comentario sobre La vida de Cristo, vea Ek – Es sólo por Belcebú, el Príncipe de los Demonios, este hombre expulsa a los demonios). El Sanedrín decide silenciar la verdad matando a Esteban.157

Pero ellos, gritando a gran voz, se taparon los oídos y arremetieron a una contra él (7:57). Este no es el comportamiento del Tribunal Supremo judío. No está claro si entre los que se lanzaron contra Esteban se encontraban algunos de sus acusadores de habla griega, junto con los miembros más enojados del Sanedrín (que ni siquiera había emitido un veredicto). En cualquier persecución, los juristas experimentados deberían haber sentido la ira y haber tomado medidas para proteger a Esteban en lugar de unirse a los enardecidos. O bien el Sanedrín había decidido sacar a Esteban del camino sin un juicio honesto, o los jueces permitieron que la emoción prevaleciera sobre la razón después de su discurso incendiario.

…y sacándolo fuera de la ciudad, lo apedrearon, y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven llamado Saulo (7:58). Deuteronomio 17:2-7 establece que la lapidación debía tener lugar fuera de las puertas de la ciudad, y los testigos del acto criminal debían ser los primeros en apedrear al criminal convicto. Levítico 24:24 muestra el mismo punto: Haz salir al maldiciente fuera del campamento, y cuantos lo han oído impongan sus manos sobre la cabeza de este y lapídelo toda la asamblea.158

La Ley Oral (vea el comentario sobre La Vida de Cristo Ei La Ley Oral) trata del castigo de la lapidación: El lugar de la lapidación era como la altura de dos hombres. Uno de los testigos lo empujaba por las caderas. Si volteaba boca abajo, el testigo debía ponerlo boca arriba. Si moría por el golpe y la caída, era suficiente. Pero si no, el segundo testigo tomaba una piedra y se la dejaba caer en el pecho. Si moría por esto, era suficiente. Pero si no, su apedreamiento tenía que ser realizado por todo Israel, como está dicho: la mano de los testigos será primero sobre él para matarlo y después la mano de todo el pueblo (Deuteronomio 17:17) (Sanedrín 6:4).

…y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven llamado Saulo (7:58b), para poder arrojar sus piedras con mayor eficacia. Compárese con lo que dice el Talmud sobre la ejecución de la sentencia de lapidación: Cuando termine el juicio, sáquenlo [al condenado] para que lo apedreen. El lugar de la lapidación estaba lejos del atrio, como está dicho: Sacad al maldito (Levítico 24:14). Un hombre se encuentra a la entrada del patio; en su mano está la bandera de señales (hebreo: sudarin). Un jinete estaba apostado lejos, pero a la vista de él. Si uno [de los jueces] dice: “Tengo algo [más] que decir a su favor”, el señalizador agita el sudarin y el jinete corre y detiene la lapidación. Incluso si el propio condenado dice: “Tengo algo que decir a mi favor”, deben traerlo de vuelta, incluso cuatro o cinco veces, sólo si hay algo de sustento en lo que dice (Sanedrín 42b). Aunque existían estos procedimientos formales para la lapidación establecidos por la Ley Oral, parece poco probable que se siguieran, al igual que el Sanedrín no cumplió con sus propias reglas en la ejecución de Yeshua (vea La vida de Cristo Lh – Las Leyes del Gran Sanedrín sobre los Juicios).

Saulo estaba disgustado por la forma en que los fariseos habían manejado mal el problema. Si él hubiera querido que se hiciera bien, probablemente tendría que haberlo hecho él mismo. Entonces Saulo empacó sus cosas y se dirigió a Jerusalén, deseando la oportunidad de ser el héroe. Él llegó a la Ciudad Santa justo a tiempo para escuchar un exasperante discurso de Esteban.159

…y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven llamado Saulo (7:58c). Una vez más vemos la habilidad literaria de Lucas al introducir ingeniosamente a Saulo en la historia, lo que ya había hecho con Bernabé (4:36), Esteban y Felipe (6:5).

A pesar de su ira, el Sanedrín aparentemente intentó darle al asesinato de Esteban la apariencia de justicia formal. Es cierto que los romanos quitaron a los judíos el derecho a la pena capital alrededor del tiempo en que nació Yeshua. Poncio Pilato, sin embargo, seguía siendo el gobernador y el Sanedrín sabía que no tenían nada que temer de él. Había demostrado su vacilante debilidad al permitir la ejecución del Mesías, de quien sabía que era inocente. Pero de todos modos lo hizo crucificar, porque temía que los judíos le hicieran perder su puesto (vea el comentario sobre La vida de Cristo Lq – Jesús condenado a ser crucificado). A pesar de sus esfuerzos, tuvo serios problemas con Roma, que pronto lo revocaría como gobernador. Además, normalmente vivía en Cesarea, no en Jerusalén y, por lo tanto, probablemente no estaba ni cerca de esta escena. Además, tenía problemas mayores que atender.160

Y mientras apedreaban a Esteban, él invocaba y decía: ¡Señor Jesús, recibe mi espíritu! (7:59) Las últimas palabras de Esteban fueron una oración por él y por sus verdugos. Como Jesús, entregó su espíritu; pero mientras que el Mesías moribundo se entregó a Dios: Y Jesús, clamando a gran voz, dijo: ¡Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu! (Salmo 31:5 y Lucas 23:46), Esteban se entregó a su Señor a quien había visto en su visión. Este es un ejemplo sorprendente de cómo las palabras originalmente aplicadas al Padre se dirigen al Hijo. Muestra cómo la primitiva Comunidad Mesiánica (iglesia) veía a Yeshua como igual a YHVH.161

Además, esta confesión de Esteban muestra que él esperaba entrar en la presencia del Señor tan pronto como muriera. Las Escrituras no enseñan ninguna demora entre la vida aquí y la vida en el cielo, ya sea en algún lugar de espera como el purgatorio o en algún estado inconsciente llamado sueño del alma. En cambio, la Biblia enseña que los creyentes entran en la presencia del Mesías inmediatamente después de la muerte (Segunda Corintios 5:8; Filipenses 1:23). Yeshua prometió al ladrón en la cruz que lo llevaría al Paraíso con Abraham (la morada de los justos del TaNaJ) ese mismo día (Lucas 23:43). La historia del hombre rico y Lázaro enseñó que los muertos nunca están inconscientes o desconocedores de sus circunstancias (vea el comentario sobre La vida de Cristo Hx La historia del hombre rico y Lázaro). El libro de Apocalipsis describe a los mártires de la Tribulación como despiertos y en la presencia de Dios, y capaces de suplicar al Señor venganza contra sus asesinos (vea el comentario sobre Apocalipsis Cp El Quinto Sello: Vi debajo del altar a los que habían sido inmolados).162

Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: ¡Señor, no les tomes en cuenta este pecado! Y habiendo dicho esto, durmió (7:60). La turba derramó toda su amargura sobre Esteban apedreándolo sin piedad. Haciéndose eco de las palabras de Yeshua (Lucas 23-34), Esteban oró por el perdón de sus verdugos. Sus palabras contrastaron notablemente con su actitud de denuncia durante su discurso e ilustraron cómo un creyente puede amar al pecador y odiar el pecado. Se deslizó a la presencia de su Señor. Y como su nombre Esteban, que significa corona, recibió sin duda la corona de la vida de su Padre celestial (vea el comentario sobre Apocalipsis Cc Porque todos debemos comparecer ante el tribunal de Cristo). Esteban era una estrella fugaz, tuvo una breve actuación. Una oportunidad en el escenario. Pero fue absolutamente inolvidable. Cuando cayó el telón sobre su vida, recibió una gran ovación de su audiencia de Aquel. Qué dulce imaginar las primeras palabras celestiales que escuchó ese día: “Bienvenido Estéfano, Mi alegría y Mi corona”.163

¿Cómo pudieron legalmente apedrear a Esteban bajo la ley romana de aquellos días que le quitó al Sanedrín el derecho a la pena capital? Ya hemos visto esto en el caso de Yeshua. Ahora no sabemos exactamente cuándo tuvo lugar este evento. Pero bien podría haber sucedido en el año 35 dC. En ese año, Vitelo se convirtió en el nuevo general romano sobre toda Siria, de la cual la tierra de Israel era parte en lo que a los romanos concernía. Fue Vitelo quien depuso a Poncio Pilato como procurador. Pero pasaron varios meses antes de que llegara el nuevo procurador y, mientras tanto, la lapidación de Esteban podría haber ocurrido.

A continuación, se muestra una declaración resumida que nos prepara para lo que sigue. Estas declaraciones resumidas en Hechos se pueden ver en cuatro lugares: 2:43-47, 4:32-37; 5:12-16 y aquí. Es importante distinguir entre declaraciones resumidas y declaraciones de transición; las primeras sólo aparecen en los primeros ocho capítulos de Hechos, y las segundas aparecen en varios lugares a lo largo del libro.

Sin embargo, hubo al menos un hombre que permaneció impasible y no lamentó verlo morir. Saulo consintió en su asesinato, y en aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia en Jerusalén, y todos fueron esparcidos por las regiones de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles (8:1). La palabra consentir, del griego: suneudokon, significa un grado de placer y satisfacción; vea Hechos 22:20. Saulo estaba contento. El verbo imperfecto muestra que virtualmente estuvo aplaudiendo durante toda la prueba. Simplemente no dio su aprobación cuando Esteban exhaló su último aliento. El aplaudió cada golpe, como los puntos en un marcador. No sería fácil convertir a un hombre así. Pero las palabras de perdón de Esteban iban a tener un impacto permanente en Saulo. La semilla podría tardar un poco en germinar, pero el rabino de Tarso nunca escaparía al testimonio de Esteban.164

Saulo consintió en su asesinato, y en aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia en Jerusalén, y todos fueron esparcidos por las regiones de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles (8:1). Ese mismo día se desató una gran persecución contra la iglesia de Jerusalén. Fue una gran persecución porque las dos persecuciones anteriores provinieron sólo de los saduceos, mientras que ahora los fariseos, que eran con diferencia la mayoría, se habían unido a ellos. Lucas desea enfatizar que el ataque exitoso contra Esteban fue la señal para un ataque más amplio contra los creyentes en Sión, sin duda instigado por el Sanedrín. La palabra esparcidos, del griego: diesparesan, de aquí viene la palabra diáspora. A los apóstoles les bastó huir al campo de Judea y Samaria para escapar del peligro. Es significativo que algunos de los creyentes estaban dispuestos a quedarse en Samaria y que no experimentaron oposición allí por parte de los samaritanos. Se puede suponer que la oposición de Jerusalén provino del Sanedrín y que estaba dirigida principalmente contra los hermanos helenísticos de Esteban en la Comunidad del Mesías. Los apóstoles se quedaron solos. El hecho de que ellos pudieran permanecer en Jerusalén confirma la sospecha de que los ataques eran principalmente hacia los creyentes helenísticos.

Y unos varones piadosos sepultaron a Esteban, e hicieron gran llanto por él (8:2). Como fieles atalayas, los apóstoles permanecieron en sus puestos, pastoreando sus rebaños. Algunos varones piadosos enterraron a Esteban adecuadamente y lo lloraron profundamente. El acto de ellos fue a la vez una protesta pública desafiante y una declaración de su percepción de que Esteban era justo. Ese duelo a menudo duraba de treinta (Deuteronomio 34:8) a setenta días (Génesis 50:3). Sin duda las autoridades romanas estaban de acuerdo con lo que estaba pasando; en cualquier caso, el ataque probablemente duró poco tiempo (como suele ser la mayoría de los períodos de persecución), y es posible que muchos creyentes hayan regresado a Jerusalén una vez que las cosas se calmaron.165

Saulo demostró un tipo diferente de celo religioso, quien asumió un papel destacado en la persecución de la iglesia/Comunidad Mesiánica. Y Saulo asolaba la iglesia, entrando de casa en casa, y arrastrando a hombres y mujeres, los entregaba en la cárcel (8:3). No contento con acosar a los creyentes en Jerusalén, dijo Saulo: Yo perseguí a muerte este Camino, atando y entregando en cárceles a varones y también a mujeres (Hechos 22:4). También dijo: Y muchas veces, castigándolos por todas las sinagogas, los forzaba a blasfemar, y locamente enfurecido contra ellos, los perseguía aun hasta en las ciudades extranjeras (26:11), esto fue con el permiso del Sanedrín (22:5). En el celo por sus creencias dijo luego: Porque oísteis acerca de mi conducta anterior en el judaísmo, que perseguía sobremanera a la iglesia de Dios y la destrozaba (Gálatas 1:13), y cumplió la predicción del Señor en Juan 16:2: Os echarán de las sinagogas, y llega la hora cuando cualquiera que os mate, piense que ofrece servicio a Dios. Sinceramente pensó que él estaba sirviendo a Ha’Shem al encarcelar y ejecutar a los creyentes. Y sólo una intervención directa del Señor Yeshua Mesías lo persuadiría de lo contrario. 166

Para los propósitos declarados del Mesías (1:8) la dispersión de los creyentes, especialmente de los helenísticos, que parecía un desastre, resultó ser una gran bendición porque los que habían sido esparcidos iban proclamando la palabra (8:4), como semilla, andaban como pastores itinerantes, proclamando la palabra. Como dijo José a sus hermanos después de una persecución anterior: Vosotros pensasteis hacerme mal, pero Dios lo tornó en bien para que sucediera como vemos hoy, y se preservara la vida de mucha gente (Génesis 50:20). Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas ayudan para bien, a los que son llamados conforme a su propósito (Romanos 8:28).

Señor Jesús, Tú nos has dicho que nuestros tiempos difíciles de persecución son oportunidades para que demos testimonio de Tu nombre. Llénanos de fe para saber que cuando surjan estos momentos, nos darás tales palabras y una sabiduría que ninguno de nuestros adversarios podrá resistir ni contradecir. Incluso cuando somos traicionados por padres, hermanos, parientes y amigos, y somos odiados a causa de Tu nombre, sabemos que nuestra salvación está segura en Ti.167

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2024-11-05T13:08:21+00:000 Comments

Aw – Testimonio de Esteban al Sanedrín 6:8 a 7:53

Testimonio de Esteban al Sanedrín
6:8 a 7:53

31-33 dC
Los acontecimientos de Hechos 3-8 transcurren con creciente preocupación por parte de los judíos, y especialmente de las autoridades judías en Jerusalén. La creciente tensión dio lugar a una acción de vigilancia contra Esteban, y luego a un esfuerzo autorizado bajo el mando del rabino Saulo para perturbar y destruir ese nuevo movimiento mesiánico, lo que implicó la persecución e incluso la muerte de los creyentes. La persecución llevó a varios creyentes como Felipe a ir a Samaria y dar testimonio de Yeshua.

Testimonio de Esteban al Sanedrín ESCUDRIÑAR: De 6:13-14, ¿cómo usted redactaría las acusaciones formales contra Esteban? ¿Qué revela la defensa de Esteban (de hecho, una lección de historia) sobre su respeto por la Torá? ¿Por qué Esteban pasó la mayor parte de su defensa hablando de Moisés? ¿Qué paralelos hizo entre Moisés y Yeshua? ¿Cómo se relaciona eso con los cargos contra él en 6:13-14? ¿Cómo comienza la cita del versículo 37 a darle la vuelta a sus acusadores con respecto a quién estaba realmente rechazando a Moisés? Según los versículos 44-50, ¿cuál es el punto de Esteban sobre el Templo y la presencia de Dios? ¿Cómo está volviendo a darle la vuelta a sus acusadores una vez más? Mire Deuteronomio 10:16 y 30:4. ¿Qué quiere decir Esteban con la frase corazones y oídos incircuncisos? En este contexto, ¿qué dice realmente Esteban sobre la consideración del Gran Sanedrín por Moisés y la Torá? ¿De qué los acusa en los versículos 51-53? Por lo tanto, considerando las circunstancias, ¿qué clase de persona era Esteban?

REFLEXIONAR: Dado que el Gran Sanedrín conocía su historia en todos sus aspectos como Esteban, ¿cómo explica usted la respuesta radicalmente diferente a Jesús? ¿Qué se necesita en su vida además del conocimiento para comprender plenamente al Mesías? ¿De qué manera la gente hoy en día se aferra a los rituales y héroes religiosos, sin entender lo que esas ceremonias y esas personas representan? ¿Cómo lo afecta esta tendencia? ¿De qué manera se podrían formular contra usted las acusaciones que Esteban formula contra los dirigentes judíos? ¿Cómo podría sentirse terco, “duro de cerviz”, esta semana? ¿Cómo empezará usted a inclinarse ante YHVH en esa área ahora? ¿Diría que el TaNaJ es más bien un extraño o un amigo cercano para usted? Cuando Yeshua fue llevado a juicio, básicamente permaneció en silencio ante el Gran Sanedrín; sin embargo, Esteban habló aquí con mucha valentía. ¿Cómo decide cuándo hablar con valentía y cuándo guardar silencio ante la oposición?

Este pasaje marca una transición en el libro de Hechos. Hasta este punto, Pedro ha sido la figura dominante, cumpliendo su llamado al llevar el evangelio a los judíos primero (Romanos 1:16). Pero otra figura importante se vislumbra en el horizonte: el rabino Saulo, también llamado Pablo, que se presenta al final del Capítulo 7 (vea el enlace, haga clic en Bm – El primer viaje misionero de Pablo). Esteban cierra la brecha entre esos dos gigantes. Pedro ministró principalmente al pueblo judío y Pablo principalmente a los gentiles. Pedro ministró en Jerusalén, Pablo en todo el Imperio Romano. Pero el ministerio de Esteban fue el catalizador que catapultó a la comunidad mesiánica en toda Judea y Samaria, y hasta lo último de la tierra (1:8b).137

Cuando se abre el capítulo 7, comienza el juicio de Esteban. Si bien el objetivo principal del discurso de Esteban fue responder a las acusaciones de blasfemia, otras tres ideas se entrelazan a lo largo de todo el discurso. Primero, sabía que él debía captar y mantener la atención de su audiencia. Lo hizo relatando la historia de Israel como base para su defensa. Dado que el Sanedrín estaba tremendamente orgulloso de su ascendencia, ese era un tema del que ellos nunca se cansarían de oír hablar.

En segundo lugar, el discurso de Esteban tenía como objetivo acusar a sus oyentes de rechazar al Mesías. A lo largo de su discurso, esa acusación crece lentamente hasta alcanzar un clímax devastador (vea An Pedro habla a la multitud en Pentecostés: La predicación de Pedro). Él les muestra que, al rechazar al Mesías, estaban imitando a sus ascendientes apóstatas, quienes rechazaron a José, a Moisés e incluso a Dios mismo. Esteban no fue el blasfemo, ¡ellos lo fueron!

En tercer lugar, Esteban buscó presentarles a Yeshua como el Mesías, usando a José y Moisés como tipos de Cristo. Este pasaje presenta la cuádruple defensa de Esteban contra los falsos cargos de blasfemia presentados contra él. Es mejor no perderse en los detalles de las referencias en el TaNaJ que Esteban cita, sino concentrarse en los dramáticos temas y el flujo de su mensaje magistral. El propósito de Esteban no era recitar la historia, sino establecer que él no era culpable de blasfemar a ADONAI, Moisés, la Torá o el Templo. Sin embargo, sus acusadores eran culpables de blasfemia porque ellos habían rechazado al Mesías.138

Independientemente de lo que pensaran los líderes judíos, debieron sorprenderse de lo que obtuvieron a continuación. Esteban fue acusado. Su vida literalmente pendía de un hilo. Pero en lugar de aplacar a sus acusadores o defenderse, Esteban predicó uno de los sermones más clásicos de la historia.139

ADONAI

Esteban abordó primero la acusación más grave, lo acusaban de blasfemias contra Moisés y contra DIOS (6:11). Siendo lleno del Espíritu de Dios, Esteban lleno de gracia y de poder, hacía prodigios y grandes señales milagrosas entre el pueblo (6:8). Cuanto más Esteban derramó su vida por el Mesías, más el Mesías derramó Su vida en Esteban. Es importante entender que su autoridad para realizar señales y prodigios sólo llegó después de que fue nombrado uno de los siete diáconos; en otras palabras, vino sólo con la autoridad que le dieron los apóstoles mediante la imposición de manos (vea AvDiáconos ungidos para el servicio). Este proceso continuará a lo largo del libro de Hechos. La capacidad de realizar señales y prodigios no era común entre todos los creyentes, sino que sólo eran realizadas ya sea por los apóstoles o por aquellos en quienes la delegaban, como fue el caso de Esteban. La comunidad mesiánica (iglesia) no era una comunidad que obraba milagros. Más bien, era una comunidad mesiánica con apóstoles obradores de milagros.

Pero algunos de la llamada Sinagoga de Libertos (tanto cireneos como alejandrinos), y de los de Cilicia y de Asia, se levantaron para disputar con Esteban (6:9). Ellos discutían con Esteban que Yeshua era el Mesías. Estos hombres probablemente eran judíos de la diáspora que habían sido capturados y esclavizados por los romanos. El general Pompeyo, que capturó Jerusalén en el año 63 aC, tomó prisioneros a varios judíos y los liberó en Roma. Algunos, sin embargo, pueden haber sido gentiles conversos al judaísmo. El fenómeno del celo prosélito es familiar en todas las comunidades religiosas. Pero no podían resistir a la sabiduría y al espíritu con que hablaba. (6:10). Cuando los oponentes de Esteban no pudieron vencerlo en un debate justo, cambiaron de táctica.

Entonces sobornaron a unos varones que dijeran: Lo hemos oído hablando palabras blasfemas contra Moisés y Dios (6:11), con malas intenciones. Esta fue la misma táctica utilizada en el juicio del Mesías (Mateo 26:59-61; Marcos 14:55-59). Incluso los falsos cargos de blasfemia y de hablar contra el Templo, eran los mismos que aquellos contra el Señor. El hecho de que también acusaran a Esteban de blasfemar contra Moisés sugiere que estaba negando la capacidad de la Torá (Ley) para salvar. Lo acusaron de blasfemar contra Dios al hablar contra el Templo al decir que se podía adorar a Dios en cualquier lugar. Esa acusación sin duda reflejaba la presentación que hizo Esteban del Mesías como la encarnación de ADONAI. Pero esa acusación de blasfemia violaba las leyes del Sanedrín, porque la Ley Oral decía que a menos que alguien pronunciara específicamente el nombre personal de Dios – YHVH – no podía ser acusado de blasfemia (vea el comentario sobre La vida de Cristo Lh – Las leyes del gran Sanedrín respecto a los juicios). Puesto que esas mismas mentiras habían funcionado tan bien contra Yeshua, rápidamente las usaron contra Esteban.

E incitaron al pueblo, a los ancianos y a los escribas; y cayendo sobre él, lo arrebataron y lo llevaron al Sanedrín (6:12). Los escribas eran los eruditos en la Torá. Y presentaron testigos falsos, diciendo: Este hombre no cesa de hablar palabras contra el lugar santo y la ley (6:13). Ellos pusieron a dos o tres testigos falsos. Al hablar sobre el Lugar Santo apelaban a los saduceos) y hablando de la Torá apelaban a los fariseos. Porque lo hemos oído diciendo que este Jesús, el nazareno, destruirá este lugar, y cambiará las costumbres que nos transmitió Moisés (6:14). Al decir, destruirá este lugar (una vez más enojando a los saduceos), y diciendo cambiará las costumbres que Moisés (una vez más enojando a los fariseos), por lo que ambos tenían motivos para estar enojados contra Esteban. Al cambiar las costumbres, significaban desconocer la Ley Oral (vea el comentario sobre La vida de Cristo EiLa Ley Oral). Porque los rabinos enseñaron que Moisés hizo descender la Ley Oral del Monte Sinaí al mismo tiempo, que él hizo descender los Diez Mandamientos, un ataque a la Ley Oral equivalía, en efecto, a un ataque a la Torá en su conjunto. Esteban tenía el mayor respeto por Moisés y la Torá. Sin embargo, su elección de palabras lo convirtió en un revolucionario que buscaba derrocar el orden divino establecido por ellos. Ellos transformaron su positiva proclama en un ataque negativo.

Lo que ocurrió después presentó un sorprendente contraste. Esteban se presentó ante el Sanedrín acusado de ser un malvado blasfemador de ADONAI, Moisés, la Torá y el Templo. Pero al clavar en él la vista, todos los que estaban sentados en el Sanedrín vieron su rostro como el rostro de un ángel (6:15). Lejos de ser malvado, Esteban irradiaba la santidad y la gloria Shekinah de Dios, algo que nadie más en la historia había experimentado, excepto Moisés (Éxodo 34:27-35). Al poner Su Shekinah en el rostro de Esteban, ADONAI mostró Su aprobación del Brit Hadashah y su mensajero.140

Los fariseos instigaron esta tercera persecución de los creyentes en Hechos. Ya no eran simplemente los saduceos quienes se oponían a la comunidad mesiánica (iglesia), como lo habían sido durante los primeros cinco capítulos, porque la cuestión que ahora se plantea ya no se trata simplemente de la resurrección. La cuestión ahora es un nuevo orden, un nuevo Camino en oposición al judaísmo farisaico.141

Habiendo sido acusado, Esteban tenía derecho a defenderse, por lo tanto, el cohen gadol (probablemente Caifás, quien estuvo en el cargo hasta el 36 dC), entonces el sumo sacerdote dijo: ¿Es esto así? En efecto, estaba preguntando: “¿Cómo se declara usted ante los cargos que se le imputan?, ¿es culpable o no culpable?” Pero la defensa de Esteban no fue una defensa en el sentido de una explicación para intentar obtener una absolución. Más bien, fue una proclamación de las Buenas Nuevas y una acusación a los líderes judíos por no reconocer a Yeshua como el Mesías, o por no apreciar la salvación ofrecida por Él.142

Cuando Esteban comienza su defensa, a los críticos de la inerrancia de las Escrituras, o a los oponentes del judaísmo mesiánico, les gusta señalar varias citas de Hechos 7 como textos de prueba. Intentan mostrar una marcada contradicción con lo que dice el TaNaJ y Hechos 7. Citan Hechos 7 y luego dicen: “¿En qué parte del TaNaJ dice esto?” Hay dos razones para estas aparentes discrepancias: primero, el uso de textos diferentes. El TaNaJ que tenemos ahora se llama Texto Masorético. Es la copia completa más antigua que tenemos del TaNaJ compilada hacia el año 1.250 dC. Siendo un helenista, cuando Esteban cita el TaNaJ, él utiliza la Septuaginta, o la traducción griega del TaNaJ, compilada alrededor del 250 aC. El texto hebreo, que es la base de la Septuaginta, es al menos tan antiguo como eso. Sin embargo, el Texto Masorético sólo data del año 1250 dC. Entonces la pregunta es: “¿Qué texto es más preciso? ¿El texto hebreo detrás de la Septuaginta o el texto masorético? Si nos guiamos por lo que es más cercano al momento original de escritura, la Septuaginta está usando un texto hebreo que es mucho más antiguo que el Texto Masorético. Entonces, una de las razones por las que los versículos de Hechos 7 no coinciden con las citas del TaNaJ es que Esteban usó la Septuaginta.

En segundo lugar, está el uso de un principio llamado telescópico, o combinación de dos eventos en una sola imagen. Los críticos dicen que Hechos 7 se confunde entre las historias de Abraham y Jacob, de Jacob y José. Pero Esteban estaba bajo presión, en medio de una mentalidad de turba, le rechinaban los dientes y no podía entrar en una enseñanza versículo por versículo con los 71 miembros del Sanedrín. Entonces los acercó telescópicamente.143

Luego Esteban comenzó el discurso más largo de Hechos. Y él declaró: Varones hermanos y padres, oíd: El Dios de la gloria apareció a nuestro padre Abraham, estando en Mesopotamia, antes que viviera en Harán (7:2), vea también Génesis 15:7. Al decir hermanos, mostró su solidaridad con ellos, y al decir padres (un nombre no poco común para los miembros del Sanedrín), mostró su respeto hacia ellos como líderes del pueblo judío. Sin perder tiempo en preliminares, se sumergió directamente en su tema (vea el comentario del Génesis DqTeraj se convirtió en padre de Abram, Nacor y Harán). El punto que Esteban estaba tratando de señalar aquí era que la presencia divina no estaba restringida a la tierra de Israel o el Templo, porque la gloria Shekinah apareció mucho antes de que existiera un Tabernáculo o un Templo, incluso antes de que Abraham cruzara las fronteras de la Tierra Prometida. Como judío de la diáspora, él entendía ciertas cosas que los judíos nativos no entendían.

Esteban repitió el contenido del pacto y el llamado de Abraham, declarando: Varones hermanos y padres, oíd: El Dios de la gloria apareció a nuestro padre Abraham, estando en Mesopotamia, antes que viviera en Harán, y le dijo: Sal de tu tierra y de tu parentela, y ve a la tierra que Yo te muestre (7:2-3). El contexto de lo que está hablando es Génesis 11:31 al 12:3. También enfoca telescópicamente los acontecimientos de Génesis 15:7. La primera etapa fue que Abraham saliendo entonces de la tierra de los caldeos, habitó en Harán; y de allí, luego de morir su padre, lo trasladó a esta tierra en la que vosotros vivís ahora (7:4). Este mandato divino fue, de hecho, pronunciado en Harán. Sin embargo, dado que en Génesis 15:7 está claro que Dios llamó a Abraham desde Ur, se puede suponer razonablemente que el llamado divino le llegó allí antes de que viviera en Harán. Sería natural suponer que el contenido del mensaje divino dado en Ur fue el mismo que el dado en Harán y, por lo tanto, no hay necesidad de hablar de que Esteban estuviera equivocado.144

Como haría Pablo más tarde (Romanos 4 y Gálatas 3), Esteban se centró en Abraham como un hombre de fe. Obedeciendo completamente el llamado soberano de Dios y abandonó su patria, sin saber exactamente a dónde se dirigía. Incluso después de llegar a su nueva tierra, no le dio herencia en ella, ni aun para asentar un pie, y cuando él no tenía aún hijo, prometió dársela en posesión, y a su descendencia después de él (7:5). Lo más cerca que estuvo Abraham de ver cumplida una promesa tan grandiosa fue el nacimiento de Isaac. Lo que recibió fue una promesa de esclavitud en Egipto.

Y Dios habló así: Tu descendencia será extranjera en tierra ajena por cuatrocientos años, y la esclavizarán y maltratarán. Pero Yo juzgaré, dijo Dios, a la nación a la cual servirán como esclavos, y después de estas cosas, saldrán y me servirán en este lugar (7:6-7). Esteban dice cuatrocientos años, que es un número redondeado por razones de brevedad, porque, una vez más estaba bajo mucha presión. Lucas cita el TaNaJ casi siempre en una forma correspondiente a la LXX o cercana a ella, y no de acuerdo con el Texto Masorético hebreo. Aquí se cita cercanamente Génesis 15:13-14, pero no corresponde exactamente a la LXX.145

Siguiendo el fluir de la historia de la salvación, Esteban pasó al período patriarcal. Y le dio el pacto de la circuncisión; y así engendró a Isaac, y lo circuncidó al octavo día; e Isaac a Jacob, y Jacob a los doce patriarcas. Y los patriarcas, teniendo envidia de José, se deshicieron de él vendiéndolo para Egipto. Pero Dios estaba con él, y lo libró de todas sus tribulaciones, y le dio gracia y sabiduría delante de Faraón, rey de Egipto, quien lo puso a gobernar sobre Egipto y sobre toda su casa (7:8-10). Aquí los doce patriarcas, eran los jefes de las doce tribus de Israel. En aras de la brevedad, Esteban decidió pasar por alto las historias de Isaac y Jacob y pasar directamente a José. La revelación a José también le llegó a él fuera de la Tierra Prometida.

Esteban deja muy claro que los doce patriarcas eran culpables de oponerse a Dios y a Su propósito. Vendieron a José, pero Dios lo rescató. La rebelión de la nación contra ADONAI comenzó con los propios patriarcas. El Sanedrín estaba haciendo exactamente lo mismo, de lo que los padres fundadores de la nación, eran culpables y de lo que acusaban falsamente a Esteban. Aunque él espera hasta la conclusión de su discurso para declarar abiertamente que Yeshua es el Mesías, incluso en su resumen histórico, Esteban da pantallazos del Mesías. Hay ochenta maneras en que la vida de José nos prepara o presagia la vida de Cristo (vea el comentario sobre Génesis IwEl relato escrito de la generación de Jacob).146

Vino entonces una hambruna en todo Egipto y Canaán, y una gran aflicción; y nuestros padres no hallaban alimentos. Pero oyendo Jacob que había alimento en Egipto, envió a nuestros padres la primera vez. Y en la segunda, José se dio a conocer a sus hermanos, y fue manifestado a Faraón el linaje de José (7:12-13). El rechazado por sus hermanos se convirtió en el salvador. Lo que Esteban quería decir era que esto también era cierto para el Mesías. Y José envió a llamar a su padre Jacob, y a toda la familia, en número de setenta y cinco personas (7:14), (vea el comentario sobre Génesis KmLa Genealogía de Jacob). Génesis 46:26-27; Éxodo 1:5 y Deuteronomio 10:22 dicen todos que setenta personas bajaron a Egipto. Sin embargo, el texto de la Septuaginta de Génesis 46:27 dice setenta y cinco. Esteban, siendo helenista, naturalmente habría utilizado la figura de la Septuaginta. Aparentemente se llegó a la cifra mayor incluyendo el total de descendientes de José nacidos en Egipto. Y Jacob bajó a Egipto, y murió él, y nuestros padres. Y fueron trasladados a Siquem y puestos en el sepulcro que Abraham había comprado por precio de plata a los hijos de Hamor en Siquem (7:15-16). Nuevamente, en aras de la brevedad, Esteban resume los relatos de la compra del sitio de Macpela por Abraham, y la adquisición del sitio de Siquem por parte de Jacob. Su propósito no era recitar historia, sino establecer que no era culpable de blasfemar a ADONAI.147

Moisés

Habiéndose defendido exitosamente contra el cargo de blasfemar a ADONAI,Esteban pasó a la segunda acusación de rechazar a Moisés.Pero cuando se acercaba el tiempo de la promesa que Dios había declarado a Abraham, el pueblo creció y se multiplicó en Egipto, hasta que se levantó otro rey que no había conocido a José (7:17-18), vea también Éxodo 1:8. Éste, tratando con astucia a nuestro linaje, maltrató a los padres para que abandonaran a la intemperie a sus niños de pecho, para que no sobrevivieran. En aquel tiempo nació Moisés, y fue hermoso a la vista de Dios, y fue criado por tres meses en la casa de su padre; pero al abandonarlo a la intemperie, la hija de Faraón lo adoptó y lo crió como si fuera hijo suyo (7:19-21). Los detalles de la vida y el ministerio de Moisés eran bien conocidos por el Sanedrín, por lo que Esteban simplemente los resumió para dejar claro su punto. Sensible a la acusación de haber blasfemado contra Moisés,Esteban se propone elogiarlo, describiéndolo como extraordinario ante Dios (vea el comentario del Éxodo Ak –Un hombre de la casa de Leví se casó con una mujer levita). Y Moisés fue instruido en toda sabiduría de los egipcios, y era poderoso en sus palabras y en hechos (7:22). Moisés era un hombre extraordinario. Sus habilidades naturales de liderazgo, junto con la educación más completa del mundo antiguo, lo calificaron de manera única para la tarea que tenía por delante.

El llamado de Dios llegó cuando tenía como cuarenta años, le vino al corazón visitar a sus hermanos, los hijos de Israel (7:23). Aunque Moisés creció en la casa de Faraón, nunca se olvidó de su pueblo. Sin duda su madre le inculcó durante los años que ADONAI providencialmente había dispuesto que ella fuera su nodriza, que él era hebreo. Entonces, cuando se acercaba a los cuarenta, decidió ayudar a su sufrido pueblo. Y viendo a uno que era tratado injustamente, lo defendió; y matando al egipcio, vengó al maltratado (7:24). Al tomar esta acción, estaba asumiendo que sus hermanos entendían que por su mano Dios los libraba, pero ellos no lo entendían y no lo reconocían como el libertador. Lo que Esteban quería decir era que lo mismo le sucedería al Mesías. Y al día siguiente se presentó a unos que estaban peleando, y trataba de ponerlos en paz, diciendo: Varones, sois hermanos, ¿por qué os maltratáis el uno al otro? Entonces, el que maltrataba a su prójimo, lo rechazó, diciendo: ¿Quién te ha puesto por príncipe y juez sobre nosotros? ¿Acaso quieres tú matarme, como ayer mataste al egipcio? (7:26-28), vea Éxodo 2:14. Ante esta palabra, Moisés huyó, y vino a ser extranjero en la tierra de Madián, donde engendró dos hijos (7:29). Al darse cuenta de que matar al egipcio se había vuelto ampliamente conocido, Moisés huyó a la tierra de Madián (vea el comentario sobre Éxodo Al – Moisés huyó del faraón y se fue a vivir a Madián). Sus dos hijos fueron Gersom y Eliezer. Sin duda, al verlo como el líder de una rebelión judía, el faraón trató de matarlo sin éxito (Éxodo 2:15).

Transcurridos cuarenta años, el ángel se le apareció en el desierto del monte Sinaí, en la llama de una zarza ardiente (7:30). Vea el comentario de Éxodo Am – Moisés en Madián). Había llegado el momento en que Moisés condujera a los israelitas a la Tierra Prometida; vea el comentario sobre Éxodo Aq – Llamas de fuego desde dentro de una zarza ardiente. Una vez más, el punto de Esteban es que Dios se reveló fuera de la Tierra Prometida. Al verlo entonces Moisés, se maravillaba de la visión, y al acercarse para observar, le llegó la voz del Señor: Yo soy el Dios de tus padres, el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob. Lleno de temor, Moisés no se atrevía a mirar. Y el Señor le dijo: Quítate las sandalias de tus pies, porque el lugar en que estás es tierra santa (7:31-33); aunque estuviera fuera de la “Tierra Santa”. Entonces, cualquier lugar donde Dios aparece es un área de santidad. Las bendiciones de Dios no se limitaron a Tierra Santa ni al Templo. Ciertamente he visto la opresión de mi pueblo que está en Egipto, y he oído sus gemidos, y he descendido a librarlos. Ahora, pues, ven, para que te envíe a Egipto (7:34).

Esteban alcanzó el clímax de su defensa de blasfemar a Moisés. A este Moisés, a quien rechazaron, diciendo: ¿Quién te ha puesto por príncipe y juez? a éste envió Dios como príncipe y libertador, por mano del ángel que se le apareció en la zarza (7:35). Notará en los siguientes versículos que Esteban sigue enfatizando la palabra “este”. Este Moisés, o este hombre (es decir, Moisés), porque Esteban quería recalcar el mismo punto una y otra vez. La misma persona que Israel rechazó, fue la misma persona que Dios usó para sacar a Israel de la esclavitud. Este es un patrón constante en la historia de Israel: el orgullo espiritual junto con la ignorancia espiritual (que es una combinación realmente mala) hace que ellos rechacen a los libertadores que Dios les envía. A veces se ha señalado que Yeshua no pudo haber sido el Ungido, o de lo contrario Israel lo habría reconocido. Pero como señala Esteban, rechazaron tanto a José como a Moisés. Esta fue la respuesta típica hacia aquellos que Dios envió para liberarlos. Yeshua habló de esta actitud en Mateo 21:33-46.

Moisés los sacó, haciendo prodigios y señales milagrosas en tierra de Egipto, y en el mar Rojo, y en el desierto, por cuarenta años (7:36). Moisés cumplió su misión y los sacó de Egipto. Pero la mayor rebelión de Israel contra Dios y Moisés, a pesar de las maravillas y señales que ya habían visto en la tierra de Egipto, en la división del Mar Rojo y en el desierto, les causó otra demora. A causa de esa rebelión, vagaron fuera de la Tierra Prometida durante cuarenta años más. Era obvio por el discurso de Esteban que él tenía el mayor respeto por Moisés, y la acusación de blasfemar a Moisés era tan falsa como la de blasfemar a ADONAI. La respuesta judía a Moisés, al igual que su respuesta a José, fue paralela a su respuesta al Mesías. Luego Esteban les recordó que Moisés, en el conocido pasaje de Deuteronomio 18:15, predijo que vendría. Éste es el Moisés que dijo a los hijos de Israel: Profeta os levantará Dios de entre vuestros hermanos, como a mí (7:37). Por lo tanto, ellos estaban haciendo nuevamente lo que habían hecho sus padres: rechazar al libertador enviado por Dios. Sólo que esta vez fue más grave que todos los demás rechazos juntos. Este era el Mesías a quien ellos estaban rechazando.148

Torá

Fue una transición fácil de Moisés a la Torá, ya que ambos están estrechamente relacionados. Éste es el que estuvo con la congregación en el desierto, con el ángel que le hablaba en el monte Sinai, y con nuestros padres, quien recibió oráculos vivientes para dárnoslos (7:38). Esteban reafirmó la Torá de nuevo, declarándose “inocente”. Declaró que ADONAI fue el autor de la Torá, que los ángeles fueron su mediador (Hechos 7:53; Gálatas 3:19; Hebreos 2:2), y Moisés fue el receptor. Eso ciertamente no era blasfemia, y el Sanedrín lo sabía.

Pero ahora llega el punto de inflexión. Esteban comentó cómo los destinatarios originales de la Torá no la habían cumplido: al cual nuestros padres no quisieron obedecer, sino que lo rechazaron, y en sus corazones se volvieron a Egipto, diciéndole a Aarón: ¡Haznos dioses que vayan delante de nosotros, porque este Moisés que nos sacó de tierra de Egipto, no sabemos qué le ha ocurrido! (7:39-40). No fue Esteban quien desobedeció la Torá, sino los mismos padres que el Sanedrín reverenciaba. Esteban no rechazó a Moisés, sino aquellos mismos padres. Hicieron a él y a la Torá a un lado y en sus corazones se volvieron a Egipto. Peor aún, mientras Moisés estaba en el Monte Sinaí recibiendo la Torá de Dios, el pueblo recurrió a la idolatría. Porque me dijeron (dice Aaron): «Haznos un dios que vaya delante de nosotros; pues no sabemos qué le haya acontecido a este Moisés, el hombre que nos sacó de la tierra de Egipto» (32:23). Desde el momento en que se entregó la Torá, ellos se rebelaron contra ella. A pesar de todas sus declaraciones de lealtad a la Torá y al Templo, y sus acusaciones contra Esteban, sus oyentes pertenecían a una nación que, desde el principio, había rechazado la Torá y la verdadera adoración a YHVH.

Con este pensamiento el discurso toma un nuevo giro, y hasta el versículo 50 se ocupa de los temas gemelos de la idolatría y la adoración en el Templo en Israel. Y en aquellos días hicieron un becerro, y ofrecieron sacrificio al ídolo, y se regocijaron en las obras de sus manos (7:41). Ese único acto de idolatría condujo a otros actos de idolatría en el desierto. Entonces en los siguientes dos versículos, Esteban trata de la larga historia de idolatría de Israel a lo largo de esos cuarenta años y más. La respuesta de Ha’Shem fue entregarlos a la idolatría. Así que en estos dos versículos Esteban resume el resto de la historia de Israel y su tendencia hacia la idolatría que provocó el cautiverio babilónico (vea el comentario sobre Jeremías Gu – Setenta años de dominio imperial babilónico).

Pero Dios se apartó y los entregó a rendir culto al ejército del cielo, como está escrito en el libro de los profetas: ¿Acaso me ofrecisteis víctimas y sacrificios en el desierto por cuarenta años, oh casa de Israel? (7:42). Servir al ejército del cielo es la adoración de las estrellas. El libro de los doce profetas menores, es considerados como un solo libro en el TaNaJ. Para probar su punto, Esteban cita el libro de Amós (vea Amós 5:25).

Antes bien, llevasteis el tabernáculo de Moloc, y la estrella del dios Renfán, las imágenes que os hicisteis para adorarlas. Os transportaré, pues, más allá de Babilonia (7:43). Moloc, es el dios estelar amonita, relacionado con el planeta Venus y similar a la diosa griega Venus, a quien se ofrecían sacrificios humanos. Renfán, es un dios babilónico asociado con el planeta Saturno. Los sacrificios que ofreció Israel fueron los sacrificios levíticos que Dios ordenó, pero desviaron sus sacrificios a estos dioses. El punto que Esteban estaba señalando era que la idolatría que comenzó con el becerro de oro, terminó con la adoración del ejército del cielo, las estrellas. Esto se verifica a lo largo de las Escrituras (Deuteronomio 17:3; Segunda Reyes 17:6, 21:3 y 5, 23:5; Segunda Crónicas 23:3 y 5; Jeremías 13:15).

Os transportaré, más allá de Babilonia (7:43b LXX). Su punto es que los profetas ya habían acusado a Israel de idolatría, por lo tanto, su acusación no era nada nuevo.

Lucas cita el TaNaJ casi siempre en una forma correspondiente a la LXX o cercana a ella, y no de acuerdo con el Texto Masorético hebreo. Aquí se cita Amós 5:25-27 de manera cercana pero no correspondiente exactamente a la LXX.149

Templo

En respuesta a la acusación de que habló contra el Templo, Esteban trazó su historia para mostrar su gran respeto por este porque YHVH lo ordenó. Tenían nuestros padres el tabernáculo del testimonio en el desierto, como había ordenado el que hablaba a Moisés para que lo hiciera conforme al modelo que había visto (7:44). El Tabernáculo también estaba fuera de la Tierra Prometida. La generación del desierto no podía alegar ignorancia de la gloria de Dios., ya que el Tabernáculo estaba en medio de ellos. Después de recibirlo, nuestros padres a su vez lo introdujeron con Josué al tomar posesión de las naciones que Dios arrojó de la presencia de nuestros padres, hasta los días de David; quien halló gracia delante de Dios, y pidió proveer tabernáculo para la Casa de Jacob (7:45-46). Tampoco pudieron hacerlo los padres posteriores como Josué. Desde el tiempo de la conquista hasta los días de David, Israel tenía el Tabernáculo, un símbolo constante de la santa presencia de Dios. Sin embargo, persistieron en caer en la idolatría. Después de que Ha’Shem le dio a David la victoria sobre todos sus enemigos, pidió encontrar una morada para el Dios de Jacob (vea el Salmo 132:3-5 LXX). Sin embargo, la petición de David fue denegada, pero Salomón le edificó Casa (7:47). Esteban hace sólo una breve referencia al Templo de Salomón, ya que el Sanedrín estaba muy familiarizado con su historia. Además, el Templo de esos días no era el de Salomón, que había sido destruido por los babilonios. Ese Templo había sido construido por el no judío Herodes. Entonces, la naturaleza transitoria del Tabernáculo, y luego del Templo, conducen al punto principal de Esteban, es decir: el Altísimo no habita en casas hechas de mano (7:48a). No puede haber duda de que la gloria Shekinah residió dentro del lugar santísimo del Tabernáculo y más tarde en el Templo, pero aun así no lo limitó a Él de ninguna manera.

En contraste con este punto de vista, Esteban enfatiza que ADONAI no residía actualmente en el Templo de Sión, Dios habita en el cielo. Además, no solo Dios y la verdadera morada de Dios no están hechos con manos humanas, sino que todo el mundo y todo lo que hay en él es hecho por Dios. No hay nada malo en el Templo ni en su construcción, pero está mal creer que él (y quizás sólo él) es la morada de Dios. Además, la lealtad a un Templo construido con manos humanas podría poner a Israel en peligro de repetir su pecado anterior en el desierto, porque el becerro de oro también había sido hecho por manos humanas.150 Como dice el profeta (7:48b):

El cielo es mi trono, Y la tierra, estrado de mis pies.

¿Qué casa me edificaréis? dice el Señor;

¿O cuál es el lugar de mi reposo? (7:49)

¿No hizo mi mano todas estas cosas? (7:50)

Lucas cita el TaNaJ casi siempre en una forma correspondiente a la LXX o cercana a ella, y no de acuerdo con el Texto Masorético hebreo. Aquí se cita textualmente Isaías 66:1-1 de la LXX con un cambio en el orden de las palabras.151 Esteban no era culpable de blasfemar contra el Templo. Lo fueron ellos, por limitar a Ha’Shem a esto. En cambio, como Isaías, argumentó que Dios era más grande que cualquier Templo. Era el símbolo de la presencia de Dios; no la prisión de Su esencia.

A lo largo del discurso de Esteban la tensión debe haber ido aumentando. Mientras señalaba los rechazos y las apostasías de Israel, el Sanedrín se sentía cada vez más incómodo. Ellos debieron haberse preguntado ¿qué punto estaba tratando de transmitir? No tuvieron que esperar mucho. Habiendo sentado el fundamento histórico para ello, los golpeó con una acusación devastadora: eran exactamente como sus padres en los días de José, Moisés y David. Eran: ¡Duros de cerviz, e incircuncisos de corazones y de oídos! Vosotros resistís siempre al Espíritu Santo; como vuestros padres, también vosotros (7:51). Porque ellos se enorgullecían de su circuncisión física y de su comportamiento ritual. La descripción que Esteban hizo de ellos como incircuncisos de corazón (Levítico 26:41; Deuteronomio 10:16, 30:6; Jeremías 4:4, 9:26; Ezequiel 44:7 y 9) y de oídos (Jeremías 6:10) fue muy punzante. El pecado de ellos nunca había sido perdonado. Ellos eran tan impuros ante Dios como los gentiles incircuncisos. Esa fue la condena definitiva.

Éstas son las caracterizaciones de Israel que hace el TaNaJ: el pueblo de Dios exteriormente lleva la señal del pacto con Abraham, pero interiormente es impuro y rebelde (vea Romanos 2:17-3:2). Vosotros resistís siempre al Espíritu Santo; como vuestros padres, también vosotros (7:51b), vea Isaías 63:10. ¿A cuál de los profetas no persiguieron vuestros padres? Y mataron a los que anunciaron de antemano la venida del Justo, a quien vosotros ahora habéis llegado a entregar y asesinar (7:52); Yeshua les hizo la misma acusación (vea Mateo 23:29-36). Ellos se convirtieron en traidores y asesinos, no directamente, como estaban a punto de hacerlo con Esteban, sino a través de Poncio Pilato y el gobierno romano.152. Vosotros, que recibisteis la ley por medio de los ángeles, y no la guardasteis (7:53). Ellos no tenían excusa, ya que la Torá señalaba al Mesías (vea Juan 5:39). Esteban se hace eco una vez más de las palabras de su Señor, quien dijo a esos mismos líderes: Pero si creyerais a Moisés, me creeríais a mí, porque de mí escribió él (Juan 5:46). No hubo ninguna oferta de salvación, sólo una declaración de desobediencia.

A pesar de su orgullosa jactancia que, si estuviéramos en los días de nuestros padres, no seríamos sus cómplices en la sangre de los profetas (Mateo 23:30), ellos habían hecho cosas mucho peores. Sus padres habían asesinado a los profetas de Dios, ellos, sin embargo, ellos habían asesinado a Su Hijo, el Justo. Ahora estaban a punto de cometer otro asesinato. Esteban pronto se convertiría en otro de la larga línea de mensajeros de ADONAI asesinados por la nación escogida de Dios, y el primero asesinado por predicar el nombre del Mesías.153

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2024-11-05T12:57:32+00:000 Comments

Av – Diáconos ungidos para el servicio 6: 1-7

Diáconos ungidos para el servicio
6: 1-7

31-33 dC
Los acontecimientos de Hechos 3-8 transcurren con creciente preocupación por parte de los judíos, y especialmente de las autoridades judías en Jerusalén. La creciente tensión dio lugar a una acción de vigilancia contra Esteban, y luego a un esfuerzo autorizado bajo el mando del rabino Saulo para perturbar y destruir ese nuevo movimiento mesiánico, lo que implicó persecución e incluso la muerte de los creyentes. La persecución llevó a varios creyentes como Felipe a ir a Samaria y dar testimonio de Yeshua.

Diáconos ungidos para el servicio ESCUDRIÑAR: Teniendo en cuenta lo que dice la Biblia en Hechos 2:44-45 y 4:32, ¿cómo podrían pasarse por alto a las viudas en el sustento diario? ¿Cómo resuelven los apóstoles este problema? ¿Por qué la comunidad mesiánica elegiría a siete judíos de habla griega para ocupar este ministerio? Mirando 2:42-47, 4:32-35, 5:42 y 6:7, ¿cómo resumiría lo que ha sucedido en el libro de Hechos hasta ahora? ¿Cómo se relaciona eso con 1:8?

REFLEXIONAR: ¿Qué cuestiones secundarias impiden que su lugar de adoración cumpla Hechos 1:8? ¿Cuáles son los peligros de poner en puestos de liderazgo a personas que no tienen inteligencia espiritual? ¿Qué principios aquí podrían ayudar a liberarlo para su verdadera misión? No es necesario ser diácono o diaconisa para servir a los demás. ¿Cómo puede servir a los demás esta semana?

En el libro de los Hechos, los ataques del Adversario a la iglesia (o comunidad mesiánica) se han producido en varios frentes diferentes. El diablo intentó corromper a la comunidad del mesías desde dentro e intentó una oposición directa e intimidación, vea el enlace haga clic en At Ananías y Safira mienten al Espíritu, y vea Au Los apóstoles son perseguidos. Pero estas estrategias habían fracasado. Por tanto, el gobernante de los demonios (Mateo 12:24) ahora intenta “dividir y vencer” levantando a un grupo de la Comunidad (iglesia) contra otro.

El problema: En aquellos días, habiéndose multiplicado el número de los discípulos, hubo murmuración de los helenistas contra los hebreos, porque sus viudas eran desatendidas en el servicio diario (6:1). La frase en aquellos días, se refiere a después de la segunda persecución del Capítulo 5, y la frase los discípulos es un nombre de los primeros creyentes. Los hebreos eran aquellos judíos más proclives a abrazar la cultura judía y eran en su mayoría de Judea. Los helenistas eran aquellos judíos más proclives a abrazar la cultura griega y procedían en su mayoría de la diáspora (de todo el Imperio Romano). En su mayor parte, los hebreos tendían a considerar a los helenistas como no espirituales, transigentes con la cultura griega, y los helenistas consideraban a los hebreos como tradicionalistas “santurrones”. Ya existía una sospecha natural entre los dos grupos, y el Adversario intentó aprovechar esa sospecha permanente.128

El problema en 6:1 fue porque las viudas helenistas [de habla griega] eran desatendidas en el servicio diario del fondo común. Al parecer, algunos de los judíos helenísticos creían que las viudas de los judíos hebreos recibían mejor atención. Esto no significa que la desatención fuera deliberada. Se trataría más bien de un problema de crecimiento muy rápido y de mala supervisión. Aunque las viudas siempre recibieron protección especial bajo la Ley o Torá (Deuteronomio 14:29, 24:19, 26:12), a menudo ellas fueron ignoradas bajo el gobierno farisaico (Marcos 12:38-40). Pero la comunidad mesiánica (o iglesia) en Jerusalén tenía una preocupación especial por el bienestar de sus viudas (Santiago 1:27).

La primera comunidad mesiánica (o iglesia) tomó en serio su responsabilidad de ayudar a sostener a las viudas. La definición bíblica básica de una viuda no necesariamente tiene que ver con su estado civil, sino una mujer que ya no tiene medios de sustento, y por lo tanto necesita de una protección especial (Primera de Reyes 17:12). A muchas mujeres bíblicas conocidas (como Rut, Orfa, Noemí, Abigail y Betsabé) nunca se las llamaba viudas porque presumiblemente, poseían alguna fuente de ingresos. Por lo tanto, una mujer quedaba viuda sólo si y cuando no tenía a nadie obligado a sustentarla a ella. El caso de Tamar sugiere que el hecho de estar refugiada en la casa de Onán le impidió ser llamada viuda. Ella sólo fue llamada viuda después de que dejó la casa de Judá (Génesis 38:11).129

Una mirada más cercana a los helenistas: Aquí Lucas presenta un misterioso grupo de personas llamado helenistas. Esta terminología se encuentra nuevamente en 9:29, y posiblemente también en 11:20. Dado que el término helenista (griego: jelenistés, que significa judío de habla griega, es decir, alguien que sólo puede hablar griego y no hebreo o arameo) no se encuentra en ninguna literatura anterior a Hechos, uno debe confiar en el contexto del término para ayudarnos a entender lo que Lucas quiere decir. Si uno toma todas las pistas que Lucas da en Hechos, capítulos 6 al 11, parece que usa el término “helenista” para referirse a los judíos de la diáspora o sus descendientes que habían emigrado de regreso a la tierra, viviendo en o alrededor de Jerusalén, cuyo idioma principal era el griego y que asistían a sinagogas donde adoraban en griego (como la Sinagoga de los Libertos en 6:9). Sin minimizar las diferencias que existían entre hebreos y helenistas en cuanto al cuidado de sus viudas, que era esencialmente una cuestión práctica, hay que decir que no hay nada aquí que sugiera una brecha doctrinal significativa entre los dos grupos de creyentes.130

La solución: Entonces, los Doce, actuaron como ancianos en la congregación mesiánica. Así que los doce, habiendo convocado a la congregación de los discípulos, dijeron: No es bueno que nosotros dejemos la palabra de Dios para servir a las mesas (6:2). La palabra servir del griego: diakoneo, significa asistir, servir, ministrar. Se les concedía un gran respeto a los Sabios que pertenecían a la “santa hermandad” y dividían su día en tres partes: una tercera parte para la Torá, una tercera para la oración y una tercera para las mitzvot o buenas obras (Ecl.R. 9.9.1). En este contexto, los apóstoles querían dedicar la mayor parte de su tiempo a sus dos tercios del estudio de la Torá y la oración en lugar de a cuestiones prácticas que legítimamente estaban dentro de los deberes de los discípulos. Esto no significaba que los apóstoles consideraran el ministerio a las viudas como algo inferior a ellos, simplemente no tenían el tiempo para hacerlo adecuadamente. Esto nos recuerda la selección de Moisés de hombres capaces para ayudarlo a juzgar al pueblo (vea el comentario sobre Éxodo Cy Moisés eligió hombres capaces de todo Israel). Necesitaban gente para servir las mesas, pero había requisitos que cumplir.

Ellos delegaron estas responsabilidades. Buscad más bien, hermanos, a siete varones de entre vosotros, que sean de buen testimonio, llenos del Espíritu y de sabiduría, a quienes encarguemos esta función (6:3). El número siete y las calificaciones de los candidatos son paralelos al comité de los siete “mejores hombres de la ciudad, o administradores” que representaban y gobernaban los asuntos de la ciudad. Como gobernantes, que cada ciudad tenga siete hombres que demuestren integridad y búsqueda de la justicia (Josefo Antigüedades 4.214).131 Ellos pidieron a los discípulos que nombraran a los hombres, ellos sabiamente querían la opinión de los creyentes, pero la decisión final en realidad recaía en los apóstoles.

En ninguna parte de este capítulo de Hechos se llama a estos hombres diáconos, pero más tarde, cuando la Comunidad Mesiánica creció y los gentiles entraron a la Iglesia, estos hombres fueron llamados diáconos (en griego diakonos o shammash en hebreo); como se lee en Primera Timoteo 3:8; y de la misma manera, sus esposas (o mujeres) también servían como diaconisas (Primera Timoteo 3:11). Febe era una diaconisa (diakonos en griego) de la iglesia o comunidad del Mesías en Cencrea, vea la recomendación del apóstol Pablo en Romanos 16:1. La palabra diácono simplemente significa siervo, y esos hombres ciertamente eran siervos. Podrían reclamar la promesa de servicio fiel que Pablo hace específicamente a los diáconos en Primera Timoteo 3:13: Porque los que ejerzan bien el diaconado, ganan para sí un grado honroso, y mucha confianza en la fe que es en Cristo Jesús.

Los apóstoles dijeron: nosotros nos dedicaremos a la oración y al ministerio de la palabra (6:4), en realidad la oración y el servicio de la Palabra son inseparables. Los rabinos mesiánicos, pastores y maestros de la Palabra deben impregnar su enseñanza y predicación en oración, o sus mensajes serán superficiales y secos. Deben orar constantemente para que su pueblo aplique las verdades que les enseñan. Los hombres y mujeres de ADONAI también deben orar para que sean un canal puro a través del cual pueda fluir la verdad de Dios.

El mayor proclamador de la Palabra de Dios que jamás haya existido, Pablo, fue un hombre dedicado a la oración. Él aseguró a la iglesia en Roma: Dios, al cual sirvo en mi espíritu en el evangelio de su Hijo, me es testigo de cómo incesantemente hago memoria de vosotros siempre en mis oraciones, rogando que de algún modo sea posible, ahora por fin, tener un próspero viaje para ir a vosotros en la voluntad de Dios (Romanos 1:9-10). Él le dijo a la iglesia en Éfeso: Por esta causa también yo, habiendo oído de vuestra fe en el Señor Jesús, y de vuestro amor para con todos los santos, no ceso de dar gracias por vosotros, haciendo memoria de vosotros en mis oraciones (Efesios 1:15-16). A la iglesia de Filipos escribió: Doy gracias a mi Dios siempre que me acuerdo de vosotros, siempre en todas mis oraciones rogando con gozo por todos vosotros, por vuestra comunión en el evangelio, desde el primer día hasta ahora (Filipenses 1:3-5). Pablo también oraba constantemente por la iglesia de los Colosenses: Por lo cual también nosotros, desde el día que lo oímos, no cesamos de orar por vosotros, y de pedir que seáis llenos del conocimiento de su voluntad en toda sabiduría e inteligencia espiritual, para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de Dios (Colosenses 1:9-10).

Pablo también sirvió como un gran modelo del compromiso con la Palabra. En su palabras de despedida a los ancianos de Éfeso, dijo: Vosotros sabéis cómo me he comportado entre vosotros todo el tiempo, desde el primer día que entré en Asia, sirviendo al Señor con toda humildad, y con muchas lágrimas, y pruebas que me han venido por las asechanzas de los judíos; y cómo nada que fuese útil he rehuido de anunciaros y enseñaros, públicamente y por las casas, testificando a judíos y a gentiles acerca del arrepentimiento para con Dios, y de la fe en nuestro Señor Jesucristo (20:18-21).

Hechos 19:9-10 describe el ministerio de Pablo en Éfeso: Y entrando Pablo en la sinagoga, habló con denuedo por espacio de tres meses, discutiendo y persuadiendo acerca del reino de Dios. Pero endureciéndose algunos y no creyendo, maldiciendo el Camino delante de la multitud, se apartó Pablo de ellos y separó a los discípulos, discutiendo cada día en la escuela de uno llamado Tiranno. Así continuó por espacio de dos años, de manera que todos los que habitaban en Asia, judíos y griegos, oyeron la palabra del Señor Jesús. Encarcelado en Roma, la gente acudía a él en gran número: y habiéndole señalado un día, vinieron a él muchos a la posada, a los cuales les declaraba y les testificaba el reino de Dios desde la mañana hasta la tarde, persuadiéndoles acerca de Jesús, tanto por la ley de Moisés como por los profetas (Hechos 28:23).132

Y lo dicho fue del agrado de toda la congregación, y escogieron a Esteban, varón lleno de fe y del Espíritu Santo, y a Felipe, a Prócoro, a Nicanor, a Timón, a Pármenas y a Nicolás, prosélito de Antioquía, a quienes presentaron delante de los apóstoles, y después de orar, les impusieron las manos (6:5-6). Esteban del griego: Stephanos, significa corona. Lo dicho de que los apóstoles se dedicarían a la oración y ministrar la Palabra agradó a todos y eligieron a Esteban un hombre lleno de fe y controlado por el Ruaj HaKodesh, y a Felipe el evangelista (Capítulo 8). No se sabe nada definitivo acerca de los cinco hombres restantes: Prócoro, Nicanor, Timón, Parmenas y Nicolás todos judíos de la diáspora, por lo que no se les podía acusar de favoritismo contra las viudas judías de habla griega (6:5). Una vez más, vemos las habilidades literarias de Lucas cuando presenta sutilmente a dos figuras principales, Esteban y Felipe, quienes pronto figurarán de manera significativa en la historia, tal como lo había hecho antes con Bernabé (4:36), y pronto lo hará con Saulo (7:58). Existe abundante evidencia sobre los residentes de Jerusalén que emigraron de la diáspora (2:5). Según el número de lápidas con inscripciones griegas descubiertas, se estima que el número de residentes de la ciudad, de habla griega oscilaba entre el diez y el veinte por ciento de la población total.

Nosotros deberíamos considerar como un privilegio servir al Señor de estas maneras básicas y prácticas, en lugar de verlo como una carga. No es necesario ser diácono o diaconisa para servir a los demás, y nunca debe usar eso como excusa. Aparte de la cruz, Jesús mostró la máxima medida de amor simplemente lavando los pies de sus apóstoles (Juan 13:1-5).

Pusieron a estos hombres delante de ellos; y después de orar, les imponían las manos (hebreo: s’mikhah), confiriéndoles los deberes y privilegios de su oficio de la manera tradicional judía (6:6). El primer acto de los apóstoles fue orar. La práctica de la imposición de manos, originalmente, era parte del ritual de los sacrificios llevados al Tabernáculo, y más tarde al Templo (Levítico 1:4, 3:3, 4:15 y 8:14ss). La Ley Oral interpretó el texto bíblico en el sentido de que el individuo debía presionar ambas manos con todas sus fuerzas sobre la cabeza del animal que iba a ser ofrecido (Betza 2:4, Men. 9:7ss, Templo 3:4, Kel. 1:8, Meg. 16b). En su forma básica, el rito parece haber representado un derramamiento del propio ser en otro. En el período del Segundo Templo, la práctica se convirtió en un medio de ordenación rabínica.133

El principio: Un principio vital se ilustra en este incidente que es de urgente importancia para las congregaciones mesiánicas e iglesias de hoy. Es que ADONAI llama a todo Su pueblo al ministerio, que Él llama a diferentes personas a diferentes ministerios, y que los llamados a la oración y al ministerio de la palabra nunca se pueden permitir distraerse de sus prioridades.134

Esta es una declaración de transición que proporciona pistas razonables para el desarrollo del material de Lucas que sigue, que son los comienzos de la Comunidad Mesiánica en Jerusalén.

El resultado: debido a que la situación se manejó con sabiduría y sensibilidad hacia aquellos que se sintieron ofendidos, se desactivó un tema potencialmente divisivo y el evangelio continuó avanzando. Y la palabra de Dios crecía, y el número de los discípulos se multiplicaba grandemente en Jerusalén, y un gran número de los sacerdotes obedecían a la fe (6:7). Los dos verbos difundir y multiplicar están en tiempo imperfecto, lo que significa que la difusión de la palabra y el crecimiento fueron continuos. La estrategia del diablo fracasó. Intentó dividir a la congregación mesiánica y no funcionó. Pero la segunda estrategia del diablo también fracasó. Los apóstoles no se distrajeron del enfoque del ministerio que ADONAI tenía para ellos.135

…y un gran número de los sacerdotes obedecían a la fe (6:7b). Aunque la mayoría de los sacerdotes (cohanim) se presentan en el Brit Hadashah como opositores a Yeshua, esto no era cierto para todos. Había hombres santos en el sacerdocio como Zacarías, el padre de Juan el Bautista (vea el comentario sobre La vida de Cristo Ao El Nacimiento de Juan el Bautista). Existe la teoría de que los cohanim que llegaron a creer en Yeshua no eran parte de la estructura o establishment sino, aquellos que se habían desencantado y se habían ido a unirse a los esenios en Qumran. El razonamiento es que la teología de los Rollos del Mar Muerto está mucho más cerca del Nuevo Pacto que la de los fariseos que controlaban el sacerdocio de Jerusalén. Pero esa teoría carece de evidencia del Brit Hadashah para apoyarlo. Además, dado que la actividad de los creyentes mesiánicos aún no se había extendido a otras partes de la Tierra, parece más probable que los cohanim que se volvieron obedientes a la fe en ese momento, fueran aquellos que se ocupaban de estar en Jerusalén, en lugar de retirarse al desierto. Porque Dios incluso puede llegar a los corazones de personas cuyos vínculos y asociaciones se podría esperar que los llevaran a oponerse al Mesías. Cuando llegamos a 15:5 se nos informa sobre los cohanim creyentes.136

2024-11-05T12:36:55+00:000 Comments

Au – Los apóstoles son perseguidos 5: 17-42

Los apóstoles son perseguidos
5: 17-42

31-33 dC
Los acontecimientos de Hechos 3-8 transcurren con creciente preocupación por parte de los judíos, y especialmente de las autoridades judías en Jerusalén. La creciente tensión dio lugar a una acción de vigilancia contra Esteban, y luego a un esfuerzo autorizado bajo el mando del rabino Saulo para perturbar y destruir ese nuevo movimiento mesiánico, lo que implicó persecución e incluso la muerte de los creyentes. La persecución llevó a varios creyentes como Felipe a ir a Samaria y dar testimonio de Yeshua.

Los apóstoles son perseguidos ESCUDRIÑAR: ¿Cómo explica los celos de los saduceos? ¿De qué acusaron a los apóstoles en el versículo 28? ¿Es esto diferente de lo que habían dicho en 4:2? ¿Cómo pudieron pasar por alto el impacto de esos milagros? ¿Qué cosas en la respuesta de Pedro (5:29-32) despertarían su furia? ¿Por qué Pedro es tan directo (4:1-12, 5:19-20)? Antes de Jesús, hubo muchos fanáticos judíos que lideraron rebeliones contra Roma, ¿cuál es el punto de Gamaliel al recordar a estos líderes? ¿Cuál fue su motivación? ¿Cree que la declaración de Pedro en 5:29 y 4:19 pudo haber influido en Gamaliel? ¿Por qué adoptó Gamaliel una actitud de “esperar y ver”? Los azotes a veces resultaban en la muerte (vea el comentario en La Vida de Cristo, Lr Los soldados se burlan de Jesús). ¿Cómo cree que se sintieron los apóstoles cuando recibieron esta sentencia? ¿Qué muestra la respuesta real de los apóstoles acerca de ellos en los versículos 41-42?

REFLEXIONAR: ¿Cuál es la máxima autoridad en su vida? ¿Cuándo esto le crea problemas? ¿Qué puede hacer para superar estos problemas? ¿Cómo cree que se sentiría si lo enviaran a la cárcel por lo que cree? ¿Cómo se sentiría su familia? ¿Qué le haría esto a usted? ¿Cómo se relaciona el gozo en el sufrimiento con la autoridad máxima suya? ¿Cómo ha experimentado que Dios lo libera para honrarlo a Él más plenamente? ¿Cómo explica por qué YHVH a veces lo libra de las dificultades, pero otras veces le permite pasar por ellas? ¿Quiénes son algunas de las personas que han tenido la mayor influencia en su vida, y qué es lo que más respeta de ellas? Nombre uno o dos de los mejores consejos piadosos que haya recibido. ¿Qué le permitió Dios hacer (o qué lo protegió de hacer) como resultado de saber y aplicar esto?

El conflicto entre los justos de la comunidad mesiánica (iglesia) y el Sanedrín se intensificó constantemente (vea el comentario sobre La Vida de Cristo, Ei El Gran Sanedrín). Ante el creciente éxito, hay una mayor respuesta por parte de las autoridades judías. Al principio, el Consejo sólo escuchó, advirtió y liberó a Pedro y a Juan (vea Ar Pedro y Juan se presentan ante el Sanedrín), pero ahora estaban listos para imponer la pena de muerte (5:33), y sus intenciones sanguinarias sólo fueron frustradas por el sabio consejo de un fariseo (5:34-39). Los apóstoles fueron nuevamente liberados, pero esta vez el Concilio los hizo azotar antes de soltarlos (5:40). El conflicto se intensificaría aún más con la lapidación de Esteban (6:8 a 8:2), y la consiguiente persecución de los judíos helenísticos, expulsándolos de Jerusalén (8:1).

El arresto: La segunda persecución de la comunidad mesiánica es nuevamente iniciada por los saduceos. Mientras que los fariseos lideraron la oposición a Yeshua en los evangelios, los saduceos fueron los principales oponentes de la iglesia primitiva (comunidad mesiánica).116 Caifás fue nombrado sumo sacerdote por los romanos y actuó como presidente del Sanedrín, pero su suegro Anás era el verdadero poder detrás de escena (vea el comentario sobre La vida de Cristo Li Anás interroga a Jesús). Pero levantándose el sumo sacerdote, y todos los que estaban con él (de la secta de los saduceos), se llenaron de envidia, y echando mano a los apóstoles, los metieron en la cárcel pública (5:17-18). Caifás era el sumo sacerdote (kohen gadol), y se llenaron de envidia o celo religioso (griego: zelos). El liderazgo de Caifás se encontraba en un estado frágil, religiosa y políticamente, ya que también existía el peligro de que la agitación creada en la ciudad, hiciera que los romanos tomaran medidas. Obligados por la gravedad de la situación, encarcelaron a los apóstoles en una cárcel pública.

El encarcelamiento: Pero un ángel del Señor abrió de noche las puertas de la cárcel y sacándolos, dijo: Id, y puestos en pie en el templo, anunciad al pueblo todas las palabras de esta Vida (5:19-20). Quizás haya un poco de ironía aquí porque los saduceos no creían en los ángeles. Esta es la primera de varias intervenciones angelicales en el libro de los Hechos (8:26, 12:7-10 y 23). El mensaje que los apóstoles debían predicar era el evangelio que conduce a la Vida, la vida del Mesías resucitado (Filipenses 2:16; 1 Juan 1:1-4), precisamente lo que los saduceos negaban. Ellos no sólo fueron liberados, sino que fueron liberados con un propósito: Y al oírlo, entraron al amanecer en el templo, y enseñaban. Entonces se presentó el sumo sacerdote y los que estaban con él, y convocaron al Sanedrín, esto es, el Consejo Supremo de los hijos de Israel, y enviaron a la prisión para traerlos (5:21). Cuando la multitud se reunía para observar el sacrificio de la mañana, ellos comenzaron a enseñar. Obviamente los apóstoles no estaban preocupados por su seguridad ya que regresaron al mismo lugar donde ellos habían sido arrestados.117 Al mismo tiempo que Pedro y los apóstoles comenzaron a predicar en el pórtico de Salomón, entonces el Sanedrín comenzó a reunirse.

Ahora la escena cambia a la cámara del Consejo del Sanedrín que se había reunido para su sesión matutina. El primer punto de su agenda fue el interrogatorio de los apóstoles. Cuando llegaron, Caifás, el kohen gadol, y los que estaban con él, convocaron al Consejo Supremo de los hijos de Israel (Lucas le da al Sanedrín todo el peso de su título aquí). En la época de Herodes Agripa, la mayoría de los miembros del Sanedrín eran saduceos. Por lo tanto, tratando de suprimir el evangelio, el Sanedrín utilizaría dos criterios saduceos. Primero, los apóstoles proclamaban la resurrección del Mesías, lo que los saduceos negaban. Y, en segundo lugar, proclamaron que: “hay otro rey: Jesús (Yeshua)” (17:7b), “otro rey”, lo cual, de ser cierto (compárese con Juan 18:33-38), sería políticamente subversivo, además de destructivo de la acogedora relación de trabajo que tuvieron los saduceos con los ocupantes romanos.118

Enviaron a los guardias del templo a la prisión para traerlos. Pero cuando los alguaciles se presentaron, no los hallaron en la cárcel; y después de regresar, informaron, diciendo: Hemos hallado la prisión cerrada con toda seguridad, y a los carceleros de pie ante las puertas, pero cuando abrimos, no hallamos a nadie dentro (5:22-23). Los guardias regresaron apresuradamente con la humillante noticia, entonces, el Consejo se quedó atónito.

No es de extrañar que cuando oyeron estas palabras, tanto el jefe de la guardia del templo como los principales sacerdotes, se preguntaban en qué iría a parar esto (5:24). Finalmente vino alguien y les dijo: Mirad, los varones que pusisteis en la cárcel están en el templo enseñando al pueblo (5:25). El jefe de la guardia del templo (ó sagan), decidió que sería mejor que se ocupara personalmente de este asunto. Después de todo, este jefe era el segundo en rango después del propio Caifás y, en última instancia, el responsable del orden en los terrenos del Templo. Una circunstancia inusual como esta sería mejor no dejarla en manos de funcionarios menores.119 Entonces se fue con los oficiales y trajo a todos los apóstoles, pero no por la fuerza: Entonces el jefe de la guardia fue con los alguaciles y los condujo sin violencia, porque temían que el pueblo pudiera apedrearlos (5:26). Los miembros del Concilio estaban ansiosos por recurrir a las medidas más drásticas en el trato con los apóstoles, pero ellos tenían buena reputación entre el pueblo. Uno no debería pasar por alto la ironía de todo este fiasco y debería alabar a Dios, quien es más grande incluso que el máximo órgano legislativo del gobierno y que ya había planeado la protección de Sus apóstoles.

El interrogatorio: La escena vuelve a cambiar, esta vez a la Estoa Real, donde se reunía el Sanedrín. Esta segunda comparecencia ante el Concilio fue drásticamente diferente de la primera que solo involucró a dos apóstoles (vea Ar Pedro y Juan ante el Sanedrín). Aquí, todos los apóstoles comparecieron ante el Consejo. Luego de conducirlos, los presentaron en el Sanedrín; y el sumo sacerdote los interrogó, diciendo: ¿No os mandamos estrictamente que no enseñarais en este nombre? He aquí, habéis llenado a Jerusalén de vuestra enseñanza, y queréis traer sobre nosotros la sangre de este hombre (5:27-28). La palabra presentaron proviene del griego: estesan. Éste era el procedimiento habitual, con los acusados de pie y los jueces sentados. Entonces Caifás, el kohen gadol, comenzó el interrogatorio aun negándose a decir el nombre de Yeshua. Esta vez se presentaron cargos formales.

Caifás exclamó: ¡Pero tú quieres traer sobre nosotros la sangre de este hombre! (5:28b) Este fue un cargo muy serio. Era una expresión para la acusación de asesinato y exigía la muerte (griego: diacherizo que significa matar con las propias manos) del culpable. Era como si Caifás estuviera diciendo: “Estás tratando de que nos maten por ser responsables de la muerte de este hombre“. Lejos de retroceder, Pedro intensificó su acusación. Anteriormente había dicho que las autoridades judías eran responsables de la muerte de Yeshua (2:23-24 y 36, 3:13-15, 4:8-12, 7:51-53, 13:27-29, 23:6-9, 24:1 y versículos 29ss). Ahora insistió en que eran tan culpables como si lo hubieran matado con sus propias manos. 120

Lo que los dirigentes judíos negaban, era exactamente lo que alguna vez ellos afirmaron. Viendo Pilato que nada se lograba, sino que más bien se estaba formando un alboroto, tomó agua y se lavó las manos delante del gentío, diciendo: ¡Inocente soy de la sangre de éste! ¡Allá vosotros! Y todo el pueblo respondió y dijo: ¡Su sangre sea sobre nosotros y sobre nuestros descendientes! (Mateo 27:24-25). Caifás y los otros saduceos entendieron claramente el punto. Yeshua era realmente el Mesías y ellos eran culpables de derramar Su sangre. A medida que avanzaba el interrogatorio, de repente las cosas cambiaron: los apóstoles se convirtieron en jueces y el Concilio en acusados. 121

La respuesta: Sin embargo, Pedro no estaba tratando de matar al Consejo, sino de salvarlos. Como en el primer juicio, su respuesta fue más un testimonio que una defensa. Pedro y los apóstoles recordaron a Caifás y al Sanedrín que continuarían predicando en el nombre de Jesús. Antes, en el capítulo 4, Pedro y Juan, les dijeron: Juzgad si es justo delante de Dios obedecer a vosotros antes que a Dios; porque nosotros no podemos callar lo que hemos visto y oído (4:19-20). Y el Sanedrín debería haberse dado cuenta de que cuando los apóstoles fueron liberados por primera vez, no tuvieron otra opción que continuar predicando en el nombre de Yeshua. Ahora Pedro y los apóstoles, dijeron: Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres (5:29). Era una necesidad moral desobedecer las órdenes del Sanedrín porque sus órdenes violaban un principio eterno. Los creyentes deben estar sujetos a las autoridades gobernantes (Romanos 13:1-7; Primera de Pedro 2:13-17), pero cuando el gobierno civil nos pide que violemos las claras enseñanzas de las Escrituras, la obligación del creyente es la desobediencia, porque somos responsables ante una autoridad superior.

Pedro y los apóstoles no negaron los cargos; de hecho, se esforzaron por afirmar los cargos en su propia contra: El Dios de nuestros padres resucitó a Jesús, a quien vosotros matasteis colgándolo en un madero. A éste exaltó Dios con su diestra como Príncipe y Salvador, para dar a Israel arrepentimiento y perdón de pecados (5:30-31). Entonces Pedro acusa al Sanedrín de asesinar al Mesías, y de asesinarlo de la peor manera, colgado de un árbol, literalmente la palabra griega para madera (Deuteronomio 21:22-23; Gálatas 3:13). Pero en contraste con asesinarlo, ADONAI lo levantó. Aquí Pedro ofreció la salvación a las mismas personas que habían crucificado a Jesús; los apóstoles aprovecharon la oportunidad brindada en el tribunal para predicar el evangelio a sus mismos acusadores y jueces.122 Para saber más acerca del arrepentimiento de Israel y perdón de pecados, vea el comentario sobre Apocalipsis EvLa base para la Segunda Venida de Jesucristo. Vea también la acusación en Hechos 3:14-15. Como Salvador en Salmo 27:1; 26:1 LXX.

Y nosotros somos testigos de estas cosas, y también el Espíritu Santo, el cual ha dado Dios a los que le obedecen (5:32). Esas fueron palabras duras para los gobernantes de Israel, y ellos respondieron en consecuencia.

Sólo hay tres respuestas posibles a la predicación convincente: hostilidad violenta, indecisión tolerante o aceptación salvadora. Este pasaje los ilustra a todos.

Hostilidad violenta: Los líderes judíos no estaban en lo más mínimo interesados en ese llamado. Pero ellos al oír esto, fueron cortados hasta el corazón y estaban por tomar el acuerdo de matarlos (5:33); cortados hasta el corazón, del griego: dieprionto, que significa aserrado en dos. Cuando Pedro dijo estas mismas palabras a los judíos en Shavuot el resultado fue la convicción (vea An Pedro habla a la multitud de Shavuot). Pero aquí, el resultado fue la ira, ellos estaban tan enojados que querían matarlos, tal como habían hecho con Jesús, sin seguir sus propias reglas (vea el comentario sobre La Vida de Cristo Lh – Las Leyes del Gran Sanedrín sobre los Juicios). Pero había un problema. La desobediencia a una orden del Sanedrín no exigía la pena de muerte. Ellos se estaban convirtiendo en una turba, como veremos en la lapidación de Esteban en el Capítulo 7. Pero donde nadie intercedería por Esteban; sin embargo, los apóstoles encontraron ayuda de una fuente inusual.

Indecisión tolerante: Entonces se levantó en el Sanedrín cierto fariseo de nombre Gamaliel, maestro de la ley, respetado por todo el pueblo, y mandó sacar fuera a los hombres por un momento (5:34). Este fariseo llamado Gamaliel era maestro de la Ley, del griego: nomo didaskalos, que significa experto en la Torá y que daba opiniones teológicas expertas e interpretaba la Torá de acuerdo con la Ley Oral. Eran estos expertos de la Torá con quienes Yeshua estaba interactuando cuando tenía doce años. En los escritos judíos se le llama Rabban (nuestro maestro), que es un título más alto que el de rabino (mi maestro). Él era discípulo y nieto del rabino Hillel (o Hilel), y en aquella época Gamaliel era el líder de la escuela de Hillel (más liberal), en oposición a la escuela de Shamai (más conservadora). En la historia del judaísmo, sólo siete rabinos han tenido el título de Rabán, y Gamaliel fue el primero de estos siete. Él fue el maestro de Saulo (22:3). Históricamente, mientras estuvo a cargo hubo un gran respeto por la Torá, pero las cosas cambiaron cuando él murió. Los rabinos enseñan que desde que murió Rabban el mayor, no ha habido más reverencia por la Torá. Gamaliel respetado en el Sanedrín, se hizo cargo del interrogatorio de Pedro. Obviamente tenía autoridad suficiente para ordenar a los apóstoles que salieran de la cámara por un momento (5:34), especialmente porque los fariseos estaban en minoría en el Concilio.

Luego Gamaliel se dirigió al Sanedrín y les dijo: Varones israelitas, mirad por vosotros qué vais a hacer a estos hombres (5:34). Luego expone su caso: Porque antes de estos días se levantó Teudas, diciendo que era alguien; al cual se unió un número como de cuatrocientos hombres; pero fue muerto, y todos los que le obedecían fueron dispersados y reducidos a nada (5:35). Tengan cuidado y no tomen ninguna acción precipitada. Pero ¿cuál fue su motivo para intervenir? Los fariseos eran los principales líderes en la oposición contra el Mesías, y aunque en ese momento eran la principal oposición a los apóstoles, los fariseos sólo se unirían a ellos en su oposición a Esteban. Pero llegados a este punto, los fariseos, liderados por Gamaliel, avanzaban más lentamente. Además, los saduceos instigaron esta acción contra los apóstoles principalmente porque ellos estaban enojados por la predicación de la resurrección, que afirmaban los fariseos. Por lo tanto, los fariseos, aunque pocos en número, no estaban dispuestos a unirse a los saduceos debido a un tema en el que ya no estaban de acuerdo. Por último, pero no menos importante, Gamaliel era fariseo y no estaba dispuesto a dejar que los saduceos lideraran en este tema, ni él iba a seguir su ejemplo.

Para exponer su punto, Gamaliel citó dos ejemplos de pretendientes mesiánicos en la historia judía reciente: el de Teudas, y después de éste, se levantó Judas el galileo, en los días del censo, e incitó al pueblo tras sí. También él pereció, y todos los que le obedecían fueron dispersados (5:37), el censo de César Augusto (vea el comentario sobre La vida de Cristo Aq El Nacimiento de Jesús). Durante el primer siglo, hubo no menos de diez pretendientes mesiánicos. Estos pretendientes judíos reunieron un gran número de seguidores con promesas de redención y liberación física. Siguieron decepción, tristeza y, a veces, la destrucción total. Gamaliel dio su consejo, habiendo dado esas dos razones para actuar con cautela.

Fuera de los registros del Nuevo Pacto aprendemos de Simón del Jordán Oriental, quien se coronó rey. Quemó la casa real en Jericó y las casas de los ricos, antes de morir en combate. Otro pretendiente mesiánico, “el beduino hacedor de maravillas”, prometió libertad al pueblo si lo seguían al desierto, pero él también fue asesinado.

Uno de los pretendientes más destacados surgió en el año 132 dC, con la misión de derrocar el yugo romano y recuperar la soberanía de Israel sobre la tierra perdida ante los romanos en el 70 dC. Los motivos de la revuelta se centraron en el edicto romano que prohibía la circuncisión, la construcción de una nueva ciudad sobre las ruinas de Jerusalén, llamada Aelia Capitolina y la erección del templo de Júpiter en el Monte del Templo. Akiba, el líder rabínico más destacado de la época, apodó a Bar Kojba el Mesías. Bar Kojba significa “hijo de una estrella” y algunos lo vieron proféticamente en Números 24:17: “Una estrella saldrá de Jacob; un cetro se levantará de Israel”. Sin embargo, su verdadero nombre parecía ser Bar Kosiba, que significa “hijo de un mentiroso”. Bar Kojba era un hombre físicamente fuerte que se volvió arrogante en su intento de derrocar el yugo romano y recuperar la tierra. En el campo de batalla supuestamente oró: “Por favor, ayuden a nuestros enemigos. En cuanto a nosotros, no necesitamos ninguna ayuda”. Tuvo cierto éxito durante unos tres años; e incluso se acuñaron monedas en dos de esos años que caracterizaban a la tierra como Israel independiente. Pero Bar Kojba finalmente fue derrotado en Betar; él y unos 580.000 judíos fueron asesinados por los romanos durante el levantamiento. Muchos otros fueron tomados como esclavos y enviados a Roma. El rabino Akiva fue capturado y encarcelado durante dos años antes de ser martirizado. Cuando se le preguntó por qué su rostro estaba tan brillante mientras caminaba hacia su destino inevitable, dijo: “¿Por qué no debería regocijarme? Estoy a punto de ver al Rey”. Con la Shemá en sus labios falleció.

Todos estos pretendientes fracasaron y, sin embargo, la mayor parte de los judíos desecharon al auténtico Mesías Yeshua, quien vino predicando el amor y la misericordia y buscó establecer el Reino a través de medidas espirituales y no violentas. Sus apóstoles trastornaron el mundo mediante su testimonio. Fue necesario un erudito rabino judío, Gamaliel, mentor de Pablo, quien, respecto a los apóstoles de Yeshua, dijo: Y ahora os digo: Apartaos de estos hombres y dejadlos, porque si este plan o esta obra es de los hombres, se desvanecerá. Pero si es de Dios, no podréis destruirlos; no sea que hasta seáis hallados luchando contra Dios. Y fueron persuadidos por él (5:38-39). Gamaliel simplemente expresó un sólido principio rabínico: “Cualquier reunión que sea por el bien del Cielo al final será establecida, pero cualquiera que no sea por el bien del Cielo al final no será establecida (M. Abot 4:11). Algunos se han preguntado cómo pudo Lucas saber lo que se decía dentro de los muros del Consejo. Pero hubo quienes se hicieron creyentes entre ellos ese día. Nicodemo (Juan 7:50-52, 19:38-42), José de Arimatea (Mateo 27:57-60), y para que no lo olvidemos, el alumno estrella de Gamaliel, Saulo de Tarso (22:3), estuvo presente en esta ocasión o escuchó un relato detallado del propio Gamaliel más tarde. Lucas, entonces, pudo haber obtenido la información de Pablo.123

El Espíritu Santo aquí no está haciendo una declaración teológica de la verdad, sino simplemente citando lo que dijo Gamaliel en ese momento. Era simplemente su opinión, y era una opinión equivocada. Hay religiones que han perdurado, como el mormonismo, los testigos de Jehová, el hinduismo, el budismo y la ciencia cristiana, ninguna de las cuales es de Dios, pero mira cuánto han durado. Gamaliel se equivocó y no debemos seguir su consejo.

Yeshua dejó en claro que es imposible ser neutral acerca de Él y Su mensaje: El que no está conmigo, contra Mí está, y el que conmigo no recoge, desparrama (Mateo 18:30). Además, los miembros del Consejo conocían las palabras de Elías: “¿Hasta cuándo vacilaréis entre dos opiniones” (Primera de Reyes 18:21)? Hay ocasiones en las que ser neutral significa tomar una decisión pasiva (y quizás cobarde) de rechazar la oferta de vida eterna del Mesías (vea el comentario sobre La Vida de Cristo Ms – La Seguridad Eterna del Creyente). Es significativo que el primer grupo nombrado entre los que serán arrojados sean los cobardes: Pero los cobardes, incrédulos, abominables, asesinos, inmorales, hechiceros, idólatras y todos los mentirosos tendrán su herencia en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda (Apocalipsis 21:8).124

Sin embargo, el Gran Sanedrín estuvo de acuerdo con el consejo de Gamaliel de ir despacio y no matar a los apóstoles como querían hacer los saduceos. Luego llamaron a los apóstoles y los hicieron azotar (Deuteronomio 25:2-3). Los sabios redujeron el número de azotes de 40 cuarenta a 39 treinta y nueve como medida contra el exceso de cuarenta por error, e instituyeron un examen físico para verificar que la persona no moriría ni siquiera con ese número (Marcos 3:10-11).125 En consecuencia, la flagelación no fue un asunto trivial. Estaba destinado a ser una lección seria para los delincuentes. Esta fue la primera vez que los apóstoles sufrieron físicamente por su fe y no sería la última. No estaban ellos dispuesto a dar el paso radical de entregar a los apóstoles a los romanos. El Sanedrín: llamando a los apóstoles, los azotaron y les ordenaron que no hablaran en el nombre de Jesús, y los soltaron (5:40). Pero cualesquiera que sean los azotes o el trato vergonzoso que les dio el Gran Sanedrín, no sirvió de nada. ¡Los apóstoles no dejaron de predicar ni un momento (y nosotros tampoco deberíamos)!

Aceptación de salvación: Desde la perspectiva de los apóstoles, el hecho de que estuvieran siendo perseguidos era prueba de que estaban sirviendo a Dios. Salieron ellos pues de la presencia del Sanedrín, regocijándose porque habían sido tenidos por dignos de padecer afrenta por causa del nombre. Y cada día, en el templo y de casa en casa, no cesaban de enseñar y proclamar que Jesús es el Mesías (5:41-42); vea Mateo 5:10-12; Lucas 6:22-23. En Filipenses 2:9-11 dice: Por lo cual Dios también lo exaltó hasta lo sumo, y le dio el nombre que es sobre todo nombre; para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra, y toda lengua confiese que Jesús el Mesías es el Señor para gloria de Dios Padre.

El gran predicador Charles Spurgeon (1834-1892) habló de esta clase de corazón valiente: “Ahora, exhorto a cada cristiano aquí a hablar con valentía en el nombre de Cristo, según tenga la oportunidad; y sobre todo cuidar esta tendencia de nuestra carne a tener miedo; lo que lleva prácticamente a sacarnos del apuro fácilmente y a salvarnos de problemas. Pero no temáis: sed valientes por Cristo. Vive valientemente por Aquel que murió con tanto amor por ti”.126

Señor, Tu Palabra dice: …pero el conocimiento envanece, en tanto que el amor edifica. Si alguno se imagina que sabe algo, aún no lo sabe como debe saberlo. Pero si alguno ama a Dios, ha sido conocido por Él (Primera Corintios 8:1b-3). Que no justifique Tu Palabra para aprender cosas y acumular conocimientos, sino para conocerte y aumentar mi amor por Ti. Quiero el beneficio completo de lo que Tu Palabra puede enseñarme. Que nada –que nada– se desperdicie.127

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2024-11-05T12:27:48+00:000 Comments

At – Ananías y Safira mienten al Espíritu Santo 5: 1-16

Ananías y Safira mienten al Espíritu Santo
5: 1-16

31-33 dC
Los acontecimientos de Hechos 3-8 transcurren con creciente preocupación por parte de los judíos, y especialmente de las autoridades judías en Jerusalén. La creciente tensión dio lugar a una acción de vigilancia contra Esteban, y luego a un esfuerzo autorizado bajo el mando del rabino Saulo para perturbar y destruir ese nuevo movimiento mesiánico, lo que implicó persecución e incluso la muerte de los creyentes. La persecución llevó a varios creyentes como Felipe a ir a Samaria y dar testimonio de Yeshua.

Ananías y Safira mienten al Espíritu Santo ESCUDRIÑAR: ¿Se les requirió a Ananías y Safira que vendieran la tierra y pusieran todo el dinero a los pies de los apóstoles? ¿Por qué si o por qué no? ¿Cuál fue su pecado? ¿Qué ganarían Ananías y Safira mintiendo sobre el dinero que recibieron? ¿Cómo se relaciona su respuesta con 4:32-37? Dado que todos somos pecadores (Romanos 3:23), ¿por qué cree que HaShem castigó tan severamente a Ananías y Safira? ¿Cómo podría ser útil a Dios ese gran temor en ese momento? ¿Cómo llevó este incidente a la respuesta del pueblo en los versículos 13 y 14?

REFLEXIONAR: ¿Cuándo ha tratado usted de “engañar” a Dios? ¿Qué pasó? ¿Cómo ha experimentado el temor del Señor? ¿Cómo ha influido eso en su vida?

El castigo divino debe ser más severo al inicio de una nueva Dispensación.

El dios de este mundo (Segunda Corintios 4:4) había fracasado estrepitosamente en su intento de silenciar el testimonio de la comunidad mesiánica. Sin embargo, el enemigo de las almas nunca se rinde; simplemente cambia su estrategia. Su primer enfoque fue atacar a la comunidad desde el exterior, esperando que los arrestos y las amenazas asustaran a los líderes. Cuando eso falló, el Adversario decidió atacar a la comunidad desde adentro y utilizar a personas que formaban parte de esa comunidad. Debemos afrontar el hecho de que Satanás es un enemigo astuto. Si no tiene éxito como león rugiente (Primera de Pedro 5:8), entonces ataca nuevamente como serpiente engañadora o ángel de luz (Segunda Corintios 11:3 y 13-14). El diablo es a la vez asesino y mentiroso (Juan 8:44), y los creyentes de todas las épocas deben estar preparados para ambos ataques. 100

Escena uno: Si Bernabé fue un ejemplo positivo de cómo las comunidades compartían, la historia de Ananías y Safira ofrece un marcado contraste. Después de ver la gran generosidad de Bernabé y lo bien que lo respetaban, Ananías y Safira decidieron que querían algo del mismo respeto. Para ganarse una reputación a la que no tenían derecho, dijeron una mentira descarada. Su motivo al dar no era aliviar a los pobres, sino engordar su propio ego. Su gran pecado tuvo sus raíces en el orgullo. Esto también fue una expresión de la incapacidad o falta de voluntad de la pareja para amar a ADONAI: Amarás a YHVH tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, y con toda tu fuerza (Deuteronomio 6:5).101

Entonces cierto varón de nombre Ananías, con Safira su mujer, vendió una propiedad; pero sustrajo parte del precio, sabiéndolo también la mujer; y trayendo una parte, la puso a los pies de los apóstoles (5:1-2). El nombre Ananías, una versión helenizada del nombre hebreo Hananiah que significa que Dios ha mostrado favor, un nombre muy común en el período del Segundo Templo. El nombre de su esposa, Safira, una versión helenizada del nombre hebreo Shfirah que significa hermosa, era usado casi exclusivamente entre los ricos de Jerusalén. Tomando la iniciativa, se quedó con parte del dinero. La palabra retenido (griego: nosifizo ó enosphisato) es la misma palabra en la Septuaginta (la traducción griega del TaNaJ) cuando Acán retuvo algunas de las cosas que eran jerem, o dedicadas a la destrucción en Josué 7:1. Significa robar (Tito 2:10). Entonces, Acán lo fue para Josué, como Ananías y Safira lo fueron para la comunidad mesiánica. Y así como el engaño de Acán intentó interrumpir el plan de Dios bajo el liderazgo de Josué, el engaño de Ananías y Safira intentó interrumpir el plan de Dios bajo el liderazgo de los apóstoles.

Ananías se quedó con parte de las ganancias con pleno conocimiento de su esposa, claramente, tanto el marido como la mujer estuvieron involucrados juntos en el engaño. Pero Ananías tomó la iniciativa, y cuando llegó el momento de dar algo, fue solo (5:2b). El esperaban elogios y respeto por su generoso regalo, pero en cambio él fue reprendido.

Hoy el espíritu de Ananías está vivo y activo en muchas de nuestras iglesias y congregaciones mesiánicas. Demasiados quieren ser considerados “espirituales” mientras se niegan a pagar cualquier tipo de precio por su servicio a ADONAI.102

Escena Dos: Y le dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieras al Espíritu Santo, y sustrajeras del precio de la propiedad? (5:3). ADONAI claramente le dio a Pedro el don del discernimiento (Primera Corintios 2:14 y 12:10), y así como el Espíritu de Dios inspiró a Eliseo a ver la deshonestidad de sus siervos al aceptar dinero de Naamán el leproso (Segunda Reyes 5:26), Pedro supo que el gesto de Ananías era mentira. Él dijo: Ananías, ¿por qué llenó Satanás para…? Esta es la única referencia al Adversario en el libro de los Hechos. La Serpiente había llenado el corazón de Ananías, así como había llenado el corazón de Judas (Lucas 22:5).

Reteniéndola, ¿acaso no quedaba siendo tuya? Y una vez vendida, ¿no estaba a tu disposición? ¿Por qué pusiste este asunto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios (5:4). Mientras no se vendió, era suyo, ¿no? No había obligación de vender. Y ya vendido, ¿no estaba a tu disposición? Pedro reconoce libremente que la tierra y su valor pertenecían únicamente a Ananías. Era completamente libre de hacer lo que quisiera. Su pecado no fue retener el dinero, pero una vez prometido se convirtió en un asunto totalmente diferente. El principio bíblico con respecto a las ofrendas voluntarias dice claramente: Mas si te abstienes de formular votos, esto no será en ti pecado. Pero lo que salga de tus labios, lo guardarás y cumplirás, conforme prometiste a YHVH tu Dios, pagando la ofrenda voluntaria que prometiste con tu boca (Deuteronomio 23:22-24). Por eso, Pedro preguntó retóricamente: ¿Por qué pusiste este asunto en tu corazón? Satanás no le obligó a hacerlo; Ananías eligió hacerlo por su orgullo, vea 5:3. El diablo puede influir en la vida de un creyente, pero él no puede pecar por usted. Ananías tuvo que concebirlo en su corazón.103 Él no les había mentido a los hombres sino a Dios. Debemos tener en cuenta que su pecado no fue robarle dinero a Dios, sino mentir y robar Su gloria. El deseo de reconocimiento fue concebido en sus corazones, y cuando ese pecado creció plenamente, dio a luz a la muerte (Santiago 1:15). Es importante, sin embargo, recordar que Ananías era culpable de ser orgulloso y mentir, no de blasfemia.

Una vez más, la Biblia declara que el Espíritu Santo es Dios, no simplemente una forma de electricidad como enseñan los Testigos de Jehová. En el versículo 3 la Biblia dice que Ananías le mintió al Espíritu Santo, y en el versículo 4 la Biblia dice que Ananías le mintió a Dios. Por lo tanto, el Espíritu Santo es Dios.

Escena Tres: Al oír estas palabras, Ananías cayó y expiró. Y vino un gran temor sobre todos los que lo oían (5:5). Pedro se quedó sin palabras, no pronunció una sentencia de muerte sobre Ananías, simplemente lo confrontó con su pecado. Pedro probablemente se sorprendió más que nadie cuando Ananías cayó muerto. La severidad y rapidez del destino de Ananías nos recuerdan que Dios ve el corazón. Otro juicio repentino de muerte ocurrió cuando Uza intentó estabilizar el Arca de la Alianza (vea el comentario sobre la Vida de David, Cr – El Arca llevada a Jerusalén). En ambos casos se estaba haciendo por primera vez algo nuevo y muy honroso para ADONAI. En ambas ocasiones fue el orgullo lo que provocó la muerte. El orgullo de Uza estaba en su intento descuidado e irreverente de realizar una obra especial de Dios, a su manera. Si hubiera buscado el camino de Dios, Uza habría estado lleno de reverencia por el arca y habría sido llevada en sus varas por los hombres, como HaShem había instruido en Su Palabra. Entonces, siguiendo la Palabra de Dios, nadie habría muerto. El descuido al hacer la obra de Dios con los propios pensamientos también es orgullo. Y levantándose los jóvenes, lo amortajaron, lo sacaron y lo sepultaron (5:6). En Palestina era habitual enterrar un cadáver el mismo día de la muerte. El calor, sin duda, tuvo mucho que ver con esta costumbre; pero además, en lo que respecta a los judíos, la Torá hacia como inmunda durante siete días a cualquiera que tocara un cadáver, o incluso a quien se encontraba en una casa donde estaba un cadáver (Números 19:11 y 14).104 Entonces, los entierros a menudo eran bastante apresurados en Palestina, pero no tan apresurados, es decir, excepto en el caso de muertes en circunstancias inusuales, como suicidios y crímenes – y juicios de HaShem (Deuteronomio 21:22-23).105

Más que nada, la lección de Ananías y Safira es que nosotros presumimos mucho de YHVH cuando asumimos que siempre hay tiempo para arrepentirnos, tiempo para estar bien con Dios, tiempo para ser honesto con Él. Cualquier tiempo dado por Dios es un regalo inmerecido que Él no le debe a nadie, nunca debemos asumir que siempre estará disponible ese tiempo.106

Hubo un intervalo como de tres horas y entró su mujer, que no sabía lo sucedido. Entonces Pedro le dijo: Dime, ¿vendisteis en tanto la propiedad? Y ella respondió: Sí, en tanto (5:7-8). Con esta pregunta, Pedro le está dando la oportunidad de arrepentirse. Al decir ella: “Sí, en tanto”, confirmó su culpabilidad continuando con la mentira. Entonces Pedro le dijo: ¿Por qué os pusisteis de acuerdo para tentar al Espíritu del Señor? He aquí a la puerta los pies de los que sepultaron a tu marido, y te sacarán a ti (5:9). Esta misma palabra tentar (griego: peirazo) se usa en la Septuaginta para describir a los israelitas que probaron a Dios en el desierto (vea el comentario sobre Éxodo Cu Golpea la roca y de ella saldrá agua). Esteban también acusa a los israelitas de ser ¡Duros de cerviz, e incircuncisos de corazones y de oídos! Vosotros resistís siempre al Espíritu Santo; como vuestros padres, también vosotros (7:51).

He aquí a la puerta los pies de los que sepultaron a tu marido, y te sacarán a ti. Y al instante cayó a sus pies y murió; y cuando entraron los jóvenes, la hallaron muerta, y sacándola, la sepultaron junto a su marido (5:9b-10). Este fue un pecado contra el Espíritu del Señor. Difícilmente se puede pasar por alto la ironía de la situación. Ahora ella yacía a los pies de Pedro, además de su dinero. Ella se unió a él en la conspiración y se uniría a él en la tumba.107 Safira fue una participante consciente y voluntaria en el pecado, así como en el descarado encubrimiento. El juicio de HaShem sobre ella fue tan justo como lo fue con su marido. Debemos tener en cuenta que su pecado no fue robarle dinero a Dios, sino mentirle y robarle Su gloria. El deseo de reconocimiento fue concebido en sus corazones, y ese pecado creció plenamente, dio a luz a la muerte. En Santiago 1:15 dice: Entonces la concupiscencia, después que ha concebido, engendra el pecado, y el pecado, ya desarrollado, da a luz la muerte. Así se preservó la pureza de la iglesia primitiva o Comunidad Mesiánica. Como Moisés había dicho: Así extirparás el mal en medio de ti (Deuteronomio 17:2-7 a 12).

Las muertes de Ananías y Safira caen bajo la categoría de (hebreo: karet), ser separados del pueblo judío. Podría incluir la excomunión o, en este caso, la muerte a manos del cielo. Esto sugiere que Lucas tenía la intención de presentar el incidente como un castigo personal, aunque naturalmente uno del que toda la comunidad –y aquellos fuera de ella– podría aprender. Significativamente, el expirar solo se encuentra aquí en Hechos y en 12:23 donde vemos la muerte antinatural de Herodes Agripa.108

Los matrimonios casados en el Señor tienen la responsabilidad de guardarse mutuamente del pecado y de negarse a participar juntos en el pecado, porque Dios hará que cada uno rinda cuentas. El concepto de sumisión (Efesios 5:21-28) no se extiende a la presentación de ningún pecado. En última instancia, el marido es responsable de lo que sucede en el matrimonio (vea el comentario sobre Génesis BfDesearás a tu marido y él te dominará).109

Algunos han cuestionado si Ananías y Safira eran verdaderos creyentes. Es mejor verlos como creyentes genuinos por varias razones. Primero, fueron incluidos en la multitud de los que creyeron (4:32). En segundo lugar, estaban involucrados con el Ruaj HaKodesh, lo que indica una relación con Él. En tercer lugar, si no eran creyentes, ¿qué lección sobre el pecado dio esto, para enseñar a todos los demás que eran verdaderos creyentes? Cuarto, el Adversario puede involucrarse personalmente con los creyentes (Mateo 16:21-23; Efesios 6:12; Primera de Pedro 5:8-9). Finalmente, la muerte puede ser un castigo divino para un creyente (Primera de Corintios 11:30-32; Primera de Juan 5:16).110

Escena Cuarta: Y vino un gran temor sobre toda la iglesia, y sobre todos los que oían estas cosas (5:11). La indicación clara es que se consideraba que Pedro, y aparentemente el resto de los apóstoles, poseían raros poderes para exponer los pecados y, tal vez, eran los agentes directos del castigo divino. Pero algunos se han preguntado por qué el castigo tenía que ser tan severo. Los creyentes cometerían pecados peores más tarde y no morirían. Si rastreamos las Escrituras a través de las distintas Dispensaciones, el castigo divino tiene que ser más severo al comienzo de una nueva Dispensación. Este fue un momento crucial para la iglesia primitiva o Comunidad Mesiánica, y tal impureza, pecado, escándalo e infiltración satánica podrían haber corrompido a toda la comunidad desde sus raíces.111 Tomemos, por ejemplo, Nadab y Abiú, los dos hijos de Aarón en Levítico 10:1-2 al comienzo de la Dispensación de la Torá (Ley). Ellos quemaron el incienso de manera inapropiada y Dios los mató justo en el lugar santo. Posteriormente se cometieron pecados peores en el Templo, pero el castigo no fue tan severo porque HaShem siempre es más duro al comienzo de una nueva Dispensación.112 Es claramente verdadero que el relato de Ananías y Safira nos introduce en un mundo de pensamiento diferente al de hoy. Es un mundo en el que el pecado se toma en serio.113

Por primera vez se menciona la palabra iglesia o comunidad, del griego: ekklesía, que significa el cuerpo de creyentes a quienes Dios llama del mundo a Su Reino eterno. De un total de veintitrés veces que se encuentra esta palabra en el libro de los Hechos, esta es la primera aparición. La Septuaginta usa ekklesía para traducir la palabra hebrea qahal, que significa congregación de Israel. Y en todas partes la palabra hebrea qahal se encuentra en el TaNaJ, la Septuaginta usa ekklesia excepto en los libros de Jeremías y Ezequiel, donde la palabra griega usada para traducir qahal es sunagoge, de donde obtenemos la palabra sinagoga.

Lo que tenemos aquí es el ejemplo de Pedro usando su autoridad como apóstol. En Mateo 16:19b, ADONAI le dio a Pedro la autoridad para “atar y desatar” (según en algunas traducciones): Te daré las llaves del reino de los cielos, y todo lo que prohíbas en la tierra habrá sido prohibido en los cielos, y todo lo que permitas en la tierra habrá sido permitido en los cielos (Mateo 16:19). Aquí se usa el tiempo perfecto, lo que significa que cualquier cosa que es la decisión de Dios en el cielo, será revelada a los apóstoles en la tierra. Literalmente dice: Todo lo que prohíbas en la tierra ya habrá sido prohibido en el cielo. Los términos atar y desatar eran comunes en los escritos rabínicos de ese tiempo. Desde el marco de referencia judío, estos términos fueron utilizados por los rabinos de dos maneras: judicial y legislativamente. Judicialmente, atar significaba castigar y desatar significaba liberar del castigo. Legislativamente, atar significaba prohibir algo y desatar significaba permitirlo. De hecho, los fariseos afirmaban atar y desatar para sí mismos, pero Dios realmente nunca les dio esto a ellos. En ese momento, Jesús le dio esta autoridad especial sólo a Pedro. Después de Su resurrección Cristo dio la autoridad única para atar y desatar en asuntos legislativos y en castigo judicial a los demás apóstoles. Sin embargo, una vez que murieron, esa autoridad murió con ellos.

Los apóstoles ejercieron esta autoridad legislativamente para permitir y prohibir. Y podemos ver a Pedro ejerciendo autoridad judicial aquí en Hechos 5, donde Pedro ató a Ananías y Safira para castigarlos porque mintieron al Espíritu Santo. Como resultado, Pedro los ató al castigo usando su autoridad como emisario, y ellos fueron muertos.

Hoy en día mucha gente toma este concepto de atar y desatar fuera de contexto y hablan de atar y desatar demonios. Primero, se nos dice que resistamos, no que atemos, al diablo y él huirá de ti (Santiago 4:7). No hay ninguna sugerencia en las Escrituras de que debamos atar al Destructor de almas. Incluso a Miguel se le dijo que no entrara en batalla espiritual con Satanás. Judas nos recuerda: Mientras que el arcángel Miguel, cuando disputaba con el diablo, contendiendo por el cuerpo de Moisés, no se atrevió a proferir juicio de maldición, sino que dijo: ¡El Señor te reprenda! (Judas 9)! Teóricamente, incluso si pudiéramos atar al Adversario, ¡parece que alguien sigue soltándolo después de que está atado! No sé en tu barrio, pero en el mío, el engañador es bastante activo. No, el contexto aquí no es actividad satánica, sino autoridad apostólica.114

Siguiendo el ejemplo de Ananías y Safira encontramos que Pablo confrontó, o prohibió, a los judaizantes atacar a los creyentes en la Iglesia (Gálatas 1:1 a 2:21); y Pablo y Bernabé confrontaron, o prohibieron, a un grupo de judaizantes imponer todos los 613 mandamientos de la Torá como obligatorios para los creyentes en el concilio de Jerusalén (Hechos 15:1-21).

A continuación, se muestra una declaración resumida que nos prepara para lo que sigue. Estas declaraciones resumidas en Hechos se pueden ver en cuatro lugares: 2:43-47, 4:32-37; aquí y 8:1b-4. Es importante distinguir entre declaraciones resumidas y declaraciones de transición; las primeras sólo aparecen en los primeros ocho capítulos de Hechos, y las segundas aparecen en varios lugares a lo largo del libro.

Por manos de los apóstoles se hacían muchas señales milagrosas y prodigios entre el pueblo, y estaban todos unánimes en el pórtico de Salomón (5:12). Mientras tanto, de vez en cuando por mano de los apóstoles ocurrían muchas señales y prodigios entre el pueblo. Una vez más, las señales y prodigios se limitaron a los apóstoles (2:43, 4:22 y 30). Y como había tantos creyentes en aquel tiempo, se reunieron todos en el pórtico de Salomón.

De esa manera muchos podían escuchar lo que los apóstoles enseñaban y predicaban. Pero la población judía en general no se atrevió a unirse a ellos. Pero de los demás, ninguno osaba juntarse con ellos; pero el pueblo los alababa grandemente (5:13). El pueblo seguía teniendo en alta estima a ellos, a pesar de temer la persecución desde fuera de la comunidad mesiánica y temer la disciplina desde dentro, debido a Ananías y Safira. Y muchos más creyentes en el Señor eran añadidos: multitudes de hombres y de mujeres. Y sacaban a los enfermos a las calles y los ponían en catres y camillas, para que al pasar Pedro, al menos su sombra cubriera a alguno de ellos. También de ciudades circunvecinas de Jerusalén concurría la multitud, trayendo enfermos y atormentados por espíritus inmundos, y todos eran sanados (5:12-16). Entonces, si bien a todos los apóstoles se les dio la capacidad de realizar señales y prodigios, Pedro fue especialmente ungido en ese don.115

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2024-11-05T12:31:03+00:000 Comments

As – Vida comunitaria llena del Espíritu 4: 32-37

Vida comunitaria llena del Espíritu
4: 32-37

31-33 dC

Vida comunitaria llena del Espíritu ESCUDRIÑAR: ¿Cómo afectó la persecución a la comunidad mesiánica (iglesia) primitiva? ¿Fue este el comienzo del comunismo? Compare aquí los versículos 32-35 con 2:42-47. ¿Qué cualidades marcan esta primera comunidad mesiánica (iglesia) ? ¿Por qué los apóstoles cambiaron el nombre de José? ¿Y por qué Lucas menciona a Bernabé en su descripción de la vida de la Comunidad?

REFLEXIONAR: Si usted tuviera que describir su iglesia o congregación mesiánica, ¿cuáles de estos versículos podría usar para hacerlo? ¿Cuáles no encajarían ahora? ¿Qué tan bien encaja el versículo 32 en su relación con los demás, en su lugar de adoración? ¿Qué tendría que cambiar para que ese intercambio sea mayor?

Esta es una declaración resumida que nos prepara para lo que sigue. Estas declaraciones resumidas en Hechos se pueden ver en cuatro lugares: 2:43-47, aquí; 5:12-16 y en 8:1b-4. Es importante distinguir entre declaraciones resumidas y declaraciones de transición; las primeras sólo aparecen en los primeros ocho capítulos de Hechos, y las segundas aparecen en varios lugares a lo largo del libro.

La iglesia (comunidad mesiánica) comenzó con unos ciento veinte hermanos en el aposento alto (1:15), luego se agregaron unas tres mil personas en Shavuot (2:41), y el número de hombres (sin contar las mujeres) que vinieron al Señor fue como cinco mil, como resultado de la predicación de Pedro en el pórtico de Salomón (4:4). Por lo tanto, la comunidad del Mesías había crecido en un período muy corto de tiempo a aproximadamente trece mil personas.

Uno solo era el corazón y el alma de la multitud de los que creyeron, y ni uno solo decía ser suyo propio algo de lo que poseía, sino que tenían todas las cosas en común (4:32). Debido a su unidad, ellos consideraban a las personas más importantes que a las cosas.94. Reconocieron la propiedad de Dios, sobre todo; todo le pertenecía a Dios y a Su pueblo. Como se indicó anteriormente, no deberíamos considerar esto como “una especie de comunismo temprano”, porque fue voluntario (5:4), temporal y defectuoso (vea el enlace, haga clic en AoComienza la Comunidad del Nuevo Pacto). Compartir voluntariamente la propiedad para satisfacer las necesidades físicas de otros no es comunismo. El comunismo dice: “Lo que es tuyo es nuestro”. Sin embargo, la comunidad mesiánica dijo: “Lo que es mío es tuyo”. Ésta era la extensión lógica de la práctica de la comunión unos con otros.95

Y con gran poder los apóstoles daban el testimonio de la resurrección del Señor Jesús, y había abundante gracia sobre todos ellos (32:33). Esto fue con gran poder de milagros. El testimonio de la resurrección fue el énfasis principal de la enseñanza apostólica. Aunque ellos sabían que ofendía mucho a las autoridades judías, los apóstoles nunca suprimieron la verdad para evitar esa ofensa. Una vez más, las únicas personas que tenían el poder de realizar milagros eran los representantes apostólicos de Jesucristo, o personas delegadas por los mismos apóstoles (vea Av Diáconos ungidos para el servicio). Esta no era una congregación que producía milagros, sino una congregación con apóstoles que hacían milagros. Y había abundante gracia sobre todos ellos.

Y no había ningún necesitado entre ellos, pues todos los que poseían tierras o casas, las vendían y llevaban el dinero de las cosas vendidas (4:34), (vea también Santiago 2:15-16; 1 Juan 3:17). En griego aquí no significa que todos vendieron su propiedad a la vez. Más bien, fue de vez en cuando, cuando el Señor les señalaba las necesidades. El tiempo imperfecto de los verbos indica acción continua. En ningún momento ellos juntaron todas sus posesiones. Esto muestra que ponían a Dios en primer lugar, a las personas en segundo lugar y a las cosas en un distante tercer lugar. Esta donación era absolutamente necesaria para satisfacer las necesidades de esta comunidad en rápido crecimiento. Recuerde, muchos de estos bebés creyentes vinieron como peregrinos desde el extranjero, habiendo respondido al evangelio en Pentecostés o Shavuot (vea An Pedro habla a la multitud en Pentecostés). Desafortunadamente, pronto se abusó de esta generosidad.96

Y no había ningún necesitado entre ellos, pues todos los que poseían tierras o casas, las vendían y llevaban el dinero de las cosas vendidas. y lo ponían a los pies de los apóstoles, y se distribuía a cada uno según su necesidad (44:34-35). Trajeron estas propiedades y las pusieron a los pies de los apóstoles. Esta fue una clara indicación de autoridad apostólica y control total de la distribución de todos los ingresos. Y se repartía según la necesidad que tenía cada uno y la conciencia del donante. Esta acción se tomó hasta cierto punto como resultado de su comprensión de la Segunda Venida. Los rabinos enseñaban que cuando viniera el Mesías, comenzaría el Reino mesiánico. Por lo tanto, existía una creencia real de que el Reino estaba a la vuelta de la esquina, entonces, no sentían la necesidad de conservar sus tierras y las vendían para ayudar a los necesitados dentro de la comunidad mesiánica. Es importante darse cuenta de que esta práctica de distribución se limitaba a la comunidad del Mesías en Jerusalén, y nunca se ve a otras congregaciones mesiánicas (o iglesias) en el libro de los Hechos siguiendo esta práctica. Esta práctica puede haber sido un factor que eventualmente contribuyó a que la comunidad mesiánica en Jerusalén se convirtiera en un apoyo necesario de las iglesias con gentiles que Pablo había iniciado (Hechos 11:27-30, 24:17; Romanos 15:25-27; Gálatas 2:10).

Aunque la iglesia (comunidad mesiánica) de Jerusalén se volvió lo suficientemente pobre como para necesitar el apoyo de los gentiles; ¡se convirtieron en una iglesia rica porque sus donaciones les trajeron recompensas eternas! Dios, que siempre conoce el futuro y cuida con ternura a Sus hijos, sabía que dar tan generosamente sería una carga para su comunidad, y Dios planeó de antemano que las iglesias con gentiles los ayudaran en sus necesidades financieras. Al hacer esto, Dios bendijo tanto a la Comunidad mesiánica de Jerusalén como también a los gentiles que dieron, porque más bienaventurado es dar que recibir (Hechos 20:35b). Este fue un evento histórico y no se debe derivar ninguna teología de él.

Por supuesto, muchas sociedades han soñado con el fin de la pobreza. Los griegos, por ejemplo, recordaban una época dorada en la que toda propiedad era pública, y se dice que Pitágoras la practicó con sus discípulos y acuñó el epigrama “entre amigos todo es común” (griego: koinos). Platón incorporó posteriormente, este ideal en su visión de una república utópica. Luego Josefo escribió que los esenios, a quienes conocemos como la comunidad de Qumrán, vivían el mismo tipo de vida que aquellos a quienes los griegos llaman pitagóricos. Sin embargo, la inspiración para la vida común y el amor de la comunidad del Mesías en Jerusalén, no puede provenir de Pitágoras, ni de Platón, ni de los esenios, sino de la Ley (Torá), iluminada por Yeshua. Porque la Torá (Ley) fue muy clara al respecto: Para que no haya en medio tuyo menesteroso alguno, porque YHVH te bendecirá abundantemente en la tierra que YHVH tu Dios te da en herencia para que la poseas, con tal que escuches atentamente la voz de YHVH tu Dios, cuidando de cumplir todo este mandamiento que yo te ordeno hoy (Deuteronomio 15:4-5).97

Lucas concluyó su tratamiento del compartir de las primeras congregaciones mesiánicas (iglesias) con dos ejemplos específicos: uno para seguir, Bernabé, y otro a evitar, Ananías y Safira (vea At Ananías y Safira mienten del Espíritu).98 Ahora bien, José, también era llamado Bernabé por los apóstoles (que se traduce Hijo de Consolación). Los apóstoles le cambiaron el nombre a Bernabé por su don espiritual de consolación. Era levita y natural de Chipre (4:36). Sabemos algunas otras cosas por otros pasajes. Su nombre aparece veinticuatro veces en el libro de los Hechos y cinco veces en las cartas de Pablo (Primera Corintios 9:6; Gálatas 2:1, 9 y 13; Colosenses 4:10). Él era primo de Juan Marcos, quien escribió el evangelio de Marcos (Efesios 4:10). También sabemos que tenía una apariencia distinguida, totalmente controlada por el Espíritu Santo (11:24). Cuando Pablo regresó a Jerusalén después de su salvación, nadie confiaba en él. Pero Bernabé persuadió a la comunidad mesiánica en Jerusalén a creer su historia (9:27). Más tarde, la comunidad del Mesías en Sión enviaría a Bernabé a investigar la salvación de los gentiles en Antioquía (11:19-24). Aún más tarde, él iría a buscar a Pablo de Tarso para ayudar en el ministerio en Antioquía (11:25-26). Él sería el compañero de Pablo en el primer viaje misionero (vea Bm – El primer viaje misionero de Pablo). Al concluir ese viaje, Bernabé y Pablo representaron a la iglesia de Antioquía en el crucial concilio de Jerusalén (Hechos 15). Lamentablemente, su estrecha asociación con Pablo terminó en la disputa sobre llevar a Juan Marcos en el segundo viaje misionero (vea Bu – Segundo viaje misionero de Pablo).

Bernabé También fue apóstol (14:14). Él era de ese segundo grupo de apóstoles. El primer grupo de los Doce tenía que ser testigo del bautismo (inmersión) del Mesías por parte de Juan hasta su ascensión. Sin embargo, al segundo grupo de los apóstoles solo tenían que ver a Cristo resucitado, y Bernabé, al igual que Pablo, estaba en ese segundo grupo.

Entonces José, quien por los apóstoles era llamado Bernabé (que significa hijo de consolación), levita, natural de Chipre, vendió una hacienda que tenía, y llevó el dinero y lo puso a los pies de los apóstoles (4:36-37). Bernabé era dueño de un campo presumiblemente en Chipre. El hecho de que se señale a Bernabé también implica que la venta fue voluntaria. Si hubiera sido obligatoria, no habría nada destacable en sus acciones. Bernabé era levita, y bajo la dispensación de la Ley (Torá), a los levitas no se les permitía poseer ninguna tierra (Números 18:20 y 23; Deuteronomio 10:9), vea el comentario sobre Éxodo Da – La Dispensación de la Torá. Pero después del cautiverio babilónico ese mandamiento ya no se aplicaba porque los judíos no fueron reasentados en sus divisiones tribales originales (vea el comentario sobre Jeremías Gu – Setenta años de dominio imperial babilónico). Aquí vemos las habilidades superiores de escritura de Lucas, mientras presenta silenciosamente a Bernabé en la historia, como una figura importante en el libro de los Hechos.

Una mirada más cercana al estatus social y al nivel de los primeros creyentes: Es justo decir que Lucas nos presenta algunos detalles en las descripciones de la iglesia (comunidad mesiánica) de Jerusalén y, tal vez, de la iglesia de Antioquía para obtener algún tipo de imagen clara de cómo eran las cosas en Hechos. Sin embargo, Lucas nos da cuatro pistas sobre el nivel social y el estatus de los primeros creyentes.

Primero, está la educación. Ya hemos aprendido que Pedro y Juan eran laicos no tenían ninguna formación rabínica, y que sus poderes de persuasión estaban inspirados por el Espíritu Santo más que aprendidos. No aprendemos nada en Hechos 1-8 que contradiga esta evaluación de al menos el liderazgo masculino galileo. Sin embargo, hay alguna evidencia de que pudo haber algunas seguidoras de Yeshua, como Juana, mujer de Chuza, ministro de finanzas de Herodes, quien pudo haber tenido una educación y un estatus social superiores (Lucas 8:3), y Lucas los ubica en Jerusalén durante los eventos de Shavuot (Lucas 23:55; 24:10) y probablemente también después (Hechos 1:14). También se puede señalar correctamente a María, la madre de Juan Marcos, como una persona de estatus más alto, que tenía una casa lo suficientemente grande como para permitir que varios de los primeros creyentes se reunieran allí, y tenía al menos un sirviente doméstico (Hechos 12:12-13). El propio Marcos pudo escribir su evangelio en griego, lo que refleja una educación y un conocimiento más que básicos del griego.

En segundo lugar, está toda la cuestión de la vivienda y la hospitalidad. Como se vio anteriormente, la iglesia primitiva dependía de la hospitalidad y las casas de los miembros, presumiblemente los creyentes más acomodados, para poder proporcionar un lugar para reunirse. Por ejemplo, los apóstoles se reunían en un “aposento alto” que aparentemente, no era un lugar inusual para que los primeros judíos se reunieran para comer y estudiar Torá. La implicación del hecho de que los creyentes se reunieran en hogares en Jerusalén sugiere, especialmente en vista del creciente número de conversos, que al menos varios creyentes tenían hogares lo suficientemente grandes como para albergar a un buen número de personas, pero que ningún lugar era suficiente para albergarlos a todos, incluso muy poco después de Shavuot. Esto sugiere que hubo algunos de los primeros creyentes judíos que tenían un buen estatus social.

En tercer lugar, está lo que realmente se dice sobre el dinero y las finanzas en Hechos 1-8. Ya hemos visto varios indicios de que, al menos algunos de los primeros creyentes, tenían tierras y casas que podían vender y dar ofrenda a la comunidad (2:45; 4:36-37). Incluso si esto fuera exagerado, enfatiza que, en este primer período de la comunidad mesiánica, pocos tenían necesidad o escasez porque los creyentes compartían sus pertenencias. Esto también señala que algunos de los primeros creyentes eran bastante pobres. No sólo eso, cuando leemos todo lo que Pablo dijo en el Brit Hadashah (Nuevo Testamento), vemos que había un número considerable de creyentes pobres en Jerusalén y Judea que necesitaban ser atendidos, especialmente en tiempos de hambruna (Gálatas 2:10; Segunda Corintios 9:12; Romanos 15:22-26).

En cuarto lugar, está la mención de nombres, títulos o funciones, que pueden sugerir algún estatus social importante de una persona. Vemos esto en una figura como Bernabé, de quien se dice que es un levita; y la palabra de Dios crecía, y el número de los discípulos se multiplicaba grandemente en Jerusalén, y un gran número de los sacerdotes obedecían a la fe (6:7); o quizás con figuras como José de Arimatea o Nicodemo que parecen haber formado parte del Sanedrín, ambos miembros del Gran Sanedrín. La tumba de José utilizada para enterrar a Yeshua sugiere a la mayoría que José era una persona razonablemente acomodada. Esta evidencia, sin embargo, no es absoluta porque varios sacerdotes y levitas podrían ser bastante pobres y, aparte de su estatus religioso, en realidad no estaban en mejor situación que varios comerciantes, artesanos o trabajadores no calificados. A veces los levitas podían complementar sus ingresos siendo escribas. Por lo tanto, la comunidad del Mesías (iglesia) era un microcosmos de la propia Jerusalén. Ni los ricos ni los pobres fueron excluidos, y es sorprendente cuán rara vez se menciona siquiera el estatus social o económico en Hechos.99

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2024-11-05T12:16:47+00:000 Comments

Ar – Pedro y Juan comparecen ante el Sanedrín 4: 1-31

Pedro y Juan comparecen ante el Sanedrín
4: 1-31

31-33 dC
Los acontecimientos de Hechos 3-8 transcurren con creciente preocupación por parte de los judíos, y especialmente de las autoridades judías en Jerusalén. La creciente tensión dio lugar a una acción de vigilancia contra Esteban, y luego a un esfuerzo autorizado bajo el mando del rabino Saulo, para perturbar y destruir ese nuevo movimiento mesiánico, lo que implicó persecución e incluso la muerte de los creyentes. La persecución llevó a varios creyentes como a Felipe, a ir a Samaria y dar testimonio de Yeshua.

Pedro y Juan se presentan ante el Sanedrín ESCUDRIÑAR: ¿Qué papeles desempeñaron los sacerdotes (cohanim), el capitán de la guardia del templo y los saduceos en el ministerio de Yeshua (vea Lucas 20:27-40, 22:6 y 52)? ¿Por qué se opondrían los saduceos a la proclamación de los apóstoles? ¿Qué sentiría si usted fuera Pedro o Juan? ¿Qué está tratando de hacer ellos y la familia del sumo sacerdote en el versículo 7? ¿buscan ellos información para intimidar a los apóstoles? Si fuera usted una de las autoridades, ¿cuál sería su reacción ante la audaz respuesta de Pedro? ¿Cómo se compara el llenado de Pedro con el Ruaj HaKodesh en los versículos 8-12 con el propósito del llenado en 2:4? vea también Lucas 21:12-13. ¿Cómo se compara la respuesta de los líderes judíos con la respuesta de ellos mismos cuando Lázaro resucitó de entre los muertos?; vea el comentario sobre La Vida de Cristo, Ia – La Resurrección de Lázaro: La Primera Señal de Jonás. ¿Cómo se ven el Sanedrín y los apóstoles a sí mismos y a ADONAI? ¿Por qué los apóstoles podrían comenzar la oración recordando la soberanía de Dios (4:24-28)? ¿Cuál es uno de los propósitos de la llenura del Espíritu Santo (2:4, 4:8 y 31)?

REFLEXIONAR: En una crisis ¿en qué se parecen y en qué se diferencian sus oraciones de esta oración? Si es que alguna vez aplica: ¿cuándo cree que la respuesta de Pedro a sus líderes políticos y religiosos podría ser apropiada para los creyentes de hoy? ¿Cómo reconcilia usted este pasaje con Romanos 13:1-4? ¿Cuál es la mayor persecución que ha experimentado personalmente debido a su fe? ¿Cómo se lo ha tomado usted? ¿Cree en la declaración de Pedro en el versículo 12? ¿Qué es lo que más ha fortalecido su seguridad? ¿Hay alguna duda que todavía persiste? ¿Cómo el conocimiento de Yeshua ha moldeado su carácter para que la gente pueda notar que hay algo diferente en usted y preguntar al respecto?

La curación del mendigo cojo y el discurso de Pedro causó gran impresión en la gente común, pero despertó la oposición de los líderes judíos que arrestaron a los dos apóstoles y los llevaron ante una reunión del Sanedrín para interrogarlos; vea el enlace haga clic en Ap Pedro sana a un mendigo cojo, vea Aq Pedro habla en el templo, vea el comentario sobre La Vida de Cristo Lg – El Gran Sanedrín. En un breve discurso Pedro repitió los hechos esenciales relacionados con la resurrección de Yeshua, con el énfasis añadido de que sólo el Señor podía salvar al pueblo.82

El arresto: Hasta este punto no había habido resistencia a los creyentes mesiánicos por parte del liderazgo judío en Jerusalén. Pero la razón de la participación del Sanedrín en lo que a primera vista parece ser un disturbio público menor, radica en las ramificaciones políticas del “movimiento de Yeshua“. Los primeros mesiánicos se caracterizaban por atraer grandes multitudes de seguidores cuyo fervor nacionalista, probablemente, provocaría una rápida respuesta de las autoridades romanas. El liderazgo judío siempre estuvo preocupado por esto en la medida que los romanos pudieran venir; si lo dejamos así, todos creerán en Él; y vendrán los romanos y nos quitarán tanto el Lugar como la nación (Juan 11:48), el Lugar se refiere al Templo. Josefo describe tales movimientos “zelotes” como personas que tienen una “pasión por la libertad que es casi invencible, ya que están convencidos de que sólo Dios es su Líder y Maestro. Lucas menciona en Hechos a tres figuras involucradas en tales actividades revolucionarias: Teudas, Judas de Galilea y “el egipcio”, quienes recibieron un duro trato a manos de las fuerzas romanas enviadas para enfrentarse a ellos (5:36-37, 21:37-38). Como posibles autores de tal movimiento revolucionario, el Concilio probablemente, había estado siguiendo de cerca a los apóstoles y discípulos.83

Mientras Pedro y Juan hablaban al pueblo, se les acercaron los sacerdotes, el jefe de la guardia del templo y los saduceos, muy enojados porque ellos enseñaban al pueblo, y anunciaban en Jesús la resurrección de los muertos (4:1-2). Los sacerdotes, algunos de los veinticuatro cohanim (o sumos sacerdotes), irrumpieron repentinamente sobre ellos muy enojados. El jefe de la guardia del templo estaba a cargo de la policía del templo y, por lo tanto, era responsable de mantener el orden en el recinto del templo y, a veces, se le conocía como ish ha-bayit, o el hombre principal del monte (del Templo). Él siempre era un saduceo y su autoridad sólo era superada por la del propio sumo sacerdote. Los saduceos estaban especialmente celosos del control del recinto del templo. Los saduceos los veían simplemente como galileos sin educación, sin formación rabínica y no estaban autorizados a enseñar en el recinto del templo. Y más importante aún, estaban anunciando que Yeshua había resucitado de entre los muertos. Los saduceos no creían en la resurrección de los muertos en general, pero peor aún, Pedro y Juan estaban enseñando acerca de la resurrección de los muertos por ¡Jesús! ¡Estos mismos saduceos acababan de rechazar a Yeshua como el Mesías y darle muerte! Y eso les molestó aún más.

Y les echaron mano, y los pusieron bajo custodia hasta el día siguiente, porque ya era tarde (4:3), vea el comentario La vida de Salomón Af – Prisioneros por ADONAI. Supuestamente ningún juicio podría realizarse de noche, ¡aunque eso no los detuvo cuando quisieron deshacerse del Mesías! (vea el comentario sobre La Vida de Cristo Lh – Las Leyes del Gran Sanedrín respecto a las pruebas) El recinto del Templo tenía cámaras donde la guardia del templo podía encarcelar a las personas rebeldes.

Pero muchos de los que oyeron la palabra creyeron, y el total de los hombres fue cinco mil (4:4), esto fue sin contar las mujeres. Entonces la comunidad mesiánica explotó como resultado del discurso de Pedro.

El juicio: Al día siguiente, aconteció que se reunieron en Jerusalén sus gobernantes, y los ancianos, y los escribas; y Anás, sumo sacerdote, y Caifás, y Juan y Alejandro, y todos los que eran del linaje de los sumos sacerdotes (4:5-6). Al día siguiente en el juicio, estaban reunidos: los miembros del Gran Sanedrín, los veinticuatro principales sacerdotes (que eran saduceos) y los ancianos (los líderes de la ciudad) y los escribas (fariseos maestros de la Torá). Estos eran los mismos gobernantes judíos que recientemente habían condenado a muerte a Yeshua. Pedro y Juan debieron haber pensado que ellos iban a correr la misma suerte y que serían crucificados al igual que su Maestro. Pero ellos no dudaron.

Anás, el sumo sacerdote (cohen gadol) estaba allí y era reconocido por la comunidad judía. Pero los romanos lo depusieron porque pensaban que tenía demasiado control. Impávido, continuó controlando todo detrás de escena con su familia extendida: lo sucedieron cinco de sus propios hijos, incluido Jonatán mencionado aquí, un nieto y un yerno, Caifás. Incluso después de su destitución, Anás era el verdadero poder detrás de escena y controlaba las finanzas en el recinto del templo. Fueron sus propiedades comerciales las que Yeshua atacó en dos ocasiones. Primero, al comienzo de Su ministerio y segundo, el lunes antes de ser crucificado; vea el comentario sobre La Vida de Cristo Bs – Primera limpieza del templo de Jesús en la Pascua, y vea el comentario sobre La vida de Cristo Iv – Jesús entró en el templo y expulsó a todos los que compraban y vendían. Anás bien pudo haber sentido que, al predicar este mensaje al pueblo, los seguidores de Yeshua estaban intentando responsabilizar al Gran Sanedrín por la muerte del Mesías, de lo cual ellos lo fueron (2:23, 3:14-15, 5:27ss, 7:51-52, 13:27-29, 23:6-9 y 24:1).84

El interrogatorio comenzó cuando pusieron a Pedro y a Juan entre ellos. El Sanedrín estaba dispuesto como la mitad de una era redonda para que pudieran verse unos a otros. El Consejo se reunió en el segundo piso de la Estoa Real.

Ante ellos estaban los dos escribas de los jueces, uno a la derecha y otro a la izquierda, y escribieron las palabras de los miembros del Consejo que favorecían la absolución y las palabras de los que favorecían la condena (M Sanh 4:3).

Comenzaron a preguntarles con desdén: ¿Con qué potestad, o en qué nombre habéis hecho vosotros esto? (4:7), La palabra poder (griego: dynamis) usada aquí implica algún tipo de encantamiento. Cuando dijeron en qué nombre, dieron a entender que Pedro usaba magia. Ellos no podían negar que se había producido un milagro, por lo que el Gran Sanedrín utilizó la misma táctica que ellos utilizaron con Jesús. El Concilio no podía negar los milagros mesiánicos que el Mesías había realizado, pero como Él no quería tener nada que ver con las tradiciones de los hombres, afirmaban que estaba poseído por demonios; vea el comentario sobre La vida de Cristo EiLa Ley Oral, y vea el comentario sobre La Vida de Cristo Ek – Es sólo por Belcebú, el Príncipe de los demonios, que este hombre expulsa a los demonios. Y como el Concilio no tenía otra explicación para este milagro, ellos llegaron a la misma conclusión sobre Pedro.

Luego, aunque Juan estaba presente, Pedro nuevamente toma la iniciativa. En ese momento fue lleno del Ruaj HaKodesh. Hay una diferencia entre estar sumergido en el Espíritu y estar lleno del Espíritu Santo. En el momento de la salvación, todo creyente es sumergido en el Espíritu Santo (vea el comentario sobre La Vida de Cristo Bw – Lo que Dios hace por nosotros en el momento de la fe). Es un evento único. Sin embargo, todo creyente necesita estar continuamente lleno o controlado por el Espíritu. Somos vasos con fugas y, como resultado, esto debe suceder durante toda nuestra vida. Entonces en este momento Pedro está controlado por el Ruaj HaKodesh, y es capaz de dar una formidable defensa al Sanedrín, tal como Yeshua dijo que los apóstoles podrían hacerlo: Guardaos de los hombres, porque os entregarán a los sanedrines y en sus sinagogas os azotarán. Aun ante gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los gentiles. Y cuando os entreguen, no os preocupéis de cómo o qué habéis de hablar, porque en esa hora os será dado lo que habéis de hablar, pues no sois vosotros quienes habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre el que habla en vosotros (Mateo 10:17-20).

El discurso: Entonces Pedro les dijo: “¡Gobernantes y ancianos del pueblo!” (4:8a) Esta es la primera oportunidad en la que Pedro pudo dirigirse directamente al Gran Sanedrín. Los discursos del Capítulo 2 y del Capítulo 3 fueron pronunciados al pueblo, pero aquí está dirigido a gobernantes y ancianos. La pregunta que ellos habían hecho a Pedro era: ¿Con qué potestad, o en qué nombre habéis hecho vosotros esto? Entonces, él da la explicación del milagro: Puesto que hoy se nos interroga acerca de un beneficio hecho a un hombre enfermo, por quién haya sido sanado éste, sea notorio a todos vosotros, y a todo el pueblo de Israel, que en el nombre de Jesús de Nazaret, el Mesías, a quien vosotros crucificasteis, a quien Dios resucitó de los muertos, por Él este hombre está sano delante de vosotros (4:9-10). El hombre, que había sido arrestado junto con los apóstoles estaba sano (griego: sozo) delante de ellos. Había habido un cambio dramático en Pedro. No mucho antes, al ser confrontado como apóstol de Jesús, había negado al Señor tres veces (vea el comentario La Vida de Cristo Lk – Pedro niega a Jesús tres veces). Pero ahora, justo en la sala del Consejo, Pedro los acusa a ellos de asesinato.

Bajo inspiración divina, Pedro luego parafrasea el Salmo 118:22: La piedra que desecharon los edificadores Ha venido a ser cabeza del ángulo. Él cambia la situación y juzga a los gobernantes y ancianos judíos, diciendo: Éste es la piedra reprobada por vosotros los edificadores, la cual ha venido a ser cabeza de ángulo (4:11). Este es Yeshua, a quien habéis crucificado, los edificadores son los líderes judíos. La imagen de: Piedra de tropiezo, y roca de escándalo (Primera de Pedro 2:8a), parecería estar detrás de la función de Yeshua como aquel que está puesto para caída y el levantamiento de muchos en Israel, y para ser señal de contradicción (Lucas 2:34b). En consecuencia, el Salmo 118 tiene un doble propósito para Pedro, brindándole la oportunidad de designar a Yeshua como el Mesías, así como de acusar al Sanedrín por Su muerte.

A los sabios les gustaba describirse a sí mismos como “constructores” porque amaban la Palabra de Dios y usaban un juego de palabras de Isaías 54:13 para expresar su punto. Donde dice: Y todos tus hijos serán enseñados por YHVH, Y la paz de tus hijos se multiplicará. Remplazan tus hijos (hebreo: banayik). Tus constructores (hebreo: bonayik) tendrán gran paz.85 Así, mientras ellos pensaban que estaban construyendo la Palabra de Dios, ¡en realidad la estaban derribando!, esa fue la acusación. Luego introdujo su punto final en sus corazones Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos en (4:12). Esto es ofensivo para esta época pluralista y liberal, pero es la clara enseñanza de la Biblia. Por lo tanto, el mismo nombre en el que se realizó la curación, es el único nombre por el cual uno puede ser salvo. La palabra salvo aquí es una forma del mismo verbo (griego: sozo) usado en 4:9 arriba para describir la curación del mendigo cojo. La salvación se encuentra sólo en Yeshua. ¡No hay otra manera!

Es fácil ver que este mendigo cojo es una imagen de nuestra salvación. Él nació lisiado y todos nosotros nacemos incapaces de caminar para agradar a HaShem. Nuestro padre Adán tuvo una caída y nos pasó su cojera (Romanos 5:12-21). El hombre también era pobre, y nosotros somos pecadores, estamos arruinados delante de YHVH, sin poder pagar la tremenda deuda que le debemos (Lucas 7:36-50). Él estaba fuera del Templo, y todos los pecadores están separados de Dios, por muy cerca que estén de la puerta. El mendigo cojo fue sanado completamente por la gracia de Dios (Efesios 2:8-9). Su curación fue inmediata, y nuestra curación espiritual también lo es en el momento de la fe (vea el comentario sobre La Vida de Cristo Bw – Lo que Dios hace por nosotros en el momento de la fe). El dio evidencia de lo que Dios había hecho en su vida al caminar, saltar y alabar a Dios, y al identificarse públicamente con los apóstoles, tanto en el Templo como en sus arrestos (4:14). También debemos dar evidencia de lo que Dios ha hecho por nosotros al caminar con Jesús al ser conformados a Su imagen (Romanos 8:29b).86

En la Gran Comisión, Jesús dijo: Id pues, discipulad a todas las gentes, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo; enseñándoles a guardar todas las cosas que os mandé. He aquí Yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin de los siglos (Mateo 28:19-20).

Dios estaba en el Mesías reconciliando al mundo consigo mismo, no tomándoles en cuenta sus pecados, y puso en nosotros la palabra de la reconciliación (Segunda Corintios 5:19). Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por el Mesías, y nos confió el ministerio de la reconciliación (Segunda Corintios 5:18). Dios nos ha dado el privilegio de instar a todos a llegar a Su favor y reconciliarse con Él. Pablo nos llama colaboradores y dice: somos colaboradores de Dios (Segunda Corintios 6:1). Yeshua aseguró nuestra salvación, nos puso en Su familia, nos dio Su Espíritu Santo y luego nos hizo Sus agentes de cambio. ¡Qué privilegio! Tenemos la mejor noticia del mundo y compartirla con los demás es la mayor bondad que puede mostrarle a alguien. La salvación se encuentra sólo en Jesús de Nazaret.87

La decisión: Observando entonces la osadía de Pedro y de Juan, y percatándose de que eran hombres del vulgo y sin letras, se asombraban, y reconocían que ellos habían estado con Jesús. Y viendo al hombre que había sido sanado, en pie con ellos, no tenían nada que oponer (4:13-14). Cuando vieron la audacia de Pedro y Juan y debido a su distintivo acento galileo, rápidamente se dieron cuenta que no tenían ninguna formación rabínica, y estaban asombrados. Obviamente, Juan habló, pero lo que dijo no quedó registrado. Ellos no tenían nada que oponer (por el momento) en respuesta porque la evidencia del milagro estaba justo frente a ellos. Los líderes sólo podían sacar una inferencia, pero ellos se negaron a sacar la conclusión obvia. Ellos se sentaron allí en silencio.

El Gran Sanedrín estaba reviviendo su peor pesadilla. Era como si estuvieran diciendo: “¡Estos hombres son como Jesús! Pensamos que resolvimos el problema de Yeshua cuando lo crucificamos, ¡pero ahora está peor que nunca! Ellos estaban proclamando con pruebas irrefutables que Él había resucitado de entre los muertos”.

Cuando ellos habían ordenado a Pedro y Juan que salieran de la cámara del concilio ubicada en el segundo piso de la Estoa Real, comenzaron a conferenciar entre sí: entonces les ordenaron que salieran fuera del Sanedrín, y deliberaban entre sí, diciendo: ¿Qué haremos con estos hombres? Porque ciertamente una notable señal milagrosa ha sido hecha por medio de ellos, manifiesta a todos los que viven en Jerusalén, y no podemos negarla. Sin embargo, para que no se divulgue más entre el pueblo, amenacémoslos severamente para que no hablen más en este nombre a ningún hombre (4:15-17). ¿Cómo pudo saber Lucas lo que sucedió detrás de las puertas cerradas? Sabemos que Pablo era miembro del Gran Sanedrín antes de ser salvo (6:8-7:60 y 26:10-11). José de Arimatea era a la vez un creyente y miembro del Consejo (Marcos 15:43), y Nicodemo, también un creyente secreto, probablemente también estaba en el Sanedrín (Juan 7:50). Lucas, en su extensa investigación (Lucas 1:3), habría consultado con ellos o con otros miembros del Consejo que llegaron a la fe más tarde.88

Y llamándolos, les ordenaron que de ningún modo hablaran ni enseñaran en el nombre de Jesús. Respondiendo entonces Pedro y Juan, les dijeron: Juzgad si es justo delante de Dios obedecer a vosotros antes que a Dios; porque nosotros no podemos callar lo que hemos visto y oído (4:18-20). Sin ninguna violación clara, el Sanedrín parece haber advertido a Pedro y a Juan que consideraba que sus actividades bordeaban la violación de la Ley Oral. Habiendo sido así advertidos, los apóstoles tenían la responsabilidad penal de no repetir el delito. Aunque Pedro y Juan se negaron a obedecer al Gran Sanedrín, ellos los trataron con respeto. Pero Pedro y Juan respondieron: Juzgad si es justo delante de Dios obedecer a vosotros antes que a Dios; porque nosotros no podemos callar lo que hemos visto y oído. Esta fue una encrucijada importante en la historia de la Iglesia. Si los apóstoles hubieran aceptado las exigencias del Concilio, toda la historia posterior de la Iglesia habría sido radicalmente diferente. Todo dependía de su voluntad de obedecer a ADONAI a toda costa – incluso de sus vidas.89

Si bien Pablo y Pedro ordenaron a los creyentes estar sujetos a las autoridades gobernantes (Romanos 13:1-7; 1 Pedro 2:13-17), parece haber ocasiones en que los creyentes pueden desobedecer a las autoridades gobernantes. La “desobediencia civil” puede definirse como cualquier acción realizada por un ciudadano individual que, por consideración a su conciencia personal, viola las leyes del gobierno que están en conflicto con la ley del poder superior de Dios. Encontramos numerosos ejemplos de desobediencia civil en las Escrituras: las parteras hebreas (Éxodo 1:15-17), los padres de Moisés (1:22-2:3), Rahab (Josué 2), Abdías (Primera de Reyes 18), los amigos de Daniel (Daniel 3), Daniel (Daniel 6), Pedro y los apóstoles (Hechos 4:19-20, 5:9), y Pablo (16:37-40). De estos ejemplos parece claro que cuando la ley civil y los mandamientos de las Escrituras están en oposición, debemos reconocer y obedecer el decreto superior: el decreto de Dios. Los mandamientos de Dios tienen prioridad sobre toda autoridad humana (5:29). Los ejemplos bíblicos de desobediencia civil se ven en las siguientes áreas: (1) protección de la vida humana; (2) protección del pueblo de Dios; (3) negarse a inclinarse ante un dios falso; (4) negarse a cesar la adoración personal a Dios; y (5) negarse a cesar la proclamación del evangelio.90

Ellos entonces, no hallando cómo castigarlos por causa del pueblo, amenazándolos aún más, los soltaron; pues todos glorificaban a Dios por lo sucedido, porque el hombre en quien había sido hecho este milagro de sanidad, tenía más de cuarenta años (4:21-22). Ante este desafío a su orden, el Concilio no pudo hacer más que repetir sus amenazas de lo que sucedería si los apóstoles volvían nuevamente a su corte. Todos estaban continuamente glorificando a Dios por lo sucedido. No habían quebrantado ninguna ley judía por lo que no había razón para castigarlos.

La oración: La noticia de que el Sanedrín había puesto en libertad a Pedro y Juan sin castigo fue motivo de regocijo entre la comunidad mesiánica. Y puestos en libertad, fueron a los suyos, y contaron todo lo que los principales sacerdotes y los ancianos les habían dicho. Y cuando ellos lo oyeron, alzaron unánimes la voz a Dios, y dijeron: Soberano, Tú eres el que hiciste el cielo y la tierra y el mar, y todo lo que en ellos hay; que, por medio del Espíritu Santo, por boca de tu siervo, nuestro padre David, dijiste: ¿Por qué se amotinan las naciones, Y los pueblos piensan cosas vanas? (Hechos 4:23-25). Los sacerdotes (gobernantes) eran saduceos y los ancianos eran fariseos. En esta oración usa Éxodo 20:11; Salmo 146:6; Nehemías 9:6.

¿Por qué se amotinan las naciones,

y los pueblos piensan cosas vanas? (Hechos 4:25 LXX)

Acudieron los reyes de la tierra,

Y los príncipes a una se reunieron Contra el Señor,

y contra su Ungido (Hechos 4:26 LXX).

Las Escrituras siempre tienen doble autoría, divina y humana, por eso aquí vemos al Ruaj HaKodesh y a David como autores de esta cita en el Salmo 2:1-2. Lucas cita el TaNaJ casi siempre en una forma correspondiente a la LXX o cercana a ella, y no de acuerdo con el Texto Masorético hebreo. Aquí se cita textualmente el Salmo 2:1-2 de la LXX.91 Fue el Señor soberano quien había profetizado en los Salmos acerca de los esfuerzos tontos de los gobernantes de este mundo para rebelarse contra el Mesías. El pensamiento tácito es bastante claro que es inútil que la humanidad conspire contra YHVH, quien no sólo creó el universo entero (Génesis 1:1), sino que también previó sus intrigas.

Porque verdaderamente se aliaron en esta ciudad contra tu santo Siervo Jesús, a quien ungiste, Herodes y Poncio Pilato, con los gentiles y los pueblos de Israel, para hacer cuanto tu mano y tu designio predestinaron que sucediera (4:27-28). El Salmo 2:1-2 dice: ¿Para qué se sublevan las naciones, Y los pueblos traman cosas vanas? Se alzarán los reyes de la tierra, Y con príncipes consultarán unidos, Contra YHVH y contra su Ungido. Esto verdaderamente expresa lo que había sucedido, en el sentido de que aquí, en Jerusalén, había habido una alianza contra el ungido de Dios. Tanto judíos como gentiles fueron responsables de la muerte de Cristo. Tanto Herodes Antipas como Poncio Pilato, junto con los romanos (gentiles) y el pueblo de Israel, se reunieron en esta ciudad contra Tu santo Siervo Yeshua quien fue ungido en Su bautismo. Vea el comentario sobre Isaías Iy – La Muerte del Siervo Sufriente y vea el comentario sobre La Vida de Cristo Bi – El Bautismo de Jesús. Pero también había un propósito divino: para hacer cuanto tu mano y tu designio predestinaron que sucediera. Todo era parte del plan de Dios.

Cuando oramos, debemos ver nuestras circunstancias a la luz de la Palabra de Dios. Por ejemplo, cuando estamos en conflicto, tal vez necesitemos cumplir con: revestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo, porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra los principados, contra las potestades, contra los gobernadores del mundo de las tinieblas, contra las huestes espirituales de maldad en las regiones celestes (Efesios 6:11-12).

Ver nuestras circunstancias a la luz de la Palabra de Dios, también significa ver cuando hay un problema de pecado. Si ese es el caso, quizás debemos orar como David, mientras callé, se consumieron mis huesos, en mi gemir todo el día. Porque de día y de noche tu mano se agravaba sobre mí, hasta que mi vigor se convirtió en sequedades de verano (Salmo 32:3-4). Quizás estemos en el mismo lugar que estaba David, en pecado y necesitando confesar y estar bien con Dios.

También usamos la Biblia para orar por las promesas de ADONAI. Cuando necesitamos fuerza, podemos orar para que nos dé, conforme a la riqueza de su gloria, ser fortalecidos con poder en el hombre interior por su Espíritu (vea Efesios 3:14-19). La Palabra de Dios hablará a nuestra situación.92

Entonces ellos comenzaron la oración meditando en Dios, y luego relataron en la oración las circunstancias pasadas y presentes. Luego hicieron tres peticiones de oración específicas. Primero, y ahora, Señor, considera sus amenazas y danos audacia. En segundo lugar, concede a tus siervos hablar tu palabra con todo denuedo. Y tercero, confirma Tu mensaje mientras extiendes la mano para que haya sanidades y señales milagrosas, y prodigios mediante el nombre de tu santo Siervo Jesús (4:29-30).

El efecto de la oración fue notable. Y cuando ellos oraron, el lugar en que estaban congregados tembló, y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con denuedo la palabra de Dios (4:31). Como en su relato de los acontecimientos de Shavuot (Pentecostés), el lenguaje de Lucas se asemeja a la entrega de la Torá (Ley) en el Monte Sinaí. Aquí recuerda la descripción de Éxodo 19:18: Todo el monte Sinaí humeaba, porque YHVH había descendido sobre él en el fuego, y su humo subía como el humo de un horno, y todo el monte se estremecía en gran manera.

… y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con denuedo la palabra de Dios (4:31). Y todos estaban llenos (controlados) del Espíritu Santo y continuamente hablaban con valor la palabra de Dios. Lo que ellos habían orado, lo recibieron. Una vez más, la llenura del Espíritu de Dios significa ser controlados por el Espíritu, y esto debe suceder continuamente a lo largo de nuestra vida. Y al igual que los apóstoles, somos vasos que gotean y necesitamos llenarnos continuamente del Espíritu Santo. Por lo tanto, los apóstoles recibieron poder para continuar testificando a pesar de la oposición proveniente del Tribunal Supremo judío, el Gran Sanedrín.

La Comunidad Mesiánica (iglesia) había afrontado con éxito su primera prueba de oposición. En lugar de ceder a la tentación de comprometer el evangelio, se volvió aún más audaz. La persecución también sirvió para acercar a los creyentes judíos a su Señor. En lo que se convertiría en un tema recurrente en la historia de la Iglesia, la oposición sólo hizo que la Iglesia invisible y universal de Yeshua el Mesías se fortaleciera. Como lo había hecho con José (Génesis 50:20), Dios tomó las malas intenciones de la humanidad y las usó para Sus propios propósitos.93

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2024-11-05T12:10:06+00:000 Comments

Aq – Pedro habla en el templo 3: 11-26

Pedro habla en el templo
3: 11-26

31-33 dC
Los acontecimientos de Hechos 3-8 transcurren con creciente preocupación por parte de los judíos, y especialmente de las autoridades judías en Jerusalén. La creciente tensión dio lugar a una acción de vigilancia contra Esteban, y luego a un esfuerzo autorizado bajo el mando del apóstol Pablo para perturbar y destruir ese nuevo movimiento mesiánico, lo que implicó persecución e incluso la muerte de los creyentes. La persecución llevó a varios creyentes como Felipe a ir a Samaria y dar testimonio de Yeshua.

Pedro habla en el Templo ESCUDRIÑAR: ¿En qué se parece esta situación a la anterior? (vea el enlace haga clic en Al – El Espíritu Santo llega en Pentecostés) Enumere todos los hechos acerca de Jesús que Pedro menciona aquí. ¿Cómo se compara este perfil de Jesús con el de 2:22-24? El nombre de una persona significaba todo su carácter. Por lo tanto, ¿qué quiere decir Pedro en el versículo 16? ¿Qué dice Pedro sobre el pueblo? ¿Cómo se sentiría como uno de ellos cuando escuchara el versículo 15? De la segunda proclamación registrada de Pedro, ¿cómo resumiría lo que significa ser salvo? A pesar de lo que Pedro dice sobre ellos en los versículos 13-15, ¿cómo le da esperanza al pueblo en los versículos 24-26? ¿Cómo se relacionan la bendición y la conversión?

REFLEXIONAR: De todas las verdades sobre Yeshua que Pedro enfatiza aquí, ¿cuál le impacta especialmente? ¿Por qué? ¿Cuándo es apropiado atacar con fuerza el pecado de una persona, como lo hizo Pedro en los versículos 13-15? ¿Cómo fue usted salvo? Si tuviera que explicar el significado del Mesías simplemente usando el TaNaJ, ¿qué pasajes usaría? ¿Qué indica el uso que hace Pedro del TaNaJ de lo valioso que es para su fe? ¿Cómo le ha traído tiempos de refrigerio el arrepentimiento y el volverse a ADONAI? ¿Cómo se puede utilizar eso como medio para animar a otros a cruzar la línea del conocimiento a la fe?

El patrón de incidentes de Shavuot se repite aquí, como la curación milagrosa del mendigo cojo desde que nació y va seguido de un discurso de Pedro ante la multitud asombrada (vea el enlace haga clic Ap Pedro cura a un mendigo cojo). En este caso Pedro nuevamente comienza tratando con un posible malentendido de la situación y luego procede a explicar cómo el poder de Yeshua, resucitado de entre los muertos, lo había curado. Luego, aprovechando la oportunidad, Pedro insistió en que el Mesías, a quien los judíos habían matado y que había sido glorificado por ADONAI, todavía estaba activo y vivo.71

La curación del mendigo cojo atrajo a una multitud alrededor de los tres hombres. Y mientras él tenía asidos a Pedro y a Juan, todo el pueblo, asombrado en gran manera, corrió juntamente hacia ellos al pórtico de Salomón (3:11). Esto era un corredor donde nuestro Señor había ministrado (Juan 10:23) y donde la comunidad adoraba (5:12). Como lo hizo en el primer discurso de Pedro, el Ruaj HaKodesh proporcionó una introducción dramática para su segundo discurso. De repente, Pedro tenía una gran reunión y aprovechó la oportunidad para explicar el significado de lo que había sucedido. Estuvo con los otros apóstoles en la Columnata de Salomón en el Templo, una ilustración viviente de que el poder de ADONAI descansaba sobre ellos. Por supuesto, esto planteaba una seria amenaza a la autoridad del Sanedrín (vea el comentario sobre La vida de Cristo Lg El Gran Sanedrín).

Y al ver esto Pedro, declaró al pueblo: Varones israelitas, ¿por qué os maravilláis de esto? ¿o por qué claváis los ojos en nosotros, como si por nuestro poder o piedad lo hubiéramos hecho andar? (3:12) Cuando Pedro vio la multitud reunida y la expresión de asombro en sus rostros, no estaba dispuesto a perder la oportunidad de testificarles. Pero antes de lanzarse a su discurso, formuló dos preguntas. Primero varones israelitas, ¿por qué os maravilláis de esto? Una leve reprimenda. Como pueblo del pacto, sabían que YHVH era un Dios que hacía milagros. Los milagros habían jugado un papel importante en su historia. Más recientemente, Yeshua había realizado milagros para autentificar que Él era el Mesías. Que Dios obrara otro milagro a través de sus apóstoles no debería haber sido una sorpresa para ellos. En segundo lugar, Pedro preguntó: ¿por qué claváis los ojos en nosotros, como si por nuestro poder o piedad lo hubiéramos hecho andar? Ellos debieron haber sabido que dos pescadores galileos no tenían el poder ni la piedad para realizar tal milagro por solos. Pero independientemente de lo que pensara la multitud, Pedro quería dirigir su atención a la fuente del milagro. La grandeza de su discurso fue que se trataba de Yeshua.

La explicación inmediata no llega hasta el versículo 3:16 más abajo; pero, antes que nada, Pedro necesitaba preparar el escenario. Él tomó el tema de su discurso y lo relacionó con el nombre de Yeshua el Mesías. Presentó varios de los muchos nombres de nuestro Señor, todos los cuales tienen implicaciones mesiánicas. El Dios de Abraham, de Isaac y Jacob, el Dios de nuestros padres, glorificó a su Siervo Jesús, a quien por cierto vosotros entregasteis y rechazasteis en presencia de Pilato, cuando éste había decidido soltarlo (3:13). Vea el comentario sobre La Vida de Cristo Ln El Juicio Civil y vea el comentario La Vida de Cristo Lq – Jesús condenado a ser crucificado. Entonces Pedro insistió en su punto contra los judíos. Pero vosotros negasteis al Santo y Justo, y pedisteis que os fuera concedido un hombre homicida, y matasteis al Autor de la vida, a quien Dios resucitó de los muertos, de lo cual nosotros somos testigos (3:14-15). Pero rechazaron al Santo y Justo y pidieron que sea soltado el homicida (bar-Abbas, que significa salvación, hijo del padre). Entonces, si bien bar-Abbas era en realidad culpable, la verdadera salvación, El Siervo de Dios, Yeshua, no era culpable. Sin embargo, matasteis al Autor de la vida (vea el comentario de Isaías Iy La Muerte del Siervo Sufriente).

Y por medio de la fe en su nombre, a éste que veis y conocéis, su nombre lo ha fortalecido, y la fe que viene por medio de Él, le ha dado esta total sanidad delante de todos vosotros (3:16). Luego, después de señalar que él no tenía nada que ver con el milagro, y que Dios les había enviado al Mesías a quien habían rechazado, Pedro junta los dos conceptos para explicar la curación. En algún momento, no sabemos cuándo, el mendigo creyó en Yeshua como el Mesías.

Pero Pedro no dejó al pueblo sin esperanza cuando llegó a su conclusión: Y ahora hermanos, yo sé que lo hicisteis por ignorancia, como también vuestros gobernantes (2:17). Los gobernantes actuaron según Primera Corintios 2:8. Los hermanos eran sus compañeros judíos. En los mandamientos de la Torá había una diferencia entre pecados deliberados y pecados de ignorancia (Levítico Capítulos 4 y 5; Números 15:22-31). La persona que pecó audazmente descaradamente era un rebelde contra YHVH y era culpable de un gran pecado y sufriría el juicio más severo. Sería declarado cherem, que significa estar dedicado a la destrucción. Tal persona sería “excluida” de la comunidad (Números 15:30-31), lo que podría significar excomunión e incluso muerte. El pecador descarado y desafiante fue condenado, pero a la persona que pecó sin saberlo y sin intención deliberada se le dio la oportunidad de arrepentirse y buscar el perdón.72

Y ahora hermanos, yo sé que lo hicisteis por ignorancia, como también vuestros gobernantes; pero Dios cumplió así lo que había predicho por boca de todos los profetas: Que su Ungido había de padecer (3:17-18). Pero su ignorancia no perdonó su culpabilidad, por lo que Dios predijo por boca de todos Sus profetas en el TaNaJ: Que su Ungido había de padecer. Al no dar los pasajes específicos del TaNaJ, Pedro asume que su audiencia ya conoce los pasajes relevantes y ellos están de acuerdo en que lo aplican a la muerte del Mesías, de lo contrario, en este punto él habría perdido a su audiencia.73 Esta era una audiencia totalmente judía, había judaísmo con Yeshua y judaísmo sin Él (la misma elección, junto con la posibilidad de rechazar a ambos, enfrentan los judíos hoy).

A la luz de lo sucedido, ¿qué debería hacer Israel ahora? Arrepiéntanse y cambien de opinión acerca de Jesús, que Él no estaba endemoniado, sino que es el Mesías tan esperado (vea el comentario sobre La Vida de Cristo Ek Es sólo por Belcebú, el Príncipe de los Demonios, que este hombre expulsa a los demonios). Si ellos hacen esto, se obtendrán ciertos resultados.

ADONAI perdonará vuestro pecado: Habiendo anunciado el crimen, presentado la evidencia y explicado la naturaleza de su pecado, Pedro les ofreció perdón. ¡Qué extraño que un fiscal se convierta en abogado defensor y juez perdonador! La carga de Pedro era animar a sus hermanos israelitas a confiar en el Mesías y experimentar Su salvación misericordiosa.74

¿Qué les dijo él que hicieran? Por tanto, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados (3:19). La tinta en el mundo antiguo no tenía contenido ácido y no “mordía” el papel. Casi siempre se podía limpiar con un paño húmedo. Pedro dice que ¡ADONAI borrará nuestro historial de pecado así como así!75 Esta frase se usa en el libro de Apocalipsis tanto de ADONAI que enjuga nuestras lágrimas: Dios enjugará toda lágrima de sus ojos (Apocalipsis 7:17b y 21:4a); y también del Mesías que se niega a borrar los nombres de los vencedores del Libro de la Vida: El que así venza se vestirá con vestiduras blancas, y no borraré jamás su nombre del libro de la vida, y confesaré su nombre delante de mi Padre y delante de sus santos ángeles (Apocalipsis 3:5).

El arrepentimiento, sin embargo, implica más que una mera decisión intelectual. Es un cambio de mentalidad que resulta en un cambio de comportamiento. El diseño de Dios es que la gente se arrepienta (17:30). Para lograr ese propósito, Él utiliza al menos cuatro formas. Primero, el conocimiento de la verdad revelada de YHVH en las Escrituras debería hacer que las personas se arrepientan (Mateo 11:21-24; Lucas 16:30-31; Juan 20:30-31). Segundo, nuestro Señor usa el dolor por el pecado para llevar a las personas al arrepentimiento (Segunda Corintios 7:9-10). En tercer lugar, la bondad y la bondad de Dios deben motivar a las personas a arrepentirse. Y una motivación final para arrepentirse es el temor al juicio final (17:30-31).76

El mensaje de arrepentimiento no era nuevo para los judíos, porque Juan el bautista (inmersor) lo había predicado al igual que Yeshua (Mateo 3:2, 4:17). En cierto sentido, el arrepentimiento es un regalo de Dios (Hechos 11:18); en otro sentido, es la respuesta del corazón al ministerio de convicción del Ruaj HaKodesh (26:20). La persona que se arrepiente sinceramente tendrá pocos problemas en poner su fe en el Salvador. 77

En la primera parte de su discurso, Pedro dio a sus oyentes abundante evidencia de que Israel había llegado a una conclusión equivocada acerca de Yeshua el Mesías. Luego los llamó a arrepentirse y revertir el veredicto de ellos acerca de Yeshua y poner su fe en Él. Para ayudar a persuadirlos, les promete resultados: Dios perdonará su pecado, el Reino vendrá, el Mesías regresará, se evitará su juicio individual y se realizará la bendición.

El Reino vendrá: A nivel nacional, el arrepentimiento nacional de Israel marcará el comienzo del Reino Mesiánico. Por tanto, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que de la faz del Señor vengan tiempos de refrigerio espiritual, y envíe a Jesús el Mesías, que os fue anunciado de antemano para que de la faz del Señor vengan tiempos de refrigerio espiritual, y envíe a Jesús el Mesías, que os fue anunciado de antemano (3:19-20). La frase tiempos refrigerio espiritual es una figura retórica judía que significa el Reino Mesiánico (vea el comentario sobre Isaías Cz El Reino de Emanuel). Jesús no vendrá trayendo las bendiciones del Reino Mesiánico (vea el comentario de Isaías Gj – La Restauración de Israel), sin el arrepentimiento de Israel (3:19b).

El Mesías regresará: …para que de la faz del Señor vengan tiempos de refrigerio espiritual, y envíe a Jesús el Mesías, que os fue anunciado de antemano; a quien es menester que el cielo reciba hasta los tiempos de la restauración de todas las cosas, de las que habló Dios por boca de sus santos profetas desde el principio del mundo (3:20-21). Dios Padre, enviará a Yeshua el Mesías designado para Israel (vea el comentario sobre Isaías Kg – La Segunda Venida de Jesucristo a Bosra). Pedro en realidad estaba llamando al arrepentimiento nacional porque la decisión de los líderes de Israel había negado al Mesías y lo había condenado a morir. Por lo tanto, Pedro declaró que, así como los líderes judíos una vez llevaron a la nación a rechazar a Jesús como el Mesías, algún día deben llevar a la nación a aceptar a Jesús como el Mesías, vea el comentario sobre Apocalipsis Ev La Base para la Segunda Venida de Jesucristo. Pero la nación no se arrepintió (y esto ciertamente no fue una sorpresa para YHVH), por lo que el mensaje del evangelio eventualmente también incluiría a los samaritanos en Hechos 8 y a los gentiles en Hechos 10. Pero, ahora, el cielo debe recibirlo (1:9-11), y allí debe permanecer hasta el tiempo de la restauración de todas las cosas, el Reino Mesiánico, del que Dios habló hace mucho tiempo a través de la boca de sus santos profetas desde el principio del mundo (3:21).

Se puede evitar el juicio individual: Como ejemplo de un profeta a través del cual Dios habló, Pedro cita a Moisés, el primer y más grande profeta de Israel. Moisés habló del Mesías venidero: El Señor vuestro Dios os levantará Profeta de entre vuestros hermanos, como yo; a Él oiréis en todas las cosas que os hable; y sucederá que toda alma que no escuche a aquel Profeta será desarraigada del pueblo (3:22-23). ¿En qué se diferenciaba Moisés de todos los demás profetas? Está explicado en Números 12:8. Mientras que YHVH habló a otros profetas por sueños y visiones, en el caso de Moisés, habló cara a cara. El punto aquí es que Jesús es un profeta como Moisés a quien Dios le habla cara a cara. Y tal como Moisés ordenó, Yeshua es ahora a quien debemos obedecer. Moisés advirtió sobre las consecuencias de rechazar al Mesías: y sucederá que toda alma que no escuche a aquel Profeta será desarraigada del pueblo. Nuevamente, en este contexto el Profeta se aplica a Yeshua. Pero para aquellos individuos de esa generación que rechazaron al Mesías, el juicio estaba por llegar (vea el comentario sobre La vida de Cristo Mt – La destrucción de Jerusalén y el Templo en Tishá B’Av en el año 70 dC). Lucas cita el TaNaJ casi siempre en una forma correspondiente a la LXX o cercana a ella, y no de acuerdo con el Texto Masorético hebreo. Aquí Deuteronomio 18:15 y 19 se citan cerca pero no corresponden exactamente a la LXX.78 No sólo Moisés profetiza sobre la venida de Jesús, asimismo todos los profetas que han hablado desde Samuel en adelante, también anunciaron estos días (3:24); Samuel fue el último juez y profeta.

La bendición se realizará: Pedro cierra con una nota positiva. A pesar de su pecado de rechazar al Mesías, todavía eran el pueblo del pacto (Romanos 9:3-5). Vosotros, en verdad, sois hijos de los profetas, o sea, son herederos de las promesas hechas por ADONAI a través de los profetas. Debido a la misericordia, gracia y amor de Dios por Israel, Él no los rechazó permanentemente, incluso cuando ellos rechazaron a Su Hijo (Romanos 11:2). Vosotros sois los hijos de los profetas, y del pacto que Dios hizo con nuestros padres, al decir a Abraham: En tu simiente serán benditas todas las familias de la tierra (3:25). Ésta es la promesa fundamental del TaNaJ. Una vez más, Lucas cita Génesis 22:18 cerca de la LXX, pero no correspondiente exactamente a ella.79

Por lo tanto, el Dios de nuestros padres, glorificó a su Siervo Jesús (3:13b). A vosotros primeramente, Dios, habiendo resucitado a su Siervo, lo ha enviado para que os bendiga, a fin de apartar a cada uno de vuestras maldades (3:26). Ya hemos visto este tema del al judío primero en la venida del Espíritu de Dios a la comunidad mesiánica en Shavuot (vea Al El Espíritu Santo llega en Pentecostés). Él acababa de señalar que los gentiles se beneficiarían de la venida de Cristo, pero habría un orden divino y eso sería para los judíos primero. Pablo dice: Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo el que cree: al judío primeramente, y también al griego (Romanos 1:16). Este sermón no es una nueva oferta del Reino Mesiánico, sino que establece los requisitos para el establecimiento del Reino. Esto es el de la salvación nacional de Israel. 80

Al revisar esta sección de Hechos, usted no puede evitar quedar impresionado con algunas verdades prácticas que deberían animarnos a todos en nuestro testimonio de Cristo.

Dios es paciente con los pecadores perdidos. Los líderes de Israel habían rechazado el ministerio de Juan el Bautista (inmersor) y el ministerio de Yeshua, y aun así ADONAI les dio otra oportunidad para arrepentirse y ser salvos (vea el comentario sobre La Vida de Cristo Fl – Juan el Bautista Decapitado). Ellos habían negado y matado a su propio Mesías, y aun así Dios pacientemente detuvo Su juicio y envió Su Espíritu para tratar con ellos. Hoy, el pueblo de Dios también necesita paciencia mientras damos testimonio a un mundo perdido.

El verdadero testimonio implica la “mala noticia” del pecado y la culpa, así como las “Buenas Nuevas” de la salvación mediante la fe en Jesucristo. No puede haber verdadera fe en el Mesías a menos que primero haya arrepentimiento del pecado. El ministerio del Ruaj HaKodesh es convencer a los pecadores perdidos (Juan 16:7-11), y Él lo hará si testificamos fielmente y usamos la Palabra de Dios correctamente.

La manera de llegar a las masas es ayudando al pecador individual. Pedro y Juan ganaron al mendigo lisiado, y su vida transformada llevó a la conversión de dos mil hombres (sin contar a las mujeres), ¡creciendo a cinco mil (4:4) de tres mil en el último conteo (2:41)! El siervo de Dios que no tiene tiempo para trabajar personalmente con pecadores individuales, no tendrá muchas oportunidades de ministrar a grandes multitudes. Al igual que Jesús, los apóstoles se tomaron tiempo para las personas.

La mejor defensa de nuestra fe es una vida cambiada. El mendigo sanado fue la “prueba A” en la defensa de Pedro de la resurrección de Yeshua el Mesías. En sus ministerios evangelísticos, el predicador metodista Samuel Chadwick solía orar por “un Lázaro” en cada campaña, algún “gran pecador” cuya conversión conmocionaría a la comunidad. Obtuvo esta idea de Juan 12:9-11. Dios respondió sus oraciones reunión tras reunión como hombres y mujeres infames y malvados que confiaron en Cristo y fueron testigos a través de sus vidas cambiadas.

Cada vez que Dios bendice, Satanás aparece para oponerse a la obra y silenciar a los testigos, y muchas veces el diablo usa a personas religiosas para hacer su trabajo sucio. Así como el Sanedrín se opuso al ministerio del Mesías, también se opuso al ministerio de los apóstoles, y el dios de este mundo se opondrá a vosotros hoy (Segunda Corintios 4:4); vea el comentario sobre La Vida de Cristo Lg – El Gran Sanedrín. Lo importante no es que estemos cómodos, sino que el nombre del Señor sea glorificado a través de la predicación del evangelio.

ADONAI ha prometido bendecir y usar Su Palabra, así que seamos fieles en testificar. Yeshua incluso oró para que nuestro testimonio tuviera éxito: Pero no ruego sólo por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno como Tú, Padre, en mí, y Yo en ti; que también ellos estén en Nosotros, para que el mundo crea que Tú me enviaste (Juan 17:20-21). Por lo tanto, tenemos todos los motivos para sentirnos alentados. Hay poder en el nombre de Jesús, por eso no debemos tener miedo de testificar y llamar a los pecadores al arrepentimiento.

¡El nombre de Yeshua el Mesías todavía tiene poder! Si bien es posible que hoy no realicemos los mismos milagros que se vieron en los días de la primitiva Comunidad Mesiánica/Iglesia, aún podemos reclamar la autoridad de Jesucristo como Él nos ha ordenado en Su Palabra. Podemos predicar en su nombre el arrepentimiento para perdón de pecados a todas las gentes (Lucas 24:47b) para que las personas crean y tengan vida en Su nombre (Juan 20:30). Podemos darle a alguien un vaso de agua fresca en Su nombre (Marcos 9:41), y podremos recibir un niño en Su nombre (Mateo 18:5). Estos ministerios pueden no parecer tan espectaculares como sanar a un lisiado, pero aun así son importantes para la obra de Dios.

Podemos pedir en Su nombre si oramos (Juan 14:13-14, 15:16, 16:23-26). Cuando le pedimos algo al Padre en el nombre de Yeshua el Mesías, es como si el Señor mismo lo estuviera pidiendo. Si recordamos esto, nos ayudará a evitar que pidamos cosas indignas de Su nombre. Sí, el nombre de Jesucristo todavía tiene autoridad y poder. Salgamos al mundo con Su poderoso Nombre.81

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2024-11-05T12:04:32+00:000 Comments
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